VALÈNCIA. La mayoría obtenida por el PSPV-PSOE en la Diputación de Valencia se plasmará en algunas áreas que generaron polémica en la pasada legislatura. Así, según el reparto hecho en la corporación provincial, los socialistas tendrán pleno control sobre las empresas públicas Divalterra -sin cogerencias- y Egevasa. Por su parte, Compromís, dominará Girsa, relacionada con el tratamiento de residuos.
Así, el PSPV-PSOE dominará por completo la sociedad que provocó la caída del anterior presidente de la Diputación, Jorge Rodríguez, debido a la Operación Alquería. Un ente que se convirtió en un grave quebradero de cabeza durante el anterior mandato y que terminó con varios altos cargos investigados por diversos delitos.
El reparto, por otro lado, evidencia el aumento de la distancia entre ambas formaciones que se dio en las pasadas elecciones locales. Así, el PSPV logró 13 diputados provinciales por los cinco cosechados por la coalición valencianista, lo que se traslada en el mayor poder de los socialistas, que se quedan con delegaciones como Turismo que en el anterior mandato obraron en poder de Compromís.
Otra de las cuestiones llamativas en el reparto es la reducción de vicepresidencias de la Diputación en esta legislatura. Así, el máximo responsable de la corporación provincial será el socialista Toni Gaspar, mientras que la número dos será la concejal de Bonrepòs i Mirambell, Maria Josep Amigó, de Compromís, quien repite en el cargo. En la línea jerárquica le siguen una vicepresidencia segunda y tercera que, en ambos casos, pertenecerán al PSPV-PSOE, si bien la corporación solía caracterizarse por un mayor número de estos cargos.
En cuanto a los dirigentes socialistas que ocuparán estos puestos, las fuentes consultadas dan como favorito al alcalde de Burjassot, Rafa García, próximo al ministro José Luis Ábalos, y como posible aspirante al otro puesto al primer edil de Mislata, Carlos Fernández Bielsa, si bien distintas fuentes apuntaban en las quinielas a una mujer de un municipio más pequeño para el cargo.
Un mestizaje que también se dará en Infraestructuras, donde los socialistas controlarán Carreteras y Vías mientras que los valencianistas se harán responsables del Plan de Movilidad Sostenible. Por otro lado, Compromís controlará casi en su totalidad el área de Cultura excepto en lo que se refiere a las Bandas de Música.
En cuanto al área de Cooperación Municipal, Coordinación Institucional y Cohesión Territorial, el PSPV tendrá el control de casi todos los departamentos excepto en Cooperación Institucional y Mancomunidades, que serán para Compromís, algo similar a lo que ocurre en Bienestar Social y Calidad Democrática, donde la coalición solo mandará en Diversidad y Gobierno Abierto.
Por último, el área de Medio Ambiente y Sostenibilidad sí tendrá más presencia de la coalición, aunque el PSPV se hará con el mencionado control -en principio en exclusiva- de Divalterra y Egevasa.
En cuanto a las competencias que dependen de la Presidencia, los socialistas mantendrán el dominio excepto en Normalización Lingüística, que estará en manos de Compromís.