Enganchados: Listos para la revolución del turista

VALÈNCIA.- La gran ventana de internet ha revolucionado muchos aspectos de la vida, pero el turismo, quizá, es el que está inmerso en un cambio más profundo. Seis emprendedores con cuatro proyectos diferentes se han puesto en la piel de los viajeros y a través de sus plataformas online están conquistando, o al menos eso quieren, al nuevo usuario que es completamente digital y más sibarita en cuanto a experiencias y precios. Este sector representa el 11,2% del PIB en España y más del 13% en la Comunitat Valenciana. Ante este dato, el ecosistema emprendedor está en plena ebullición y contribuyendo a generar iniciativas realmente originales. Desde planteamientos muy diferenciados a toda una propuesta organizada, todos tienen unos ejes comunes: su condición 100% digital y la circunstancia de haber vivido un pequeño o gran ‘fracaso’ experiencial.

A través de estos cuatro proyectos, sus promotores representan la apertura de oportunidad vía internet. De hecho, sus edades van desde los veinte hasta los cincuenta y tantos. Su localización se reparte entre Alicante, Elche y València y su campo de acción va más allá de nuestras fronteras. La variedad de su segmentación responde a un codiciado sector. Las últimas previsiones de las que se hizo eco Hosteltur apuntaban a que este año el 39% de las reservas se realizará online; un 5% más que ahora. Con un dato tan alentador, los emprendedores se han fijado un objetivo: participar en la ‘revolución’ del viajero.

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Mientras las agencias y, sobre todo, los operadores turísticos dedican cantidades muy respetables a posicionarse, los pequeños están en modo ‘guerrilla’. Parte de esa operativa de combate sale de Invattur Emprende, dependiente de la Agència Valenciana de Turisme. En fases muy distintas, buceamos en cuatro iniciativas que tienen otros nexos comunes: modelos escalables y huyen de las multitudes en pro de una atención casi personalizada.

La más veterana de las propuestas es Chiss Chass, que ofrece todo un mundo dirigido al ocio familiar. Mónica Romero (Mislata) puso su plataforma a rodar en mayo de 2014. Ahora cuenta con 350 empresas registradas en su web que venden todo tipo de ofertas para el tiempo libre. Ella actúa de intermediaria. Con el verano, «los campamentos y escuelas inundan el apartado de viajes». Su valor diferencial es que, aunque los anunciantes determinan contenidos, «nosotros chequeamos cuando se registran». Mónica lleva más de diez años organizando eventos para niños y apuesta porque los usuarios tengan concentrado todo el contenido. Su siguiente objetivo es una app. Antes que el inglés o que cualquier otra opción, esta emprendedora valenciana sabe que el móvil es su mejor manera de crecer.

La experiencia profesional en el campo es el rasgo común de Soraya Felio. La promotora de Viverando Music está en plena temporada alta. Genera experiencias a partir de conciertos de cantantes que «mueven masas» pero, sobre todo, gira alrededor de las grandes salas pues estamos hablando de «una experiencia VIP». Nos pone un ejemplo: Concierto de Bisbal, dos entradas VIP, alojamiento, desayuno saludable y ruta segway por 320 euros. El usuario manda y lo hace vía web, pero esta emprendedora procedente del mundo inmobiliario ha fijado su target en singles, lovers, premium y fit con el fin de crear marca musical.

Otra opción alternativa es la incipiente Viajesta, la aventura de tres estudiantes de la Universidad de Alicante: Cristóbal Jesús, Mario Navarro e Irene Sevilla. Los recientes ganadores de Yuzz Alicante son aún un proyecto, porque «no nos dedicamos al cien por cien». Nació tras un viaje que Mario hizo a una pedanía de Murcia y en el que estuvo sin nada que hacer. Más tarde, supo que a la siguiente semana había fiestas y mucha animación. Quieren ser dinamizadores de todos esos lugares. 

Las ‘perras’ del puente en València

«Ahora hemos pivotado, y eso que no sabíamos ni que era pivotar, y hemos incluido fiestas y gastronomía. Además, buscamos indicadores», explica entre sonrisas Cristóbal, quien tuvo la oportunidad de ir a Silicon Valley, lugar donde el turismo tiene mucho que aportar. Irene adelanta que un parámetro es que sean Fiestas de Interés Turístico, porque se presupone cierta organización. «Te sorprende comprobar la cantidad de ayuntamientos pequeños y no tan pequeños que aún hacen folletos y no explican nada de la fiesta», comenta Irene. 

Esa parte ‘cutre’ es más habitual de lo que imaginamos, a pesar de la calidad de los destinos y fue el motivo que animó a Roman Maximow. Wini Guide es una aplicación en la que este ruso afincado en Elche se pone a trabajar tras coger un día el autobús turístico de València con su familia. «Escuchaba atentamente la explicación del audio en ruso que, por cierto, no funcionaba muy bien, y empezamos a reírnos porque por una mala pronunciación se oyó algo así como ‘las perras del puente’ cuando en realidad eran los cables del puente», recuerda.

A partir de ahí se puso a trabajar con un amigo físico y un informático en Murcia para crear una app donde se pudieran grabar rutas y explicaciones para los amigos. El negocio vendrá por las descargas y mientras ha utilizado a sus amigos rusos que «no hablan ni papa de español». Según cuenta, un día les hizo una ruta por Torrevieja y les grabó el mensaje con lo que tenían que pedir al camarero de un bar prefijado en el itinerario.

Todos ellos han querido transformar vivencias pasadas en una oportunidad para que la gente disfrute y, a poder ser, también en una vía de ingresos. De los cuatro, Chiss Chass ya hace su pequeña caja anual, Viverando Music empezó en enero y los otros dos, están en modo ‘beta’. Todos han puesto el dinero por adelantado y, a pesar de las diferencias, vuelven a unirles la idea de no perder el control sobre la empresa. La autoría pesa porque, como dice Soraya, es un «proyecto vital».

Roman ha pasado por una aceleradora en Málaga y ha hecho cientos de presentaciones en varios países para captar inversión, pero «hasta que no esté rodado, no pienso abordar esta opción. Si aceptas dinero, aceptas presión y que tienes que justificar cada paso que das». La inversión que recibe el sector turístico es muy inferior a lo que aporta. Los últimos datos ofrecidos por la Generalitat Valenciana hablaban de que, en 2015 representaron el 7,2% del total del gasto público corriente en la región, con 1.071 millones.

«Hay un boom de emprendedores que no se les presta atención hasta que despuntan», sostiene la creadora de Chiss Chass, y «gente que te aconseja con mucha ligereza. A mí me dijeron que necesitaba 100.000 euros para empezar». Al final, han sido 11.000 y millones de horas. 

Según la experiencia de Mónica, el problema viene cuando tocas a las puertas de la administración pública y «hay barreras políticas». Le parece incomprensible que por buena que sea la idea, el Ayuntamiento de Mislata rechazara un proyecto local que «a día de hoy es la única plataforma de pago online y está activado con ocio familiar. Se podrían difundir muchas cosas del municipio».

Pero los ‘novatos’ no se rinden y tienen todo un modelo de negocio por desarrollar. Todos reconocen que el apoyo de mentoring y contactos de Invattur les ha servido para mucho. Soraya tuvo su presentación en Fitur y lo recuerda como una experiencia magnífica para dar a conocer la empresa. «Estoy apostando por ferias para crear sinergias». Su cartera de futuro más inmediato está en Alemania y Perú. Y es que son conscientes de que el turismo es un desafío global.  

* Este artículo se publicó originalmente en el número 34 de la revista Plaza (VIII/17)