VALÈNCIA. El port de Catarroja, uno de los lugares más identitarios de la Albufera, acogió este lunes la celebración del I Concurso Profesional de All i Pebre de la localidad. Un total de 24 chefs compitieron por ostentar el título ganador de una competición dividida en dos modalidades: la tradicional y la creativa.
En la versión original, el ganador fue el restaurante Casa Granero (Serra) con un premio de 2.000 euros, seguido en el segundo puesto por Arantxa-2 (Catarroja) con un galardón de 1.000 euros y finalmente, en tercera posición, Espacios, Eventos y Catering CanCela (Sueca) con una dotación de 500 euros. En la modalidad creativa, el oro se lo llevó el restaurante Pinea (Ayora), mientras que la plata fue para La Suculenta (Benicàssim) y el bronce para Vinatea (Morella), con los mismos importes.
Este plato valenciano tiene su origen en Catarroja. La anguila, la patata, el ajo, el pimentón y la guindilla son los ingredientes en los que se basa la receta original y los que han marcado la historia del municipio, llevando la tradición más allá de las fronteras locales.
A lo largo de medio siglo, la puesta en marcha de un certamen popular - el Concurs Internacional d'All i Pebre- ha demostrado cada año la importancia de este manjar a través de sus altas cifras de participación. Hace una semana tuvo lugar la edición número 50, a la que se apuntaron 150 personas y donde se ofreció una degustación de 2.000 raciones. Ahora, la ciudadanía ha cedido el testigo a los cocineros y cocineras profesionales para expandir el patrimonio gastronómico a otro nivel.
Según afirmó durante el evento la vicealcaldesa de Catarroja, Lorena Silvent: "Este nuevo concurso es una forma de hacer un homenaje a toda esa gente que durante tanto tiempo ha hecho que la tradición continúe y ha estado cocinando anónimamente". Pero ha habido una novedad: mientras que algunos optaron por preparar un plato clásico, otros tuvieron la posibilidad de inscribirse en la categoría que apuesta por la innovación; el único requisito era mantener la esencia.
De esta manera, las inmediaciones del puerto se llenaron rápidamente con un ambiente de entusiasmo. Tanto los participantes como los pescadores de la zona, la corporación municipal y vecinos y vecinas de pueblos cercanos acudieron a una cita que prevé convertirse, a partir de ahora, en un encuentro anual. El paisaje, la música y el olor producido por la cocción atraían a los visitantes a las mesas de los chefs, acercándose con curiosidad con el fin de obtener respuestas sobre las técnicas empleadas por los expertos.
A pesar de que los fogones se encendieron sobre las 12 horas, anteriormente, esa misma mañana, se procedió a la pesca de las anguilas en l'Albufera. La Comunitat de Pescadors de Catarroja fue la encargada de acompañar a los asistentes en las barcas y transmitirles la historia de la receta, a la vez que se sumergían en un paraje que no dejó indiferente a nadie y que permitió conectar con uno de los enclaves más significativos del territorio.
Adhesión a la Red Gastroturística
Tampoco faltó en el concurso la presencia del secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, que -además de aprender sobre el all i pebre- aprovechó la visita para firmar, junto a la vicealcaldesa del municipio, el convenio de adhesión a la Red Gastroturística de la Comunitat Valenciana y su marca 'L'exquisit Mediterrani'.
"Catarroja hace una labor formidable para la recuperación de un relato gastronómico muy ligado al territorio, a la cultura, al patrimonio, a la esencia de vivir al lado de un espacio excepcional como es la Albufera. La gastronomía es una de las muchas miradas posibles de la Albufera y es posible expresarlo en una convocatoria como esta", expresó Colomer.
Asimismo, hizo entrega a la corporación municipal del distintivo que acredita al Concurs Internacional d'Allipebre como una Fiesta de Interés Turístico Autonómico. Para lograr este reconocimiento, fue esencial el papel de David Jorge García, un vecino de la localidad que se encargó de realizar la memoria presentada: "Pensé que era el momento de que el acto más importante de Catarroja fuese reconocido, se lo merece. Las personas encargadas de hacer la valoración no han tenido ninguna duda", explicó a este periódico.
Al igual que David Jorge García, son muchas las personas -especialmente en esta localidad- que han crecido acompañadas del plato tradicional, presente en la mesa cada semana y, consecuentemente, en muchos momentos importantes. Debido a este peso emocional en la vida diaria de los catarrogins, así como por el valor culinario que posee, el pueblo busca que adquiera la fama que se merece, siguiendo la línea del éxito de la paella valenciana. Así pues, este primer concurso profesional potencia todavía más el trabajo hecho hasta la fecha, que ya ha dado sus frutos e impulsa el all i pebre por toda la Comunitat.
Plato tradicional de all i pebre. Foto: VP
