MADRID (EP). El Fondo de Amortización del Déficit Eléctrico (FADE) ha cerrado una emisión de bonos por importe de 1.000 millones de euros a tres años destinada a refinanciar la deuda generada hasta 2014 en el sistema eléctrico como consecuencia del déficit de tarifa, indicaron a Europa Press en fuentes del mercado. Los bonos vencen en junio de 2020 y tienen asociado un cupón del 0,031%, así como una rentabilidad de la emisión equivalente a los bonos del Tesoro más 14 puntos básicos.
El libro de la emisión ha atraído un volumen de órdenes de compra superior a los 2.000 millones de euros. La emisión servirá para refinanciar la deuda eléctrica a costes inferiores. La de ayer martes es la tercera emisión del FADE en lo que va de año. La primera, realizada en febrero, tuvo un importe de 1.000 millones de euros, mientras que la segunda, cerrada en marzo, permitió la refinanciación de otros 130 millones. La deuda eléctrica, que los consumidores de luz pagan a través del recibo, llegó a superar los 28.000 millones de euros. Para el ejercicio 2017, los peajes de electricidad recogen el pago de una anualidad de 2.852 millones de euros.
El FADE es un instrumento creado por el Gobierno en 2010 para la titulización en los mercados crediticios de la deuda eléctrica, que había sido financiada hasta ese momento en su mayor parte por las principales compañías eléctricas. Según cálculos del FADE incluidos en su auditoría de 2015, el tipo de interés de la deuda eléctrica colocada en los mercados a través de este instrumento ascendía a cierre de aquel ejercicio a una media del 4,53%. Este tipo interés se situó 2,4 décimas por debajo del 4,77% registrado en 2014 y un punto por debajo del 5,56% de 2013. De los 24.189 millones de euros de deuda eléctrica cedidos al fondo, había 19.832 millones pendientes de cobro a finales de 2015.
La CNMC calcula que la deuda pendiente del sistema eléctrico se situaba en 25.056 millones de euros a cierre de 2015, frente a los 26.946 millones un año antes. El FADE ha titulizado cerca del 80% de la deuda eléctrica, a un coste medio más elevado que el resto de las fórmulas de financiación ensayadas. La opción más barata fue la utilizada para el déficit de 2005, en la que el tipo de interés apenas ascendió al 0,089%.
Después de catorce años consecutivos de generación de déficit, el año 2014 fue el primer ejercicio en el que se registró un superávit en el sistema eléctrico, por importe de 550 millones de euros, al que se sumó otro por casi 470 millones en 2015. Para el ejercicio 2016, el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital espera que se genere otro excedente por valor de 110 millones de euros, de modo que el sistema habrá sumado en tres años un superávit por importe de 1.130 millones. Según el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE), este excedente podrá ser utilizado para costear obligaciones derivadas de resoluciones judiciales o de organismos de arbitraje relacionadas con indemnizaciones por decisiones regulatorias en el sector eléctrico.