VALÈNCIA. (EP) El PSOE ha conseguido ganar unas elecciones generales en la Comunitat Valenciana después de casi tres décadas, puesto que las candidaturas socialistas al Congreso de los Diputados no eran las más votadas en esta autonomía --considerada en los últimos años un feudo del PP-- desde los comicios de octubre de 1989 con el 'histórico' Ciprià Ciscar al frente de la lista por Valencia.
Así, han tenido que pasar casi 30 años para que el PSOE recupere el liderazgo en unas elecciones generales en la Comunitat con listas encabezadas por dos ministros, el de Fomento, José Luis Ábalos, por Valencia y el Ciencia, Pedro Duque, por Alicante, y Susana Ros, por Castellón.
En este 28 de abril de 2019, el PSOE ha sido la fuerza más votada logrando 10 escaños, frente a los 7 del PP, seguido por Cs, con 6; Podemos-EU, 5; Vox, 3 y Compromís, 1. En 1989, con un espectro de formaciones menos plural, los resultados fueron de 16 escaños para el PSOE y 9 para los 'populares'.
En aquel momento, el cabeza de lista por Valencia de los socialistas fue Ciprià Ciscar, quien, precisamente el pasado mes de marzo anunció que, después de haber estado en la Cámara Baja durante ocho legislaturas, no iba a concurrir a estas elecciones pese a que el partido le había propuesto para integrarse en las listas al Senado.
A partir de ahí, el ascenso del PP en la Comunitat Valenciana se hizo patente cita electoral tras cita electoral hasta hoy, cuando se ha invertido la situación. En concreto, de acuerdo a los datos del Ministerio del Interior consultados por Europa Press, en la convocatoria al Congreso de junio de 1993, el PP sobrepasó al PSOE por tres escaños: 15 contra 12; en marzo de 1996, la diferencia se redujo a dos escaños, aunque el PP siguió manteniendo 15; en el mismo mes pero de 2000, la distancia a favor del PP se amplió a siete escaños, al tener 19 frente a 12 de los socialistas.
Esta misma tendencia continuó en los siguientes comicios de 2004, donde el PSOE cogió un poco aire y obtuvo 14 escaños, mientras el PP seguía al frente, pero bajando a 17; en marzo de 2008, el resultado fue de nuevo favorable a los 'populares', que recuperó dos escaños, hasta los 19, mientras que el PP se quedaba en 14; en noviembre de 2011, PP repetía victoria doblando al PSOE, con 20 a 10 diputados; en diciembre de 2015, los socialistas registraban su peor dato, con seis diputados, frente a los 13 del PP, resultado que se mantuvo inalterado en junio de 2016.
Mientras que el electorado de izquierdas ha vuelto a acercarse al PSOE, la coalición Compromís ha sufrido cierta fuga de su electorado. De hecho, esta formación, que decidió en estos comicios concurrir separada de Podemos --con quien sí confluyó en las pasadas elecciones-- ha perdido tres puestos en el Congreso, pasando de cuatro a uno. De esta manera, solo conserva su plaza el portavoz, Joan Baldoví, que es tradicionalmente el político español mejor valorado en el CIS.
En su momento, el propio Baldoví explicó que la decisión de no ir de la mano de Podemos obedecía a que "al igual que había pasado en Andalucía, el ciudadanos tendría un abanico mucho más completo para votar opciones progresistas".
Se da la circunstancia de que el último CIS auguraba entre uno y dos diputados para Compromís, un resultado del que dudaba la líder de la coalición, Mónica Oltra, que defendía que siempre han ido "contra viento y encuestas" y que habían sido "la sorpresa" en las dos últimas convocatorias generales.
Oltra también había cuestionado la decisión del 'president' y socio de gobierno, Ximo Puig, de adelantar a esta fecha los comicios valencianos para hacerlo coincidir con los nacionales asegurando que era "la única de las decisiones no adoptadas por unanimidad" y que "la singularización de la identidad valenciana en las elecciones no era compatible con convocar las dos al mismo tiempo". Además, consideraba que no había razones políticas para ello.
Por su parte, Ciudadanos ha aguantado el tipo e, incluso, ha mejorado sus datos al ganar un diputado. Si en 2016 y 2015 aportó cinco puestos al Congreso, ahora habrá seis representantes de la Comunitat Valenciana en los escaños de la formación naranja.
La fórmula Unides Podem-Esquerra Unida atesorar en la Comunitat Valenciana cinco escaños, menos de los 9 que consiguió en junio de 2016 con la confluencia A la valenciana (que formaban Podemos, IU y Compromís) y de los mismos 9 registrados en 2015 cuando únicamente concurrían juntos Podemos y Compromís. En esta última cita, IU no logró representante por la Comunitat.
En la irrupción por primera vez de Vox en el Congreso, la Comunitat Valenciana envía a tres representantes.