Florence Nightingale, considerada la precursora de la enfermería moderna a finales del siglo XIX, nació un 12 de mayo de 1820. Por eso ese día fue elegido para celebrar el Día Internacional de la Enfermería, y así poner en valor su labor asistencial y de cuidados en los centros sanitarios y sociosanitarios
VALÈNCIA. Una labor, la de la enfermería, que ha evolucionado mucho, no ya en los doscientos años que hacen del nacimiento de Nightingale, sino en los últimos cincuenta años. No fue hasta 1977 cuando se crearon en España las Escuelas Universitarias de Enfermería, que otorgaban una diplomatura, que más tarde se convirtió en carrera universitaria, a la vez que ha ido aumentando la profesionalización y especialización de estas profesionales. Sin embargo, hay algo que se mantiene igual: el destacado rol que juega la enfermería en la atención al paciente. “Somos el primer contacto y con quién más confianza suele crear el paciente y sus familiares, y lo hacemos desde que entra en el hospital hasta que sale e incluso más allá”, afirma Paula Castells, directora de enfermería del Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre.
Hoy en día, la enfermería es una profesión multidisciplinar que interviene en muchas de las etapas de la vida del paciente: antes de padecer una enfermedad, promoviendo la salud y la prevención, por ejemplo interviniendo en campañas de prevención, de educación o en las de vacunación; acompañándole y asistiéndole durante el proceso, intentando que este sea lo más llevadero posible o contribuyendo a su posterior recuperación, asegurándose de que el paciente siga las pautas médicas y terapéuticas necesarias.
Paula Castells afirma que hay que centrarse mucho en el valor del cuidado. “Es nuestra esencia. El médico cura y las enfermeras cuidan. Y ambos son importantes”. En este sentido, y aunque reconoce que la covid-19 dio mucha visibilidad y reconocimiento al trabajo que realizan, “también ha hecho mucho daño, porque muchas profesionales han acabado muy quemadas y muchos estudiantes empezaron a interesarse por la carrera porque se puso de moda. Y esta es una profesión vocacional, sin esa vocación no la disfrutas igual y no le dedicas tanto interés”.
Una vocación que hace, por ejemplo, que estén en continua formación, porque además las enfermeras cada vez asumen más responsabilidades en la atención al paciente. “Es fundamental, porque eso nos permite dar un servicio de mayor calidad. Aquí, en Vithas, no solo estamos en constante formación, si no que si detectamos que hay alguna necesidad se reclama esa formación específica y no dudan en impartirla. Además, con las nuevas tecnologías, el paciente llega con mucha información y hay que estar preparada y saber darle respuestas, porque el nivel de exigencia es más elevado”.
Preguntada sobre la tecnología, asegura que juega un papel clave y que es de una gran ayuda para conseguir una buena experiencia del paciente, pero afirma que “no hay ninguna tecnología que pueda sustituir la labor que realiza cada enfermera, con cada paciente, de forma individualizada”.
Uno de los retos que Castells considera que hay que afrontar es mejorar la especialización desde la carrera. “Al igual que las especialidades de medicina tienen el MIR, nosotras deberíamos tener algo similar. A nivel laboral, la especialización es algo fundamental, porque hay áreas muy dispares, no es lo mismo tratar al paciente de hemodiálisis que al de pediatría; o trabajar en un quirófano que ser la responsable de la gestión del equipo, por ejemplo. Pero no se sale con esa especialización y, es un error, porque así ganaríamos tanto en la atención al paciente como en preparación”, recalca la directora de enfermería del Hospital Vithas Valencia 9 de octubre.
Un ejemplo de esa especialización es la que está implantada en el Hospital Vithas Valencia 9 de octubre. En total, Paula Castells lleva la gestión de más de 170 personas en su departamento. Además de las seis supervisoras de servicio y siete controles de enfermería en el hospital (hospitalización, pediatría, maternidad, dos controles quirúrgicos, medicina interna y oncología, y especialidades médicas), están las enfermeras de urgencias, UCI pediátrica, quirófano y la consulta de enfermería, que es donde se hacen las curas, inyectables, seguimiento a las curas complejas de los pacientes ingresados…
“Cuando me hice cargo de la dirección de enfermería decidimos que había que potenciar esta consulta, porque así los pacientes tienen siempre a la misma persona, en la que confían y se sienten más cómodos y seguros”.
Y es que, para Paula Castells, es prioritaria la experiencia paciente, “el paciente es nuestra razón de ser. Debemos proporcionar la humanización necesaria y la seguridad que precisa el enfermo en cualquier situación, cuidar la parte emocional es igual de importante que la propia enfermedad”.
Precisamente, para atender mejor al paciente, todos los meses se reúnen en un comité de experiencia del paciente para analizar las quejas y la satisfacción “y cada mes ponemos un aspecto a cambiar para que el paciente esté más contento, por ejemplo, en hospitalización, a los pacientes que llevan más de dos días, la enfermera referente de su planta se acerca a la habitación y le pregunta que tal todo y que necesita, la dietista sube para las comidas… intentamos que la estancia sea lo mejor posible”.
Un trato cercano que también intentan transmitir a los estudiantes en prácticas, ya que los centros hospitalarios de Vithas cuentan con acuerdos de colaboración con universidades públicas y privadas, así como con escuelas de formación profesional. “Es un valor añadido para el hospital, ya que tenemos una cantera de futuros profesionales sanitarios que los hemos formado nosotros. Y queremos que se sientan a gusto, bien acogidos y que aprendan y aprender de ellos. Eso hará que luego quieran trabajar con nosotros”, asegura la directora de enfermería del Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre.