VALÈNCIA (EFE). Los ministros de Economía y Finanzas de la eurozona, el Eurogrupo, no lograrán cerrar este jueves un acuerdo sobre el plan de trabajo para finalizar en los próximos años la unión bancaria, que debían entregar la semana próxima a los líderes de la eurozona, y volverán a intentarlo más adelante este año.
"Hemos trabajado mucho en las últimas semanas y meses, hemos hecho muchos progresos, que crean el escenario para tener un acuerdo más adelante", dijo el presidente del Eurogrupo, Paschal Donohe, antes de la reunión en Luxemburgo en la que los ministros abordarán la cuestión.
No obstante, el también ministro de Finanzas irlandés señaló que todos reiterarán su compromiso de lograr un acuerdo más adelante.
El objetivo es fijar un calendario de aquí a inicios de 2024 con los pasos a dar para finalizar la unión bancaria europea, que ya cuenta con mecanismos de supervisión y resolución comunes pero carece de un fondo de garantías de depósitos europeo (EDIS, en inglés) que garantice protección a los depositantes de cualquier país.
El EDIS genera reticencias entre algunos Estados, sobre todo en Alemania, que temen acabar pagando por los riesgos del sector bancario de otros socios y, ante el bloqueo de la iniciativa desde 2015, el Eurogrupo decidió negociarla en paralelo junto con medidas para reducir los riesgos del sector bancario.
Alemania y Francia, sin embargo, discreparon hoy en que éste sea el camino a seguir.
El ministro de Finanzas alemán, Olaf Scholz, candidato a la Cancillería en las próximas elecciones federales germanas en septiembre, se mostró a su llegada a la reunión "seguro" de que el Eurogrupo "no está listo para lograr un acuerdo hoy", pero "será un paso importante" para elaborar un plan.
Scholz consideró que el hecho de "no fijarse solo en una cuestión, sino mirar al escenario en su conjunto, será la base para tener éxito" y lograr un acuerdo.
Sin embargo, su homólogo francés, Bruno Le Maire, consideró que "el método inteligente, a la vista de los (muchos) obstáculos por delante, es levantarlos uno a uno, más que buscar un acuerdo global", y señaló que así se lo ha transmitido al presidente del Eurogrupo.
"Pienso que una solución global hoy no está al alcance de los Estados de la eurozona. Por el contrario, creo que podemos eliminar un cierto número de obstáculos y que un enfoque etapa por etapa es más razonable y, al mismo tiempo, más realista", dijo a su llegada al encuentro, subrayando que se trata de una negociación difícil.
Si bien el Eurogrupo aborda el tema en casi todas sus reuniones, la de este jueves en Luxemburgo se produce en vísperas de una cumbre de líderes de la eurozona la semana próxima, a la que debían llegar con un calendario para culminar una tarea que comenzó durante la pasada crisis financiera.
El Parlamento Europeo y el Consejo (los Estados miembros) acordaron este jueves las normas y detalles de un nuevo fondo, de 5.000 millones de euros, para apoyar a los sectores económicos y regiones que más están sufriendo los efectos del Brexit por la vinculación comercial con el Reino Unido mientras fue parte del bloque comunitario.
El acuerdo preliminar de los negociadores, que deberá ser confirmado en el pleno de la Eurocámara y por el Consejo, implica que el dinero podrá empezar a desembolsarse antes de finales de año para compensar por flujos comerciales perdidos, preservar empleos y apoyar al sector pesquero o a la construcción de estructuras aduaneras en puertos.
También se prevé que se puedan otorgar ayudas para el retorno de ciudadanos que hayan tenido que volver a la Unión Europea (UE) desde el Reino Unido a causa del Brexit.
Se trata de un fondo especial que la Comisión propuso inicialmente el 25 de diciembre de 2020, el día después de que Bruselas y Londres lograran cerrar el acuerdo que definía sus relaciones una vez el Reino Unido cortase toda vinculación con la UE.