Ximo Puig junto a Alfredo Pérez Rubalcaba tras su victoria en el congreso de 2012VALENCIA. Este sábado se celebra en Madrid el Comité Federal del PSOE que debe establecer el calendario para las primarias y para el próximo congreso del partido donde se elegirá la hoja de ruta política de la formación socialista así como la nueva dirección y al secretario general. Unas fechas de las que dependen también los procesos autonómicos, que según marcan los estatutos deben celebrarse con posterioridad al cónclave estatal.
No obstante, en la federación valenciana ya se hacen cuentas con el calendario a seguir de confirmarse lo que han apuntado diversos medios de comunicación en los últimos días y que también ratifican distintas fuentes de la cúpula socialista: las primarias para elegir al nuevo líder tendrían lugar en mayo y el congreso se celebraría la segunda o tercera semana de junio.
Así, los estatutos señalan que los procesos autonómicos deben celebrarse tras el cónclave federal "en un plazo inferior a 60 días", si bien no especifica un periodo mínimo entre uno y otro. Es decir, suponiendo que el congreso estatal se celebre a mediados de junio, habría margen -aunque probablemente ajustado- para celebrar la cita del PSPV antes de agosto, un mes que según las normas socialistas, no es "hábil" para este tipo de procesos.
Fuentes de la cúpula en Blanquerías no esconden sus dudas y evitan pronunciarse categóricamente sobre estos supuestos hasta que no se conozcan las fechas concretas y se tengan las correspondientes reuniones de los órganos autorizados, además del peso específico que lógicamente tendrá la opinión del secretario general y presidente de la Generalitat, Ximo Puig. Ahora bien, varios 'pesos pesados' de la dirección del PSPV manifiestan en privado las bondades de conseguir cerrar el proceso autonómico antes de agosto, quizá el último fin de semana de julio, concretamente entre el 28 y el 30.
Echando la vista atrás, en 2012 el congreso federal se celebró entre el 2 y el 4 de febrero y el del PSPV tuvo lugar entre el 30 de marzo y el 1 de abril, lo que invita a pensar que sí sería posible en esta ocasión cerrar todos los procesos antes de agosto. Ahora bien, cabe recordar que en esta ocasión también se deben celebrar las primarias para la elección del secretario general previamente, con lo que el calendario se estrecha sensiblemente por los márgenes para la recogida de avales y campaña de los aspirantes, unos aspectos no desarrollados todavía en el ámbito autonómico puesto que no se ha acometido un proceso de estas características para las federaciones.
No obstante, algunos de los dirigentes consultados sí verían factible acometer las citadas primarias y posteriormente el cónclave en un espacio de seis semanas, que sería el margen disponible si el federal tiene lugar entre el 16 y 18 de junio. Algo más complicado sería, admiten, si se celebrara el siguiente fin de semana.
Las ventajas de cerrar el proceso del PSPV antes de agosto se centran, según apuntan algunos dirigentes, en evitar que la etapa estival, concretamente el citado mes inhábil, se convierta en un carrusel de búsqueda de apoyos e informaciones mediáticas que incrementen la tensión entre cargos intermedios y militancia. De la misma manera, situando de forma tan consecutiva los procesos se fomenta la continuidad de participación e implicación de las bases y cargos intermedios, señalan las citadas fuentes. En esta línea, tachar del calendario el congreso nacional del PSPV permitiría tras el verano ir acometiendo el resto de procesos -provinciales, comarcales y locales- desde septiembre, cerrándolos antes de que concluyera el año y evitando así entrar en 2018 todavía con cónclaves por dirimir.
