VALÈNCIA (EP). El XIII Cicle de Companyies Valencianes de Sala Russafa ofrece del 25 al 28 de enero la comedia 'Folie à deux', un texto de los prestigiosos Titzina Teatro que dos décadas después de su estreno retoman La Compañía de Row e Iguales Teatro en un nuevo montaje.
Basada en la investigación con pacientes, familiares y profesionales de la salud mental, el espectáculo recrea con "humor y humanidad" las sesiones de un psiquiatra con cuatro pacientes, cada uno con su sintomatología y una visión del mundo que invita a los espectadores a vivir el fenómeno de 'folie à deux' o locura compartida, según ha explicado la sala en un comunicado.
Jaime Vicedo, Lola Soler, Mónica Zamora, Gil Zorrilla, Quique González y Miguel Sánchez protagonizan esta comedia "sin estereotipos, con escenas tan realistas como rocambolescas y con diálogos tan disparatados como clarividentes, que cuestionan si no tiene todo el mundo un punto de locura".
"¿La locura está dentro de los centros psiquiátricos o en el mundo que los rodea?". Ese es el cuestionamiento que sugiere 'Folie à deux', un montaje coproducido por Iguales Teatro y La Compañía de Row que vuelve a València, donde tuvo una única función de estreno en marzo de 2023.
Tras este primer test con los espectadores, la pieza ha seguido perfeccionándose y es ahora, en su paso por Sala Russafa, cuando arranca su gira. El director e intérprete en el espectáculo, Quique González, ha explicado que el equipo artístico está "muy entusiasmado" de poder mostrar su visión personal sobre este texto de Titzina Teatro, "una compañía a la que admiramos muchísimo y que nos dio total libertad a la hora de abordar una nueva puesta en escena del espectáculo".
Diego Lorca y Pako Merino escribieron esta comedia hace veinte años, siguiendo su particular modo de trabajo que consiste en la inmersión, en la investigación de casos, personajes e historias reales que sirven de referencia a la hora de cimentar sus obras de ficción.
Para ello, pasaron varios meses realizando entrevistas en un hospital psiquiátrico a doctores, pacientes y sus familiares. De esta experiencia surgió una comedia cargada de verdades y alejada de los estereotipos, que se aproxima a la locura desde el respeto y la empatía.
"En mi vida profesional tengo contacto con personas que pasan por momentos de salud mental delicados o que padecen alguna dolencia psicológica y psiquiátrica. Este tema siempre me ha interesado porque, además, a nivel interpretativo te permite explorar muchísimo y ser muy creativo. Así que, al caer el texto de Titzina en nuestras manos, tuve muy claro que era una pieza perfecta para hablar de la locura desde el humor, sin adoctrinamientos ni lugares comunes", ha comentado González.
En la obra se podrán ver las historias de Miguel, un interno que desea irse a Portugal; Manuel, que lucha contra su piromanía, y Pere, que no quiere recordar ciertas cosas. Completan el plantel de pacientes Luisa, una intelectual que no consigue encajar; y Julia, que sueña con Hitler. A todos ellos les atiende el doctor Merino, que intenta no volverse loco (si es que aún no lo está).
Para darles vida sobre las tablas, el montaje cuenta con una serie de actores especializados en teatro textual y gestual porque ambos aspectos son especialmente importantes en este espectáculo. Son el propio González, Jaime Vicedo, Lola Soler, Mónica Zamora, Gil Zorrilla y Miguel Sánchez, "un elenco con actores de diversas edades y sexos porque queríamos mostrar la diversidad que hay en los centros psiquiátricos".
"Los problemas mentales pueden aparecer en cualquier momento de la vida y a cualquier persona", remarcan desde la coproducción, quienes juegan a involucrar al espectador en las narraciones y visiones de los personajes, provocando el fenómeno conocido como 'folie à deux', o locura compartida, que consiste en que un enfermo involucra a otra persona en su visión particular de las cosas, creando conjuntamente una realidad que solo existe en sus mentes.
"Queríamos establecer una complicidad con el público, hacerle dudar, invitarle al juego de tratar de adivinar cuándo se está contando una verdad, una alucinación, una visión realista o el producto de la fantasía de los pacientes. Porque, en realidad, la vida es así. Si te paras a pensarlo, muchas de las cosas que vivimos son auténticas locuras", ha indicado González.