MADRID (EFE). El Tesoro español celebrará el jueves una subasta de bonos a cinco años y obligaciones a quince años y a diez años indexadas a la inflación, con casi una cuarta parte de sus necesidades de liquidez para 2016 ya cubiertas, el 21,5 %, a pesar de la inestabilidad política y los vaivenes de los mercados.
El precio del petróleo, actualmente por encima de los 35 dólares, y el miedo de los inversores a una nueva recesión mundial que eche por tierra todos los avances logrados han sido la nota dominante en los mercados esta semana.
Mientras, la economía española avanza poco a poco y el jueves confirmó un crecimiento del 3,2 % en 2015 y del 0,8 % en el cuarto trimestre respecto al anterior, con una contribución similar de la demanda nacional y una aportación menos negativa de la demanda exterior, según el Instituto Nacional de Estadística (INE).
La confianza en la economía, por parte de los consumidores y empresarios, se redujo de nuevo en la eurozona y en la UE en febrero, al bajar de manera significativa y en más de un punto en ambas áreas en comparación con el mes anterior, según los datos publicados hoy por la Comisión Europea (CE).
En la última subasta, que tuvo lugar el pasado martes, España emitió letras a 3 y 9 meses por importe de 4.171,3 millones de euros, a un interés marginal negativo en ambos casos, lo que significa que volvió a cobrar a los inversores por comprar su deuda, aunque algo menos que en la subasta previa.
Esto se debe a que el interés marginal negativo de las letras a tres meses fue del 0,196 %, frente al 0,252 % aplicado el pasado 26 de enero, al igual que en las letras a nueve meses, que salieron a un -0,014 %, frente al -0,085 % anterior.
En este sentido, los expertos consultados por Efe explicaron que el ligero repunte de la rentabilidad -pese a seguir siendo negativo- demuestra que el mercado de deuda sigue percibiendo un mayor riesgo a la hora de invertir en España que en otros países del entorno. En la subasta del próximo jueves, el Tesoro emitirá bonos a cinco años y obligaciones a quince años.
Igualmente, subastará obligaciones a diez años indexadas a la inflación, deuda que se diferencia en que su principal (importe) evoluciona según el Índice de Precios al Consumo Armonizado (IPCA), excluido el tabaco.
La última vez que el Tesoro emitió este tipo de deuda fue el pasado 4 de febrero, cuando colocó 675 millones de euros, que se adjudicaron a un interés negativo del 0,080 %.