Betoret, Contelles y Ferrer afirman que no están de acuerdo con expulsar a los imputados tras el levantamiento pues “cada caso es singular”
VALENCIA. Los principales dirigentes del Partido Popular Provincial de Valencia le han dado alas, políticamente hablando, a los imputados por blanqueo de capitales del Grupo Popular del Ayuntamiento de Valencia.
En la rueda de prensa convocada este jueves por el presidente provincial del PPCV, Vicente Betoret, para responder ante su futura imputación por el caso Imelsa, tanto Betoret, como la portavoz del PP en la Diputación, Mari Carmen Contelles, y el secretario general en la provincia, Vicente Ferrer respondieron a preguntas de Valencia Plaza sobre cuál es su postura sobre los concejales imputados, teniendo en cuenta la no renuncia de Betoret.
Así, esgrimieron que no están de acuerdo en expulsar cuando se abra el secreto de sumario. "Hay que analizar caso por caso. Cada caso es singular” aseveraron.
Los primeros espadas de los populares abren una senda, hasta ahora cerrada por ellos mismos, que cambia el color de la línea roja marcada por su propio partido. Del rojo se ha pasado al rosa, ya que tanto Contelles como Betoret y Ferrer esgrimieron que, aunque se levante el secreto de un sumario, eso no quiere decir que se tengan pruebas contra las personas imputadas por juez y fiscal.
Con sus palabras se unieron a las dichas con anterioridad por la exalcaldesa y actual senadora Rita Barberá en cuanto al hecho de anteponer los estatutos (sin sentencia no hay entrega de acta) a las dimisiones por una imputación judicial por presunta corrupción.
Los tres dirigentes dejaron claro que tenían que “ser ellos”, o más bien sus asesores jurídicos, quienes diluciden si hay que solicitar o no la dimisión, y por tanto el acta, de las personas imputadas por blanqueo de capitales. Eso choca frontalmente con sus propias afirmaciones. Choca frontalmente con las peticiones demandadas hasta la fecha de responsabilidades políticas y, sobre todo, con las afirmaciones realizadas ayer de que: “el partido está por encima de las personas”.
La rueda de prensa se tuvo que realizar por las declaraciones prestadas por Marcos Benavent, pero no sólo Betoret, y los 115 imputados hasta ahora dentro de la Operación Taula, están en el punto de mira del hasta ahora principal confidente de los investigadores.
En la puerta del juzgado, tras su última declaración judicial, el ‘yonki del dinero’ aseveró que: “Más de un aforado está siendo investigado por la Guardia Civil y el juzgado”. Así, con una simple frase, Benavent ha puesto en la picota a más de una persona del Partido Popular. De hecho, fuentes cercanas a este partido informaron que “más de un aforado tiene miedo de poder salir en alguna de las grabaciones aportadas por Benavent a la investigación”.