VALÈNCIA. El Puerto de València amplía el proceso de venta de su parcela de 280.000 metros cuadrados en Parc Sagunt. Los aspirantes a hacerse con este suelo, por el que se ha interesado Mercadona, tendrán hasta el 5 de noviembre para formalizar sus ofertas, algo más de dos meses por encima del límite fijado inicialmente.
La decisión, según explican fuentes de la entidad que preside Aurelio Martínez, responde a la petición de uno de los interesados de poder contar con más plazo para redactar su oferta. La coincidencia del periodo estival con la fase final para formalizar las propuestas ha impedido a los ofertantes recabar de la administración alguna documentación necesaria en el tiempo previsto, explican las mismas fuentes, motivo por el que han pedido a la Valencia Plataforma Intermodal (VPI) que alargue el plazo.
El pasado 27 de marzo VPI aprobó los pliegos del concurso que estaba obligada a convocar para desprenderse de la parcela Z1, la segunda más grande del complejo y situada justo al lado de otra de 350.000 metros en la Mercadona va a construir su principal centro logístico en España. Aurelio Martínez ya avanzó hace más de un año el interés de dos compradores por quedarse ese suelo.
Por el momento no se ha formalizado ninguna propuesta, pero las mismas fuentes aseguran que existen al menos dos interesados en la parcela.
El precio de salida son 31 millones de euros, lo mismo que VPI pagó en su día más 300.000 por los gastos de notaría en los que incurrió VPI. La forma de pago será al contado.
Las ofertas se valorarán hasta en 60 puntos en la parte económica y hasta en 40 puntos en la técnica. En este segundo apartado se ponderarán cuatro asuntos con puntuaciones de 1 a 10. Se trata de cuestiones como el grado de relación de la actividad a desarrollar con los tráficos marítimos o la expectativa sobre la creación de empleo en la zona.
Para que se valore este apartado el aspirante deberá acreditar que sus planes para el suelo poseen interés portuario. En concreto, se exigirá que la actividad a desarrollar genere unos movimientos mínimos de 20.000 TEU o 200.000 toneladas al año. Otro aspecto que pesará es la incidencia de la actividad en Sagunto y en las áreas geográficas próximas, indicando expresamente los empleos que se crearán y las diferentes etapas estimadas para ello.
Además, se han establecido condiciones adicionales en los pliegos, como la obligación de que la industria o actividad a desempeñar en la parcela deberá comenzar en el plazo máximo de 4 años desde la firma de la escritura y mantenerse un mínimo de 3 años desde el inicio de la producción. Tampoco se podrá ni vender ni enajenar total o parcialmente el suelo en el plazo de tres años desde el inicio de la actividad.
Esta extensión de los plazos retrasa un poco más el desenlace de una venta que ya acumula más demora de la prevista. Uno de los motivos ha sido el tira y afloja entre VPI y la sociedad gestora de Parc Sagunt –participada al 50% por las Generalitat y el Estado a través de Sepides– sobre algunas exigencias fijadas para la venta.
El centro de las discrepancias fueron el destino de las posibles plusvalías que se pudieran obtener por la venta de la parcela, que le fue adjudicada a VPI en 2011 por 30 millones de euros.
El Puerto está autorizado a vender la parcela, pero no especular con ella, ya que queda obligado a destinar las eventuales ganancias a inversiones "acorde con el objeto social" de VPI y Parc Sagunt. Lo contrariohubiera quebrantado los principios según los cuales se expropiaron en su momento los terrenos para construir el parque.
Antes de que Mercadona entrara en escena con la compra de la mayor parcela en Parc Sagunt, un hecho que dio un vuelco a la situación de quiebra de la sociedad gestora del polígono al reactivar la demanda de empresas por este espacio, Parc Sagunt y VPI llegaron a un acuerdo mediante el que el recinto portuario adelantaría a Parc Sagunt el dinero necesario para evitar la entrada en concurso de acreedores y reanudar las obras. A cambio, obtuvo unas mejores condiciones de pago de la parcela que se adjudicó hace cinco años.
El escenario cambió cuando Mercadona se quedó la parcela más grande, una operación a la que siguieron otras adquisiciones que elevan la bolsa de suelo en manos de la empresa valenciana por encima del medio millón de metros cuadrados.
A raíz del interés surgido por los terrenos que en su día fueron adjudicados a VPI, el Puerto solicitó a Parc Sagunt la preceptiva autorización, expresa y ante notario, según quedó reflejado en la escritura de compraventa.
El suelo que VPI se adjudicó por 30 millones está actualmente valorado en 25, pero la entidad ya ha provisionado en sus cuentas el ajuste de valor del terreno. De ellos, el Puerto desembolsó algo más de 6 millones en concepto de señal, pero el pago de los 24 restantes estaba congelado porque las obras del parque logístico quedaron paralizadas ante la baja demanda y la falta de liquidez.