VALÈNCIA (EP). El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, en un foro de la Asociación Valenciana de Empresarios, ha asegurado este lunes que el Corredor Mediterráneo para España "no solo es conveniente", sino que "es urgente y es necesario". "Aquí hay necesidad de resolver un problema que se produce ya de cierto colapso, de cierta necesidad, por tanto, es indispensablemente un objetivo nacional".
Dicho esto, ha asegurado que su defensa al Corredor Mediterráneo no significa que no sean convenientes el resto de corredores. "Todos son necesarios", ha sostenido García-Page, quien ha dicho que el del Mediterráneo es "impepinable" porque "además responde a una necesidad existente previa y por tanto a una economía que no puede gripar".
Asimismo, el presidente castellanomanchego ha apuntado que España necesita "una cierta mirada peninsular" y ha asegurado que "las infraestructuras no tienen que ser solo radiales sino que tienen que vertebrar la Península" porque además -ha añadido- al país en su conjunto, también al arco mediterráneo, "le resulta muy caro" mantener zonas de España en permanente emigración que, sin embargo, "necesitan tener los mismos derechos y los mismos servicios".
A su juicio, "es un gran acierto" de este país que el arco mediterráneo "haya tirado del carro" tanto tiempo y "es un acierto" de España y del arco mediterráneo, en singular, hacer lo que los empresarios valencianos hacen que es, según ha subrayado, pensar en las empresas con mentalidad peninsular, "por no decir mundial".
Así, ha criticado que muchas veces en España haya "un cierto pudor" con las empresas grandes. "Sentimos orgullo por la Ford, por Renault o la Citroën y, sin embargo, a veces noto a demasiada gente con ganas de darle a las empresas que cogen volumen", ha censurado.
Por otra parte, García-Page también ha aprovechado su participación en el foro de la Asociación Valenciana de Empresarios para mostrar su apoyo y confianza a los empresarios españoles y apostar por "desterrar los vientos del populismo".
Durante su intervención, el presidente socialista se ha situado entre las personas que militan en el PSOE que defienden la actividad económica y la empresa y lo hace "con el convencimiento más absoluto" -ha asegurado- de que a él la noticia que mejor le pueden dar en Castilla-La Mancha es la apertura de una empresa.
Ha lamentado que en España haya mucha gente que ahora se plantea legislar o hacer política "muy de parte o muy de chiringuito y más a la contra de colectivos que a favor del conjunto". "Esto no se lo puede permitir una sociedad sensata y razonable", ha enfatizado.
Dicho esto, ha repasado las tres crisis que ha atravesado el país en los últimos tiempos: la de 2008, la de la covid y la de la guerra de Ucrania. Sobre la financiera, una crisis "muy grave y que rompió las costuras constitucionales", ha lamentado que provocara "una explosión enorme de populismo barato".
No obstante, ha celebrado que de esa crisis de populismo "nos hayamos ido curando". "El populismo político va a arrinconándose y va a arrinconarse más", se ha mostrado convencido un García-Page, que ha afirmado que "los vientos que nacieron en el 15M están en una brisilla muy ligera".
Sobre la covid, se ha alegrado de que la pandemia haya unido a los españoles y haya legitimado el estado autonómico. "La covid ha reafirmado Europa, ha unido un poco más al conjunto del país y, sobre todo, nos ha dado un baño de realismo extraordinario", ha subrayado.
Sobre la guerra en Ucrania, ha celebrado que Occidente haya respondido a Putin "con unidad y sentido común" y ha apuntado que, al haber decidido combatir desde la economía y no con armas, hay que asumir que va a haber consecuencias, como la inflación.