BARCELONA (EP). El líder del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández, ha lamentado este miércoles que la senadora y exalcaldesa de Valencia Rita Barberá "ha muerto de pena, porque muchos no esperaron a una pena judicial para condenarla a ella en vida", después de que haya fallecido este miércoles de un infarto en Madrid.
"Algunos deben reflexionar, con carácter general, hasta dónde llega el acoso y la condena a las personas por unos hechos que todavía no han sido ni siquiera juzgados ni valorados por una instancia judicial", ha aseverado Fernández en rueda de prensa.
Preguntado por si el PP se comportó correctamente con Barberá, ha insistido en pedir reflexión en general, especialmente "cuando alguien se precipita en determinadas valoraciones o se buscan condenas sociales cuando ni siquiera ha habido una condena judicial".
Como persona, Barberá fue una gran compañera y, si fue alcaldesa de Valencia 24 años, fue porque la votaron sus vecinos, ha destacado Fernández, que ha recordado que "los políticos también son personas y merecen un respeto y una presunción de inocencia".
"Pero si ha habido un mal comportamiento y una condena, hay que dar ejemplaridad y contundencia contra los políticos como a nadie", ha sostenido el dirigente popular, que ha dicho que Barberá estaba destruida y consumida por dentro por un calvario sin parangón, en sus palabras.
Sobre la ausencia de diputados de Podemos al minuto de silencio en el Congreso, Fernández ha tachado de "bastante miserable que alguien no sea capaz de guardar un minuto por una persona fallecida, sobre todo cuando no tenía ninguna condena", tras lo que ha dicho que la trayectoria de Barberá era suficiente para al menos esperar a la apertura de juicio oral.
