La dirección popular admite que todas las vías están abiertas: de momento, Ramón-Llin sustituye como portavoz al investigado Novo en el pleno de este jueves
VALENCIA. Los registros, detenciones y dirigentes investigados han elevado la presión en el PPCV. Al margen de la gravedad del caso y la influencia negativa en la imagen de la formación popular que ha alcanzado la actualidad política nacional, la imputación -ahora llamada investigación- del presidente local del partido y portavoz municipal en el consistorio, Alfonso Novo, ha generado un problema orgánico de difícil resolución.
La dirección popular anunció este martes la suspensión cautelar de militancia de los implicados en el caso. Una circunstancia especialmente delicada en el caso de la máxima autoridad del partido en la capital, que ayer prestó declaración ante la Guardia Civil y, en los próximos días, lo hará ante el juez. El delito que presuntamente se le atribuiría a Novo es el blanqueo de capital en relación con la financiación del partido.
El debate interno es intenso. Desde la dirección del grupo admiten que todas las vías "están abiertas" hasta disponer de más información. Una de ellas, es la de imponer una gestora en la dirección local y apartar así a Novo. No obstante, el temor de adoptar esta medida radica en la posibilidad de que se pudiera situar al frente de la misma a un dirigente que luego pudiera verse salpicado por la investigación judicial, con lo que los populares volverían a tener el mismo problema.
Para esta misión suenan diversos nombres dentro del grupo municipal: Maria Àngels Ramon-Llin es una de ellas, dado que cuenta con la simpatía de la líder del PPCV, Isabel Bonig, y va a ser la que, por el momento, sustituya a Novo como portavoz municipal en el pleno de este jueves. Otros posibles para el puesto son los concejales Cristóbal Grau y Alberto Mendoza.
Tampoco se descarta tratar de sostener la situación permitiendo que la actual secretaria general (número dos) del PP en Valencia, la edil Beatriz Simón, tome las riendas de forma temporal mientras el caso se esclarece. No obstante, la dirigente también se encuentra dentro del grupo municipal y existen dudas de si la investigación puede salpicarla no a ella, sino a buena parte de miembros del grupo. En este caso, la solución más segura sería designar al frente de la gestora a algún militante o dirigente destacado que hubiera estado alejado del consistorio en los últimos años.
Tratar de mantenerse en standby tiene su problemática. Todo apunta a que la declaración de Novo ante el juez se producirá en los próximos días, pero, según señalan fuentes populares, en el mejor de los casos para el edil, y esto es que se archivara la causa contra él, esto no tendría lugar hasta que se levantara el secreto de sumario y el juez procediera al sobreseimiento de la misma respecto a Novo. Una decisión para la que, según las fuentes consultadas, quedan varias semanas: quizá demasiado tiempo en un escenario político tan agitado como el que se vive actualmente en la Comunitat Valenciana y en España.
En esta línea, y de mantenerse la imputación, las fuentes del partido consultadas por este diario también señalan que la presidenta regional, Isabel Bonig, pediría a Novo que abandonara su acta de concejal, lo que implicaría un varapalo más para la estructura local de partido ya de por sí debilitada desde las elecciones municipales de 2015.