Fachada del colegio mayor Galileo Galilei de Valencia. Foto: KIKE TABERNERVALÈNCIA. La Fiscalía provincial de València descarta por el momento abrir diligencias de investigación penal de oficio por la fiesta ibicenca en el colegio mayor Galileo Galilei que ha generado el brote más grande de coronavirus de la Comunitat Valenciana. A la espera de cómo se desarrollen los acontecimientos en los próximos días y de si la situación evolucionara de una manera diferente, fuentes de la Fiscalía explican que resultaría extremadamente complicado judicializar todos los casos de incumplimientos de las medidas incluidas en las normativas, como el uso obligatorio de mascarilla o el mantenimiento de la distancia de seguridad. Algo que supondría tener que estudiar la actuación de cada persona de manera individual.
La Fiscalía apunta a lo que decida la Administración, sobre todo en lo referente a las sanciones. Y esperará a una decisión al respecto. De hecho, la consellera de Justicia, Gabriela Bravo, ha pedido a la Unidad Adscrita a la Generalitat del Cuerpo Nacional de Policía que abra una investigación con el objetivo de averiguar los hechos acaecidos en el centro para determinar y "depurar", en su caso, las responsabilidades de los supuestos organizadores o participantes.
La aplicación del Decreto ley 11/2020 conlleva un Régimen Sancionador específico contra los incumplimientos de las disposiciones reguladoras de las medidas de prevención de la covid-19, explica el departamento que dirige Bravo en un comunicado.
En él se establecen multas de hasta 600.000 euros si se llegaran a acumular un total de 10 faltas graves, por lo que una sanción económica podría acabar afectando a los organizadores del evento.
Esta medida se toma después de que, este martes, la Conselleria de Innovación que encabeza Carolina Pascual pusiera en conocimiento de la de Justicia la suspensión de las clases presenciales en la Universitat Politècnica de València (UPV) como consecuencia del brote del Galileo.
