Gil Manuel Hernández: "Cada vez las fallas son más insustanciales, hay que promover la sátira"
Gil Manuel Hernández: "Cada vez las fallas son más insustanciales, hay que promover la sátira"
VALENCIA. La renovación en el Museu Faller no es solo física. A la remodelación de sus salas y la modificación de su discurso museístico se suma ahora un proyecto que quiere llevar uno de los museos más visitados de la ciudad al terreno virtual. No se trata de su incursión en el mundo de las redes sociales -que, por cierto, estrenaron hace pocas semanas- sino del lanzamiento de una web mediante la que permiten la visita virtual de todas y cada una de sus salas del mismo modo en el que funciona Google Street View que, precisamente, desde hace algunos años permite realizar este tipo de visitas en algunos de los contenedores culturales más destacados del mundo.
El encargado de llevar a cabo la faena ha sido el ruso Maxim Sodomovsky, que ha realizado encargos similares para hoteles o galerías de arte y que, a través de un programa de colaboración con Junta Central Fallera, ha desarrollado el museo virtual, que se enmarca dentro del proyecto de renovación puesto en marcha por su director, Gil Manuel Hernández, una serie de actuaciones imposibles de separar de la posible declaración como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, cuya resolución se conocerá el próximo mes de noviembre.
El museo ya puede ser visitado en ordenadores y tablets, una versión en 3D y con una visión de 360 grados creada a través de una cámara Matterport Pro 3D. Maxim Sodomovsky forma parte del programa The Falles Festival Ambassador’s Club, una iniciativa de la delegación de Promoción Exterior de Junta Central Fallera para reclutar a amantes de las Fallas que quieran difundir la fiesta en otros países, un programa que ya ha contado con participantes de Australia, Tailandia, Nicaragua, Holanda, Argentina, Letonia, Luxemburgo, Estados Unidos, Francia o Alemania.
El 'embajador ruso' visitó el Museu Faller este verano, cediendo el proyecto de manera altruista al Ayuntamiento de Valencia, que lo ha incorporado a su página web que, esperan, sirva para posicionar el espacio en el mapa turístico. No en vano, el museo se convirtió en uno de los puntos recomendados en la sección '36 horas en...' del periódico The New York Times. Esta supone la base de un proyecto más ambicioso que quiere sumar en el mismo museo virtual información específica de cada pieza y que se integrará en una futura web renovada en la que ya se está trabajando.
"Estamos trabajando es su promoción exterior y recientemente organizamos una visita guiada para cinco importantes tour operadores. Ahora queremos trabajar también en Internet con la apertura de las redes sociales del Museu Faller y ahora con esta completa visita virtual", indica el concejal de Cultura Festiva, Pere Fuset. "La candidatura de las Fallas como Patrimonio de la Humanidad es una oportunidad para la que busquemos la excelencia y pongamos en valor el aspecto cultural de nuestra fiesta. La remodelación del Museu Faller, su plan museológico y su oficialización definitiva son pasos significativos en esta dirección".
La primera fase de la reforma museográfica, que se llevó a cabo en julio con una inversión total de 59.791 euros, consistió en el cambio de iluminación de las salas, con focos leds para mejorar la calidad de la iluminación y reducir así el consumo energético; se repintaron todas las salas, con cromatismos diferenciados en cada una de ellas para singularizar las colecciones y favorecer la conservación preventiva de las piezas; también se sustituyeron diversos carteles históricos bastante deteriorados, fundamentalmente de los años 30, por impresiones de los mismos años que se han conservado en el Archivo Histórico Municipal; y se cambiaron los carteles explicativos y señales del museo para hacer más accesibles los contenidos de las colecciones a las personas visitantes.
En una segunda fase de la reestructuración del Museu Faller, que comenzará en otoño, se restaurarán ninots indultados y carteles anunciadores, se introducirán nuevas tecnologías audiovisuales y elementos gráficos en los muros, para contextualizar las diversas etapas históricas de la colección de ninots indultados, y se procederá al diseño de actividades culturales para mejorar la conexión del Museo Fallero con las comisiones falleras y reforzar la llegada de un turismo cultural de calidad. Además, los carteles y las señales también estarán en Braille próximamente, gracias a una colaboración con la ONCE.
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