ELCHE. El Congreso Nacional del PSPV se celebra, por primera vez, bajo un formato en el que el secretario general, en este caso Ximo Puig, ya llega elegido por un proceso de primarias. Eso no significa que en el cónclave esté todo decidido o vaya a desarrollarse bajo un manto de placidez para el líder de los socialistas valencianos.
Así, al margen de la Ejecutiva del partido ante la que los delegados solo pueden abstenerse o votar en contra y es, por tanto, un órgano predeterminado por Puig, sí puede haber disputa en otros apartados del cónclave del PSPV. Uno de ellos, el principal, es el Comité Nacional del partido, además otros como los miembros designados para formar parte del Comité Federal del PSOE.
Este mismo viernes, en los pasillos de la Institución Ferial Alicantina (IFA) donde tiene lugar el congreso, ya se hablaba en ciertos círculos de la composición del citado comité. Un órgano para el que el sector liderado por el alcalde de Burjassot, Rafa García, quien plantó cara a Puig en las primarias obteniendo un 42% de los votos, pretende obtener el mismo porcentaje de representación.
Un envite que, a priori, desde el sector de Puig parecen dispuestos a resistir. En este sentido, cabe recordar que los afines al secretario general se llevaron en el proceso de asambleas el 70% de los delegados por el 30% de la corriente 'sanchista' que lidera Rafa García. Unos números -no coincidentes con lo logrado en las primarias- que desde este sector justifican en que no hubo "generosidad" de los 'ximistas' en las agrupaciones donde solo se repartían dos delegados.
En esta línea, afines de Rafa García no descartaban presentar el domingo una lista alternativa para el Comité Nacional a la que ponga sobre la mesa Puig, con lo que se iría a votación y cada sensibilidad obtendría los representantes según porcentaje en el recuento.
La situación, como es habitual en este tipo de cónclaves, tendrá -ya se vislumbraban este mismo viernes- episodios de tensión y prolongadas negociaciones a lo largo de la jornada de hoy. De inicio, desde el 'ximismo' no se teme a una lista alternativa y se habla de un 30% de concesión, que es la proporción de número de delegados que se le atribuye a García. Desde la otra orilla, se considera que en una votación se podría superar esa cifra, especialmente si la Ejecutiva dada a conocer por Puig deja ciertos sinsabores en algunos de los que le apoyaron, lo que conllevaría negociaciones a múltiples bandas que a su juicio podrían incrementar los apoyos de una hipotética lista alternativa.
Cabe recordar, por otro lado, que la importancia del Comité Nacional, entre otras muchas cuestiones, es esencial en un punto de los estatutos que podría afectar a Puig en el futuro. Sobre esto, en la formación socialista está establecido que un presidente autonómico no debe someterse a primarias para ser candidato salvo que se produzca la petición expresa por la mayoría del Comité Nacional. Este es uno de los motivos -además del lógico interés por el control en una estructura de vital importancia- por lo que hay especial interés por parte del 'ximismo' de tener este órgano bien atado.