VALÈNCIA. La dirección de Ford Almussafes (Valencia) ha planteado este miércoles a los sindicatos un nuevo Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) "por causas productivas y organizativas" que afectaría a los trabajadores de forma escalonada: 2.700 empleados a principios de mayo, 1.500 a finales de mes, y cerca de 1.100 en junio, coincidiendo con las fases de retorno a la actividad según el protocolo de seguridad en materia de salud y prevención establecido para evitar la propagación de la Covid-19 y con la recuperación de la demanda.
La fábrica valenciana retomará la actividad en su planta de vehículos el próximo lunes, 4 de mayo, mientras la de motores abrirá dos semanas después, el día 18. Este domingo, 3 de mayo concluye el ERTE "por fuerza" que comenzó a aplicarse a la mayoría de la plantilla a raíz de la declaración del estado de alarma frente a la emergencia sanitaria.
Ahora, la marca del óvalo plantea un nuevo ERTE, en este caso por razones productivas y organizativas, que se ajuste a la vuelta escalonada al trabajo. También aduce la caída de las matriculaciones (69% en marzo y del 90% estimado en abril de modo que prevé bajar la producción en unos 13.200 vehículos en mayo, 3.200 en junio y 1.300 en julio.
Así lo han explicado a Europa Press fuentes sindicales tras la comisión consultiva celebrada este miércoles y en la que la compañía ha expuesto su intención de aplicar el nuevo ERTE desde el mismo día que empieza a arrancar la actividad, el 4 de mayo. En este ajuste son susceptibles de entrar hasta 7.095 empleados de una plantilla de 7.211 trabajadores.
Esta reunión se ha producido justo después de la del comité central de seguridad y salud en la que UGT y CCOO han suscrito el protocolo de seguridad diseñado para la vuelta al trabajo, un documento que no han firmado STM ni CGT, por no contemplar medidas que habían reivindicado.
El presidente del Comité de Empresa y portavoz de UGT en Ford Almussafes, Carlos Faubel, ha señalado que estas medidas buscan "una vuelta paulatina y progresiva" a la actividad, tanto para lograr un regreso "seguro" como para ir aumentado la producción con arreglo a la demanda y se ha mostrado dispuesto a firmar el ERTE si se mantienen las mismas condiciones que en los últimos pactados con la empresa. Sería ya el sexto desde el año pasado.
También desde CCOO, su portavoz José Arocas, ha mostrado su disposición alcanzar un acuerdo para el ERTE con vistas a lograr un "arranque gradual" de la actividad que, según la compañía, puede durar unos tres meses hasta llegar a la normalidad".
El nuevo programa de fabricación de vehículos contempla una bajada adicional de la producción para la que prevé una "puesta en funcionamiento gradual" de las línea de producción en prensas, carrocerías, pinturas, montaje y departamentos auxiliares hasta alcanzar una "normalidad" a finales de julio de 2020.
Por plantas, la de Montaje iniciará la actividad el 4 de mayo con dos turnos hasta entrado el mes de junio, Pinturas comenzará también el día 4 con dos turnos con previsión de pasar a tres turnos en junio. La planta PTEC iniciara la producción el 11 de mayo a dos turnos para pasar a tres a finales de mes.
Por su parte, Prensas y carrocerías comenzará el 4 de mayo en Body 2 y estampación a tres turnos. En la segunda semana empezara la producción en Body 1 y 3 a un turno, posteriormente Body 1 aumentará a dos turnos hacia final de mes. Body 3 permanecerá a un turno.
Logística planificación de materiales, así como el departamento de
calidad, comenzara el lunes 4 de mayo a dos turnos, hasta mediados de junio, donde arrancara el turno de noche; Montaje de motores arrancara el 18 de mayo a régimen de un turno de lunes a jueves y a finales de junio aumentará de lunes a viernes a un turno.
Mecanizados comenzara el 18 de mayo, a un turno más un turno parcial, pasando en junio a dos turnos más un turno parcial; Recambios comenzará el día 4 de mayo, con una plantilla del 25% durante tres semanas. A finales de mayo se pasará al 75%, esperando que a principios de julio se alcance el 100% de su actividad.
También desde STM, Paco González ha mostrado "voluntad de acuerdo" en el ERTE en un momento "tan complicado" como el actual, aunque han lamentado que el protocolo de seguridad en materia de salud laboral no haya incluido medidas que reivindicaban y que consideran "carencias importantes".
Según ha explicado, se han negado a firmar el documento por "falta de participación del comité de control". Además, STM pide un "diagnóstico especial" en Montaje, donde es "imposible" mantener la distancia de seguridad; que la empresa lave la ropa de toda la plantilla a diario -solo o hace para un tercio- o que les dé una muda más; agua embotellada; o aumentar la pausa de 10 minutos para facilitar el lavado de manos de todos los trabajadores, entre otras medidas.
Tampoco CGT ha firmado el protocolo. El sindicato no acepta el cierre de los vestuarios por el peligro de llevarse la ropa contaminada a casa, lamenta que no se acepte un aumento de las pausas o su propuesta de climatización de las plantas y no comparte el criterio de la empresa para determinar la vulnerabilidad de las personas de alto riesgo.
En cuanto al ERTE, CGT estudiará la documentación y ha propuesto a la dirección rebajar los ritmos de trabajo, para poder cumplir de forma satisfactoria las medidas de seguridad. También le ha pedido que evite la incorporación inmediata de las personas de alto riesgo, y que tenga en cuenta la conciliación familiar a la hora de sacar del ERTE.