VALÈNCIA. Las necesidades, las virtudes y los retos de la innovación valenciana fueron el centro del debate en el último desayuno informativo organiza por Valencia Plaza en colaboración con la red de institutos tecnológicos Redit y el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE). El encuentro, que tuvo lugar en uno de los salones ubicados en el hotel SH Valencia Palace, congregó a representantes de la administración valenciana, del ámbito de la innovación y del mundo empresarial para tratar, precisamente, el papel de la colaboración entre instituciones y la parte privada para el desarrollo innovador en la Comunitat Valenciana
A la cita acudieron, por parte del IVACE, su directora general Julia Company; y por parte de Redit, el presidente de la red Fernando Saludes y el director general Gonzalo Belenguer. También estuvieron presentes en el encuentro el presidente de la comisión de i+D+i de la Confederación Empresarial de la Comunidad Valenciana (CEV), Miguel Burdeos; el coordinador de gestión de proyectos de la Cámara de Comercio de Valencia, Rafael Mossi; el secretario general de la Unión de Consumidores, Vicente Inglada; el responsable de relaciones públicas y asuntos corporativos de BigBuy, Jose Poyatos; y el director de i+D+i de Royo Group, César Taboas.
Abrió el desayuno el presidente de Redit, Fernando Saludes, felicitándose por el crecimiento de la red y su repercusión en el mundo empresarial, para señalar a continuación la necesidad de "crear unas condiciones" en el sector para obtener un "efecto multiplicador". "Cuando se muestra confianza, los empresarios respondemos", señaló sobre la colaboración entre administraciones y el sector privado. Saludes recordó que en 2021 más de la mitad de los ingresos de la red de instutos, el 56% concretamente, procedió de las empresas, un "importe fundamental".
En ese sentido, recalcó el importante "impacto social de la innovación" de Redit y el posicionamiento que otorga al ecosistema innovador. Así, insistió en que por cada euro invertido en innovación, hay un retorno de 8 euros, según algunos estudios. Y por ello, subrayó, lo "más importante es medir el impacto económico y social" de los proyectos que se financian "porque es la única manera de fomentarlo" y "compararlo" para, así, "orientar nuestras políticas".
A lo largo del desayuno también intervino el director general de Redit, Gonzalo Belenguer. A su juicio, aseveró, el reto en el mundo de la innovación es "trasladar esa visión al ciudadano". Esto es, apostillo, que el ciudadano "tiene que valorar que para poder tener los estándares de vida que hay, es necesaria esa innovación". En ese sentido, señaló la necesidad de intentar que la ciudadanía "valore a los colectivos y las empresas que apuestan por ese valor diferencial".
Pero, ¿qué es necesario para fortalecer el sector en la Comunidad Valenciana? En opinión de la directora general del IVACE, Julia Company, "lo que hay que construir es un ecosistema y que todos los agentes pongan lo mejor de sí mismos", con el objetivo final de establecer cuantas más interrelaciones mejor. Para ello, aseguró que es fundamental, además de consolidar y ensanchar el presupuesto para impulsar la innovación, también hay que fomentar la cooperación entre pymes, habitualmente las que más dificultades encuentran para innovar, y "acercar la innovación a la sociedad".
Así pues, Company señaló que una buena idea sería articular una suerte de sistema Erasmus entre empresas y conectarlo con profesores e investigadores de las universidades e institutos para que puedan hacer "estadías en empresas concretas" durante un tiempo. Así, aseguró, los vasos comunicantes entre el mundo empresarial y el académico y tecnológico podría encontrar muchas más sinergias. Y además de todo ello, dijo, la innovación que se potencie ha de ser sostenible: "Si no es sostenible, no es innovación", sentenció.
El director de i+D+i de Royo Group, César Taboas, opinó que la administración ha de funcionar como "una bisagra". Así, señaló que en el mundo empresarial se ha de tener "una visión de largo plazo" en proyectos de innovación, y que muchas veces "la administración puede dar el espaldarazo final" para abordarlos. Así, subrayó la necesidad de que estos proyectos "sirvan de conexión", con una "visión de la innovación abierta", y así poder "conectar con otros hubs para generar un efecto clúster y tener propuestas de valor". Así, dijo, ese es el "rol fundamental" que debería asumir la administración, y "el IVACE lo está acometiendo".
El responsable de relaciones públicas y asuntos corporativos de BigBuy, Jose Poyatos, convino en la necesidad de confianza en el sector: "Tampoco pedimos mucho, poder presentarnos a proyectos de innovación con ayuda de la administración", señaló al respecto. Además, sumó a estas peticiones las de mayor suelo terciario para desarrollar y que se faciltie la devolución del IVA la exportación, o que se favorezcan eventos internacionales en València. En general, dijo, son "aspectos de acompañamiento".
Por su parte, el coordinador de gestión de proyectos de la Cámara de Comercio de Valencia, Rafael Mossi, señaló que las pymes son las más reacias a innovar: "Hay recelos, cuando una empresa pequeña está acostumbrada a vivir al día o a la semana y le hablas de proyectos y de ayudas, el sistema no ayuda, hay miedo de los empresarios". Y por eso, se mostró de acuerdo con lo que dijeron otros asistentes: "Tenemos que casar las universidades y los institutos tecnológicos con las pymes; la administración ha de ser un catalizador".
En el sector, según el presidente de la comisión de i+D+i de la CEV, Miguel Burdeos, "hay un buen crecimiento en términos relativos". Ahora bien, si bien aseguró que tenemos "un nivel científico y tecnológico muy alto", también explicó que el tejido industrial es "muy flojo" al haber "pocas empresas medianas o grandes y muchas pymes". Eso, subrayó, "hace que cueste mucho desarrollar innovación". Pero no es que la pyme tenga miedo, según Burdeos, sino que "lo que no tiene son medios ni capacidad para acceder a muchas cosas". Y por eso insistió en intentar que las empresas crezcan de tamaño, "si no, será más difícil" la innovación.
Por otro lado, el secretario general de la Unión de Consumidores, Vicente Inglada, instó a dejar de pensar "solo con una visión economicista sobre la innovación" y a tener en cuenta otros factores resultantes de ella como la calidad de vida de la ciudadanía. "Eso es fundamental para ver que este modelo es positivo", por lo que recalcó la importancia de "trabajar con entidades intermedias porque el ciudadano pide a las empresas transparencia y calidad en el uso de recursos públicos. Por eso, dijo entender que la administración sea "conservadora", pues está gestionando el dinero de los ciudadanos.