VALÈNCIA. El renovado Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) completa este viernes un paso esencial para su transformación en banco público. La aprobación por parte del Consell del nuevo reglamento orgánico y funcional (ROF) de la entidad que dirige Manuel Illueca supone iniciar la cuenta atrás para la escisión del organismo, que actuará como agencia de promoción económica de la Generalitat pero separada de ella, con presencia de independientes en sus órganos de gobierno y con acceso a los fondos del Banco Central Europeo (BCE) y del Banco Europeo de Inversiones (BEI).
La aprobación del ROF es uno de los hitos fundamentales en la reconversión del IVF presentada hace justo un año, ya que consagra la entrada de consejeros independientes en los órganos de gobierno por un periodo de tres años antes de su escisión en el conocido como Banc de la Generalitat.
La separación, que será incluida en la Ley de Medidas que acompañará a los presupuestos de la Generalitat de 2016, se hará efectiva a partir del próximo 1 de enero. Cuando eso ocurra, el IVF seguirá bajo el paraguas de la Generalitat y continuará ejerciendo las tareas de supervisión bancaria, la gestión de la deuda y las actividades de cariz más social en colaboración con las distintas conselleries. Por ejemplo, los microcréditos para desempleados en colaboración con el Servef o el anticipo de subvenciones para dar liquidez a los centros de atención social a personas con diversidad funcional.
Mientras, el escindido Banc de la Generalitat tendrá acceso a financiación ajena al quedar fuera del perímetro SEC de la Generalitat y estará encargado de la financiación al sector privado. Su activo será de 500 millones de euros.
Una de sus claves será el funcionamiento como instrumento profesionalizado por la entrada de consejeros independientes, al margen de criterios políticos, según explica el propio Manuel Illueca. Su participación en los distintos órganos de gobierno de la entidad se concreta en el ROF que se aprueba este viernes, pero los nombres se darán a conocer en las próximas semanas. El perfil será el de profesionales de prestigio reconocido que cuenten con un amplio consenso político, para lo cual ya se han iniciado contactos.
El consejo general del Banc de la Generalitat estará integrado por diez vocales: cinco consejeros dominicales (altos cargos de la Generalitat) y otros cinco consejeros independientes que en principio serán un representante sindical, otro de la patronal y tres "expertos de reconocido prestigio". Estos independientes y el directos del IVF deberán cumplir los criterios de idoneidad del Banco de España.
El nuevo ROF también contempla la creación de varias comisiones: Inversiones, Riesgos y Auditoría, Nombramientos y Transparencia y RSC. La primera, la de inversiones, estará compuesta por seis miembros, tres dominicales y tres independiente con voto de calidad del presidente. En las otras tres habrá un consejero dominical y dos independientes.
El reglamento que el Consell aprueba este viernes también recoge la reordenación de competencias que se produjo al ceder el Ivace la gestión de los créditos a empresas. La devolución de estas competencias al IVF provocó una de las primeras crisis en el seno del Consell entre el PSPV y Compromís por el control de algunas áreas.
Aunque el nuevo reglamento ya recoge la entrada de independientes, una vez se produzca la separación de la nueva entidad se aprobará otro reglamento para su funcionamiento al margen de la Generalitat. La composición del consejo general variará para que la mayoría sea independiente.