El futuro alcalde de Sueca, Julíán Sáez, junto a la vicepresidenta de la Diputación por Ens Uneix, Natalia Enguix.VALÈNCIA. El Partido Popular ha desatado el nudo gordiano en el que se había convertido la política local de Sueca. O ha permitido desatarlo. Después de un mes de debate sobre si habría moción de censura al socialista Dimas Vázquez o si este seguiría de alcalde en minoría o en pacto con el PP, finalmente hay desenlace: sí que se celebrará pleno de cambio de alcaldía.
La formación popular, con tres concejales en el Ayuntamiento de la capital de la Ribera Baixa, aportará uno solo, el decisivo y necesario, para sumar 11 junto a los siete de Compromís y a los tres de Sueca per Davant (SxD) y alcanzar la mayoría absoluta que catapulte al portavoz de esta última formación, Julián Sáez, a la alcaldía. Será la candidata en 2023 a la vara de mando del PP, Carolina Torres, quien suscriba la moción.
Según confirma fuentes de los tres partidos implicados en la medida, el acuerdo ya está cerrado a falta de presentarse oficialmente el escrito con las 11 firmas por el registro de entrada del Consistorio. Esta circunstancia podría dilatarse hasta principios de la próxima semana.
A partir de ese momento contarán diez días hábiles para debatirse en un pleno convocado a los efectos a las 12 del mediodía, tal como determina el artículo 197 de la Ley Orgánica de Régimen Electoral General.
El próximo ejecutivo, según diversas fuentes consultadas implicadas en la negociación, lo configurarán únicamente diez concejales: los tres de SxD y los siete de Compromís, incluidos los tres de la corriente Iniciativa que habían mostrado más reticencias a un acuerdo con el PP. Esta última formación se quedará fuera del ejecutivo. Ni tan siquiera su portavoz, que suscribirá la moción, entrará.
Eso sí, desde visión externa respaldará los puntos que requieran de mayoría absoluta. Compartirán la futura oposición con los ocho concejales del PSPV.
"Hemos querido desbloquear la situación y facilitar que haya un gobierno que gestione la localidad", apuntan desde el PP. Precisamente han sido las dudas dentro de la agrupación local de esta formación -y, a menor escala, las internas en Compromís- las que han alargado las negociaciones.
SxD y la dirección compromisaria apostaron desde hace casi un mes por la moción de censura tras arremeter el primero contra el PSPV, por entonces su socio de gobierno y destituir el alcalde posteriormente a sus ediles de sus delegaciones.
Ante esa tesitura de quedarse en minoría, Dimas Vázquez contactó con los concejales del PP, también tres, para introducirlos en su gobierno. A partir de esa maniobra se han sucedido los debates en la agrupación popular y las directrices de las cúpulas provincial y regional que rechazaban el pacto con el PSPV y, finalmente, han propiciado un acuerdo de mínimos e indirecto con Compromís.
La base de la alianza la ha constituido la insistencia de Ens Uneix, socio estratégico del PP en la Diputación de Valencia. Como ya adelantó Valencia Plaza, el lobby de partidos locales que configura Unión Municipalista y del que forman parte tanto la citada Ens Uneix como SxD ha hecho hincapié, desde el principio, en que Sáez fuera alcalde.
Para ello necesitaban que el Partido Popular respaldara la moción de censura. Y lo han conseguido finalmente, aunque sea con lo justo. "Existe un respeto y confianza entre los socios de Diputación de Valencia", señalan al respecto desde el PP para explicitar la buena sintonía entre ambas formaciones.
"Comienza una etapa nueva, con otras políticas y con la estabilidad en el gobierno alrededor de una persona independiente. El PP apoyaba el cambio, lo que pasa es que se ha producido una dilación en el tiempo. Julián Sáez ha tenido la calma y la perseverancia para liderar el cambio", apuntan desde Ens Uneix, mediador decisivo en el aludido desenlace.
