VALÈNCIA. Las residencias de mayores valencianas alcanzaban este viernes la dolorosa cifra de 700 fallecidos a causa del coronavirus desde que estallara la pandemia el pasado mes de marzo. En los últimos días, la irrupción de brotes gravísimos en centros de Llíria, Elda y La Pobla Vallbona, y los datos de positivos en casi 88 centros -cifras de este viernes-, preocupan al Gobierno valenciano, que observa con la respiración contenida la proximidad de es tos números con los sufridos durante la primera ola.
Para hablar de estas cuestiones y analizar las actuaciones llevadas acabo en este ámbito, Valencia Plaza se reúne con José María Toro, presidente de la Asociación Empresarial de Residencias y Servicios a Personas Dependientes de la CV (Aerte), quien trata de separar la gestión pública y la privada de la penetración de la covid en los centros. "El virus entra en las residencias indistintamente", afirma.
Pese a las cifras crecientes, Toro defiende que las medidas adoptadas están surtiendo efecto, dado que se está consiguiendo "mitigar" el impacto de la gran mayoría de los brotes y recalca que tres de cada cuatro residencias están, a día de hoy libres del virus.
- Cerca de 80 residencias de la Comunitat Valenciana tienen contagios. Volvemos a estar a nivel de abril. ¿Está fallando el blindaje de los centros?
- No se puede blindar nada. Ni un colegio, ni una empresa ni, evidentemente, una residencia. Las residencias forman parte de la sociedad y cuando en el conjunto de ésta suben los casos, antes o después acabarán llegando a las residencias, porque nuestros trabajadores hacen su vida y es un marco en el que es posible aislar. Cuando salieron los espacios covid free cayeron por si solos, porque tú puedes decir que cumples normativa y protocolos pero no puedes garantizar el resultado. Hay que hacerse la idea de que el virus estará presente en la sociedad y en las residencias durante mucho tiempo y que centros que ahora no lo tienen lo puedan tener después, y que residencias que lo han tenido antes ahora están mejor por los anticuerpos.
- ¿Qué se está haciendo mejor en esta segunda ola?
- El objetivo principal es que el virus no entre en las residencias. Hoy, tres de cada cuatro centros están bien. El 75% de las residencias no tienen ningún caso confirmado y yo creo que, el objetivo de que no entre, se está consiguiendo en un porcentaje muy elevado. Las medidas de seguridad que se implantaron desde marzo están dando resultado. El acceso al centro está muy controlado, la distancia de seguridad, la mascarilla y la higiene de manos han sido los principales elementos.
"El gran fallo que tuvimos en la primera fase fue la comunicación con las familias"
Luego están los planes de contingencia de cada centro, que han sido revisados por Sanidad y por Igualdad. Obligarnos a ésto nos ha hecho prever los diferentes escenarios que nos podíamos encontrar. Lo que también ha mejorado mucho ha sido la comunicación con las familias. Para mí el gran fallo que tuvimos en la primera fase fue la comunicación aunque tiene una explicación. Tú cuando llegabas a un centro y de un día para otro diez trabajadores se ponían de baja, solo con la atención directa era muy difícil sacar tiempo para explicar a las familias qué estaba pasando.
Eso generó incluso desconfianza en el sector. El virus iba rápido. Hoy estabas bien y mañana mal y era letal. Un día te ponías malo y a los dos días se había muerto la persona. Y ahí no estuvimos a la altura y deberíamos haber comunicado mucho mejor. Pero es que esto ha cogido fuera de juego no solo al sistema sanitario de todo el mundo, a nosotros también. Y, comparativamente con las residencias del resto del mundo, nosotros no lo hemos hecho tan mal. La comunicación se ha ido mejorando mucho en la segunda fase con las familias. También la Atención Primaria ha ido viendo cómo ha sido la respuesta que tenía que dar a los centros, se ha ayudado a coordinar y se ha avanzado, aunque nos queda mucho por mejorar.
- Un 25% de centros sí está teniendo contagios. ¿Qué está pasando en éstos?
- Sanidad nos dijo el lunes que el 85% de los brotes generados en el último tramo eran de menos de 10 personas entre trabajadores y residentes. Esto es otra buena noticia, porque una vez que entra el virus en las residencias hay que mitigar su impacto. Otra cosa que he intentado explicar siempre es que no es un fallo que el virus entre en los centros. Eso no significa que haya habido una mala praxis ni un error. Puede entrar como ha podido entrar en cualquier sitio.
"El 85% de los brotes generados en el último tramo eran de menos de 10 personas entre trabajadores y residentes"
¿Qué pasa dónde se han disparado los casos? Se han dado seis en los últimos diez días, dos de ellos en centros públicos de diversidad funcional y cuatro en residencias privadas de personas mayores. Es difícil saber qué ha pasado, por eso es necesario investigar, pero no desde el punto de vista sancionador, sino desde el conocimiento y que esto se compartiera con el resto del sector. para estar aún más preparados. Saber por qué centros que no han tenido casos en siete meses de repente tienen un contagio masivo. Si lo estuvieran haciendo mal habrían tenido contagios mucho antes.
Y en este sentido pueden haber pasado muchas cosas. Por ejemplo, personas que sean asintomáticas y no se hayan detectado, por lo que hemos venido pidiendo la realización de pruebas PCR periódicamente en los centros, algo que recomendó el consejo interterritorial para trabajadores, aunque nosotros también pensábamos que era bueno para residentes. También ha podido haber errores en las medidas de seguridad, pero con estos números tan elevados, llega un momento que uno piensa que ni haciéndolo queriendo contagia a tanta gente. Algo se nos está escapando, pero estos casos no representan la realidad de los centros. Es poco más del 1% de los 327 que hay en la Comunitat Valenciana.
- ¿Haría falta una prueba PCR a los residentes al regreso de los hospitales?
- Algunas veces nos estamos encontrando con gente que viene del hospital con un negativo y luego positiviza. La PCR tampoco es infalible. Por eso, cuando viene la gente del hospital y no ha tenido contacto con nadie no te hacen prueba. Solamente en el caso de que hubieran caso de contacto se puede hacer. Pero la cuestión es que, hoy en día, ¿quién garantiza que no ha habido riesgo de contacto? Es muy difícil.
"Muchas veces se ve lo que dice Aerte como una cuestión de crítica pero la mayoría de veces te acaban dando la razón"
Una cosa que sí tendría que ir más rápido es la resolución de las pruebas por parte de Sanidad. Necesitamos que las pruebas vayan muy rápido. Desde que se detecta la primera sintomatología, viene Salud Pública, te hacen las pruebas y te dan el resultado en algunos casos pasa mucho tiempo. Y hemos tenido casos de centros que han avisado un sábado por la tarde y hasta el lunes no se han puesto en contactos con ellos. Lo ideal sería que hubiera test periódicos y que cuando haya un caso no se empiece con los casos estrechos, que se pierde tiempo, sino que se haga un cribado a todo el centro -trabajadores y residentes- de manera inmediata. Pero es que no podemos perder ni una hora.
Y una de las cosas que defendía el otro día Oltra es que los departamentos deben trabajar de forma homogénea. La sensación que tengo es que muchas veces se ve lo que dice Aerte como una cuestión de crítica pero la mayoría de veces te acaban dando la razón. Tenemos la información de estar en primera línea y es algo que podemos aportar a la administración.
- ¿Son los trabajadores los que están introduciendo el virus?
- En un 75%, según nos dijo la Conselleria de Sanidad, era por trabajadores y el 25% por derivaciones hospitalarias. Preguntamos por una cosa que nos preocupaba mucho, y era el tema de visitas, pero Sanidad no tiene monitorizado ningún contagio por éstas. Una cuestión que va en la línea de que éstas deberían mantenerse incluso con brotes en el centro, pero con dos condiciones: que los brotes estén controlados y que las visitas se puedan realizar en un espacio seguro. De hecho, es fundamental que se mantengan porque hemos detectado el deterioro físico y cognitivo que tienen las personas cuando no tienen contacto con sus familiares. Tenemos que hacer un esfuerzo y llevamos muchísimo tiempo hablando con Igualdad y Sanidad para conseguirlo.
- Ahora las visitas se recomiendan anularlas dependiendo del departamento.
- Yo no creo mucho en las recomendaciones y Sanidad lo que hace es recomendar. Recomiendan que se cierren las visitas, que no se hagan salidas y que se cierren los centros de días anexos. Yo creo que Sanidad tiene que asumir su responsabilidad y si algo cree que no está bien lo prohíbe, pero lo tiene que prohibir usted. Una recomendación, al final, significa para un centro que, si es valiente y sigue manteniendo las visitas para proteger la salud mental de las personas alojadas y al mismo tiempo defender el derecho de las familias de visitar a sus mayores, si después hay un problema Sanidad se va a lavar las manos.
"Hemos defendido que se mantengan las visitas y se reduzcan las salidas"
Nosotros sí hemos dicho siempre que las salidas suponen un problema. Tienen un tema jurídico conflictivo, y es que afectan a la capacidad de movimiento de las personas. Pero la gente sale de las residencias y tú les pierdes la pista. Te tienes que creer, porque han firmado una declaración responsable, que esa persona no ha estado contacto con nadie, que no se la han llevado a su casa a celebrar un cumpleaños,... y no hay que olvidar que gran parte de los contagios se dan en contactos sociales. En ese sentido, hemos defendido que se mantengan las visitas y se reduzcan las salidas, pero es Sanidad quien debe marcar ese criterio.
- ¿Tiene datos de brotes, contagios y fallecidos entre los centros públicos, privados y concertados? Porque se percibe un mantra de que los centros privados están peor que los públicos.
-El virus no mira en la puerta de qué tipo de centro se trata y creo que ha afectado igual a todos. Nosotros no tenemos datos de todas las residencias, solo Sanidad e Igualdad los tienen y nunca han querido hacer esa distinción. Pero para mí tampoco es relevante. Creo que el sector residencial ha estado a la altura de las circunstancias y ha hecho todo lo que ha podido para que la gente esté bien. El primer interesado de que no haya casos en un centro es la entidad gestora, eso no se puede poner en duda. Si es privado, ¿qué? ¿Va a saltarse las medidas de seguridad? ¿Se va a arriesgar a tener un problema reputacional? ¿Usted mandaría a un centro con esta situación?
"Creo que nuestro trabajo ha salvado muchas vidas durante esta pandemia"
Pero creo que la conselleria ha tratado igual a todo el parque de residencias. Lo que sí puedo decir es que no creo que haya ninguna empresa que haya rebajado el nivel de alerta. Creo que estamos en una tensión máxima desde el mes de marzo. De hecho, nunca hemos llegado a estar en nueva normalidad, seguimos en Fase 3. Ha habido gente que ha estado trabajando con un buen resultado durante todo este tiempo y ahora se encuentra con un contagio masivo. No es que lo haya hecho mal, es que ha tenido mala suerte.
Hay veces que, cuando la consellera Mónica Oltra habla de casos en una residencia privada, habla de mandar a la investigación y ver qué ha pasado se genera alarma. Pero cuando se trata de un centro público no se cuestiona. El otro día, que incluso se decía que había trabajado un empleado con síntomas, también debería aclararse. Hay que investigar, por supuesto, pero generar alarma genera desconfianza y la gente ha trabajado muy duro y los datos están ahí para haberse generado la confianza de la gente, sin olvidarnos de las 679 personas que se han muerto en residencias durante este tiempo, que no nos las van a devolver. Creo que nuestro trabajo ha salvado muchas vidas durante esta pandemia.
- Desde el sector se dieron quejas durante la primera ola ante la falta de derivaciones a hospitales de residentes con síntomas. ¿Esto se ha solucionado?
- En los últimos protocolos que ha llevado Sanidad se insiste mucho en que cuando una persona tenga sintomatología grave y sea un caso de covid se derive al hospital. Es cierto que ahora la saturación del sistema no ha sido importante y no lo hemos comprobado, pero tengo toda la confianza en que el sistema se hará cargo de todas las personas que necesiten asistencia hospitalaria, tengan la edad que tengan y vengan de donde vengan. Eso está absolutamente asumido por el sistema y creo que no se repetirán situaciones como las de la primera fase de la pandemia. El sistema, en ese momento, no tuvo capacidad suficiente ni para prevenir ni para curar a muchas personas. La gente estaba enferma, la crisis ha sido sanitaria y la respuesta tiene que venir por parte del sistema de salud.
- ¿Cómo es la relación a día de hoy con la Conselleria de Sanidad y la Conselleria de Igualdad?
- Con Igualdad es mejorable. Nos falta fluidez en la relación. La conselleria tarda mucho tiempo en tomar decisiones. La última reunión que tuvimos con el secretario autonómica, con Rubén Sancho, la tuvimos el 25 de septiembre, hace casi dos meses. Nosotros necesitamos velocidad y en muchas cosas veo que están trabajando mucho, pero me da la sensación de que no siempre la faena que están haciendo es la correspondiente. Por ejemplo, el protocolo de bajas voluntarias en el que trabajaron cuatro o cinco días se hizo para que 30 personas en toda la Comunitat Valenciana se fuera, y eso creo que no era prioritario. El protocolo de traslados intermedios, estuvieron una semana, y cero personas se han trasladado.
"sanidad intenta aplicarnos criterios muy clínicos y sanitarios y chocan con las estructuras"
Con Sanidad la relación es más fluida, pero no siempre el resultado es el mismo. Para la conselleria la crisis del covid ha sido como un descubrimiento de las residencias, y a veces intentan aplicarnos criterios muy clínicos y sanitarios y chocan con las estructuras que tenemos nosotros de personal, con la normativa y algunas veces generan problemas. Y a veces nos ven desde una posición de que no queremos hacer cosas, y es que hay cualquier cuál es la estructura y nuestra función, y más si se junta la diversidad de criterios que hay en los departamentos. Eso nos desespera. En unos la comisión que se reúne con las residencias no se reúne. En otros es un grupo de WhatsApp, en otras son reuniones por videoconferencia todos los martes,... Eso a la hora de trabajar es complicado.
- Se va a aprobar un decreto de ayudas al sector. ¿Qué le parece?
- Lo agradecemos, pero el sector no ha pedido nunca ayudas. La única vez que plantee el tema fue cuando se sacó el decreto de sanciones y sí que planteé que me sorprendía que la Comunitat Valenciana era la única donde se iba a plantear un decreto de sanciones específico cuando otras autonomías estaban prestando ayudas o dando soporte económico a los centros. Me parecía una contracción.
También me sorprende que se den unas ayudas al sector sin escuchar al sector. Aerte es la asociación empresarial mayoritaria del sector. Con Lares parece ser que hubo alguna reunión con Mónica Oltra, pero Aerte es cuatro veces Lares en cuanto a peso específico de centros, lo lógico sería que también se hubieran reunido con nosotros. Nosotros agradecemos las ayudas pero habría que escuchar al sector.
-¿Qué opina del conflicto de la conselleria con Domusvi y la propuesta de reversión?
- Las empresas tienen que hacer su trabajo bien, tienen que transmitir que lo están haciendo bien y tienen que dar confianza a las familias. Cuando se generan dudas sobre el trabajo de una entidad, ésta tiene que hacer el esfuerzo por superar eso. Pero hay varios aspectos en este sentido. Se habla mucho de Alcoi, pero cuando se cierran las puertas el virus ya está dentro y, en aquella época, la vicepresidenta decía que esto era una gripe. ¿Se puede culpar solo a la empresa de una cuestión sanitaria en la que han fallecido muchas personas cuando todo esto empezaba y nadie nos había avisado de lo que venía? Yo no sé hasta que punto Domusvi tiene culpa de lo que pasó en Alcoi.
Es un ejemplo de, como pasó en Santa Elena, de que al principio los centros iban desorientados. No había apoyo sanitario, no había material, no había pruebas y la administración jamás advirtió. Debíamos asumir todos la parte de responsabilidad que tuvimos ahí. En Santa Elena murió mucha gente también y nadie habla de ellos. De hecho, el president de la Generalitat se llevó a las directora de la segunda residencia con más fallecidos al funeral de Estado de Madrid. Y sin embargo, Alcoi, la primera, aunque es verdad que con muchos más, está cuestionada por una situación muy parecida. Yo Alcoi lo separaría de la situación de Domusvi, que también se le ha cuestionado en Llíria, donde tendrán que dar explicaciones junto a la Inspección y Fiscalía, y también ha tenido casos puntuales de contagios masivos en Elda.
-Domusvi ha sido sancionada pero acaba de ganar un concurso en Velluters. ¿Ve descabellado que se puedan vetar a empresas sancionadas en los concursos?
- La ley de Contratos del Sector Público recoge la prohibición de contratar. Puedes sancionar a la empresa tanto administrativamente como un juez a que no se presente a un concurso durante un tiempo porque haya retirado un aval o haya dicho que se iba a firmar un contrato y no lo ha firmado. La administración tiene los resortes necesarios y entiendo que estas cuestiones deben ser proporcionales. Otra cosa es que hayas hecho una bajada temeraria, y la mesa de adjudicación puede decidir no adjudicarte un contrato. Pero esta administración ha adjudicado tres contratos con baja temeraria con informes contrarios de la dirección general diciendo que no daba el presupuesto para dar un servicio de calidad.
"En 2015 pedimos a la Conselleria de Igualdad que el precio no fuera el único elemento para valorar los contratos"
Nosotros en 2015, junto a UGT y CCOO, pedimos a la Conselleria de Igualdad que el precio no fuera el único elemento para valorar los contratos y tampoco ha cambiado esto. No se trata de una cuestión de ahora, es que si se hubiera hecho hace tiempo estas situaciones no se darían. Hay que aplicar la ley, pero si una empresa no está sancionada y tiene capacidad de presentarse, no se le puede negar la adjudicación de un concurso. Nosotros hemos defendido siempre que en estos servicios el precio no debería contar nada. Que la administración debería fijar el precio en base a un estudio de los costes y una vez decidido que me lo gestione el que mejor lo haga.
- Aerte recurrió una resolución de la Conselleria una resolución que le permitía intervenir a las residencias. ¿Por qué?
- Nosotros creemos que la intervención que se pueda hacer de un centro debería venir siempre de Sanidad por salud pública. Nosotros somos responsables y cumplimos con la normativa pero no tenía sentido que pudieran intervenir un centro si no había una justificación clara. Nosotros no necesitamos intervenciones, necesitamos ayuda.
- Se quejaban de que la llamada desde la sanidad pública a personal de las residencias y se estaban teniendo déficit los centros socio-sanitarios. ¿Continúa el problema?
- El personal sanitario, la primera orientación que tiene es trabajar en lo sanitario, no en lo social. Si vas a una escuela de Enfermería, menos de un 10% del primer año te diría que quiere trabajar en un centro social, sino en el ámbito sanitario. Luego está la motivación, y es que las condiciones que ofrece la administración son mejores que las del ámbito privado porque tienen más recursos, desde las condiciones al salario. Pero no se trata de subir el sueldo e ir quitándole profesionales a otros centros, porque seguirá habiendo déficit.
Ahora estamos teniendo déficit de enfermeros para atender la demanda tan amplia que hay de profesional sanitario. El propio Satse hablaba de que faltaban 18.000 profesionales en toda España, y la otra que están pidiendo que haya enfermeros en los colegios. ¿De dónde van a salir? Nosotros, en la negociación del presupuesto del año que viene de la Generalitat hemos pedido que se amplíe la oferta formativa del personal de enfermería y nadie habla de eso.
-Por lo que dice, desprende la sensación de que en el sector de que la Conselleria de Igualdad está más pendiente de sancionar que de ayudar. ¿Lo cree así?
- Lo que hay es desconfianza. Este Gobierno desde que llegó mostró desconfianza por el trabajo que hacían las empresas. Dijeron, vamos a desmercantilizar el sector, no vamos a terminar con las cosas que no se hacen bien. Nosotros ya habíamos hecho bastante ruido frente al Gobierno del PP para decir lo que se estaba haciendo mal, incluso jurídicamente lo acabamos ganando en los tribunales.
Pero esta administración no ha creído nunca en que el sector tenía capacidad de aportar honestamente cosas buenas para todos. Todos tenemos una visión para aportar. Llevamos cinco años haciendo aportaciones que pensamos que son bueno para el sector general y la conselleria no ha sido prácticamente receptiva a nada de las cosas que ha planteado Aerte. Siempre ha habido desconfianza porque han pensado que miramos el interés económico. Ya en 2008, cuando nos dejó abandonados la administración, demostramos que podíamos seguir haciendo nuestro trabajo incluso sin cobrar las nóminas y no se echó a una sola persona de una residencia privada porque no pagara.
Ahora hemos tenido que comprar material y se ha comprado al precio que fuera. Se ha tenido que contratar a personal y se ha contratado. Se han hecho todos los esfuerzos necesarios y nadie ha dudado lo más mínimo porque costara dinero. El resultado de la Comunitat Valenciana durante la pandemia es triste y trágico por las personas que se han ido pero si nos comparamos con países como Suecia, Canadá, Holanda o Finlandia que siempre se ponen como modelos y cuyas plazas valencia 5.000 o 6.000 euros al mes frente a los 1.800 de aquí, el trabajo que hemos hecho ha sido brutal. El sector ha estado a una altura y los trabajadores han hecho un trabajo encomiable, a pesar de que soy consciente que la sociedad tiene una imagen negativa de las residencias, aunque los datos dicen otra cosa.
La tasa de mortalidad mayores de 80 años de personas con covid es de 3,36 puntos peor que la tasa de mortalidad de personas dentro de las residencias. Han fallecido el 31% de personas de residencias, un tercio, que es uno de los tres mejores resultados de toda España. Por hablar del último mes, la tasa de contagios desde el 1 de noviembre han subido los contagios en la Comunitat Valenciana un 33% y en las residencias un 21%. Los fallecimientos han crecido un 17%, en la residencias un 8,29%. Nosotros vamos con el conjunto de la sociedad, pero proporcionalmente estamos muchísimo mejor.