VALÈNCIA. Eurocaja Rural acaba de completar su primer desembarco en la Comunitat Valenciana, que se ha saldado con 19 oficinas abiertas, tal y como ha podido saber este diario. Todo un logro en pleno proceso de desapalancamiento bancario donde los cierres -y los despidos- están a la orden del día. La entidad presidida por Javier López Marín aterrizó oficialmente en València a finales de mayo pasado enarbolando la bandera del 'ruralismo' como también avanzó Valencia Plaza dos semanas antes.
La otrora Caja Rural Castilla La Mancha, cuyo cambio de nombre fue aprobado por su asamblea a finales de abril del presente ejercicio, ha abierto en las últimas semanas oficinas en Almassera, Massarrochos, Mislata y La Pobla de Vallbona en lo que a la provincia valenciana se refiere. Municipios a los que hay que sumar los de Camporrobles, Fuenterrobles, Silla y Vinalesa, que ya levantaron la persianas anteriormente. De este modo son ya 9 las poblaciones -contando con la sucursal en València capital- valencianas donde Eurocaja Rural tiene presencia.
Pero la cosa no queda ahí porque la cooperativa de crédito domiciliada en Toledo también ha puesto una pica en Alicante donde ya cuenta con una decena de oficinas repartidas por toda la provincia. A saber: Algueña, Beniarrés, Benilloba, Cañada, Elda, Petrer, Pinoso, Salinas, Sax y la capital, cuya apertura fue adelantada por Alicante Plaza en diciembre del pasado año.
De momento Castellón no entra en el radar de Eurocaja Rural para exportar su modelo de aperturas a través de agentes financieros, pero todo se andará. Como también el segundo desembarco en València y Alicante, dos provincias estratégicas para la cooperativa de crédito castellano-manchega.
Todo ello en un momento donde el proceso de desapalancamiento bancario continúa en la Comunitat Valenciana y de hecho, tal y como contó este diario la semana pasada, donde solo en el primer trimestre de 2018 bajaron la persiana otras 64 sucursales bancarias más. Alicante es la provincia más damnificada de las tres por dicho proceso y casi ha perdido la mitad de su red comercial desde el inicio de la crisis en 2008. Un vacío que no ha pasado desapercibido para Eurocaja Rural que está apostando fuerte por la provincia alicantina... y la valenciana.