MADRID, (EP). "Correr es un deporte cíclico de impacto que puede ser la causa de una lesión, sobre todo cuando no tenemos en cuenta factores de riesgo como es el exceso de peso, los errores en el entrenamiento, algunos factores externos como la dureza y estabilidad del terreno o el tipo de zapatillas", ha afirmado el director médico del Instituto de Traumatología Estévez en el Hospital Vithas Nuestra Señora de América, el doctor José Carlos de Lucas.
El 'running' es un deporte al alcance de casi todos, ya que sólo es necesario calzarse unas zapatillas y salir a la calle, pero como ha advertido el doctor De Lucas, es importante tener en cuenta los riesgos que supone realizar esta actividad sin estar preparados, para así aprovechar todos los beneficios y evitar lesiones.
"El exceso de peso es un riesgo para los 'runners' porque a mayor peso, mayor impacto, y precisamente ese impacto contra el suelo que repercute en todo el cuerpo es el que causa las lesiones", ha explicado. Por otro lado, siempre es conveniente consultar con algún experto antes de comenzar con una práctica nueva para saber realizarlo de la mejor forma, ya que aunque sea algo tan 'fácil' como correr, también hay que evitar los errores.
Por otro lado, "son muchos los médicos que recomiendan elegir un buen tipo de zapatillas, consultando a un experto que nos recomiende las que mejor se adaptan al pie y la práctica de la persona". Además, como ha indicado el doctor De Luca, las características del terreno como el desnivel o la dureza causan muchas de las lesiones, por lo que hay que tenerlo muy en cuenta.
Las lesiones más comunes a las que se enfrenta un corredor que realiza una mala práctica son las que afectan a los pies como "la fascitis plantar, la tendinopatía aquilea y los edemas óseos o fracturas de estrés". Otras de las articulaciones que más sufre es la rodilla, donde suelen ser comunes "la tendinopatía rotuliana, el Síndrome de la cintilla iliotibial y el Síndrome rotuliano". Por último, el especialista ha apuntado también a la tibia como diana de las lesiones, ya que pueden aparecer casos de periostitis tibial.
El doctor De Luca, coincidiendo con el Día de la Actividad Física el 6 de abril, ha explicado qué debemos tener en cuenta para prevenir cada lesión y qué hacer para convertir la práctica del 'running' en más saludable aún.
"La fascitis plantar se trata de una inflamación y degeneración de la fascia del pie, que es un tejido fibroso que recubre a los músculos del pie. Se puede evitar con una correcta elección del calzado y ejercicios adecuados de estiramiento. Cuando se presenta hay que utilizar taloneras de descarga, además de comenzar con un programa adecuado de rehabilitación basado principalmente en ejercicios, así como cumplir el reposo deportivo", ha comentado el doctor.
Respecto a las tendinopatías, el experto ha diferenciado entre la aquilea y la rotuliana según la zona a la que afecta. "La tendinopatía aquilea produce un dolor más localizado en la zona media del tendón de Aquiles que se intensifica tras el ejercicio. El tratamiento inicial es un programa adecuado de ejercicios de rehabilitación, basado en estiramientos y fortalecimiento progresivo, así como reposo de actividad de impacto".
"La rotuliana es una degeneración del tendón rotuliano, en su inserción en el hueso. Lo que más predispone esta lesión es correr en superficies duras, mala adaptación a las cargas de entrenamiento, mal calentamiento y el abuso de correr con mucho desnivel. El tratamiento debe empezar con frío local, reposo deportivo de impacto y tratamiento rehabilitador con fortalecimiento progresivo y estiramientos adecuados", ha explicado.
Otra de las lesiones es el síndrome de la cintilla iliotibial. El especialista ha indicado que se suele presentar "como un dolor fuerte en la parte externa de la rodilla, que aparece de forma progresiva durante la carrera. Los terrenos desnivelados lo favorecen, y para evitarlo es importante realizar estiramientos del glúteo mayor y piramidal, junto con fortalecimiento de isquiotibiales".
Por último, Del Luca ha señalado la lesión que afecta a la tibia, la periostitis tibial, que consiste en "una inflamación de la membrana que recubre la tibia y produce dolor generalmente en el tercio inferior de la cara interna de la tibia. Los factores que la desencadenan son un mal calzado, una hiperpronación y el abuso de correr en superficies duras". De Luca ha concluido con el tratamiento inicial que se debe seguir en este caso, que "como en todas las lesiones, debe tratarse con frío, con reposo deportivo y con un plan de rehabilitación para flexibilizar la musculatura adyacente".