VALÈNCIA. El Ayuntamiento de València ya tiene más o menos claro cómo van a ser las futuras peatonalizaciones blandas en la ciudad. El área de Urbanismo está ultimando ya la guía municipal que recoge el diseño con el que se llevarán a cabo las actuaciones de llamado urbanismo táctico, que permiten a la administración municipal recuperar espacio público para los peatones de manera rápida y barata hasta que se produzca la urbanización definitiva.
El documento, presentado este lunes por la edil del ramo Sandra Gómez y los autores del mismo -Leku Studio-, se basa en la experiencia de otras ciudades como Barcelona y establece cierto orden en el diseño de las futuras peatonalizaciones, con elementos móviles, adaptables y dinámicos para que puedan ser implementados en todo tipo de situaciones y espacios, además de un uso de la pintura como uno de los elementos protagonistas.
Por un lado, la guía -que todavía no es definitiva- contempla un "ecosistema gráfico". Esto es: los colores, códigos de señalización, series gráficas y elementos impresos en el pavimento que inundarán los espacios con distintas finalidades. El elemento básico es la llamada "baldosa gráfica", a partir de la cual se podrán ir construyendo los espacios al gusto y dependiendo de su función. Con ella se construyen figuras geométricas que, desde el pavimento, dan coherencia a las zonas peatonalizadas. Son ejemplos básicos que se podrán ir complementando con nuevas series y desarrollos siempre que se comparta la esencia común.
Aquí se incluye una carta de colores que las actuaciones deberán seguir, y que fundamentalmente bebe de los rojos, los ocres y los azules, "muy presentes en el paisaje valencianos" al buscar los tonos terrosos más primarios y los colores marinos, estableciendo un vínculo con el entorno natural, según explicaron los autores de la guía.
Una de las funciones más curiosas de la pintura en el suelo tiene que ver con la diferenciación de los espacios. Así, "la intensidad y la concentración de la pintura permite establecer un gradiente desde los espacios completamente peatonales a las zonas de coexistencia con la bici o el coche a velocidad reducida". De este modo, a mayor frecuencia de baldosas, se trata de espacios peatonales, a menor frecuencia, espacios permitidos para bicicletas u otros vehículos.
Además de ello, la guía contiene un kit de mobiliario adaptativo. O lo que es lo mismo, elementos urbanos muy versátiles y agregables entre sí, de manera que pueden crear numerosas combinaciones para tejer los espacios urbanos y, además, se pueden adaptar a cada una de las actuaciones, bien sea en calles estrechas, en amplias plazas, o en zonas muy irregulares.
Son unos pocos los elementos urbanos estratégicos básicos a partir de los cuales surgen el resto de combinaciones. En materia de jardinería: hidro-parterres, hidro-jardineras y nodos de biodiversidad. También hay hitos, bancas, traviesas, parasoles o tótems. En definitiva, módulos adaptables, cada uno con una función específica, para construir combinaciones casi a la carta según las necesidades. Una suerte de mobiliario-puzle.
A todo ello se añaden elementos complementarios, que están recogidos en un catálogo por su valor "lúdico, social y natural". Estamos hablando en este caso de fuentes y juegos de agua, juegos sensoriales o plataformas de equilibrio, sillas y bancos, aparcabicis o separadores.
"Esta nueva guía se encontrará al servicio de cualquier profesional para implementar los planes estratégicos de València de manera ágil y progresiva, con un coste limitado y atendiendo a las necesidades de ciudadanía", afirmó la edil, que apuntó que la nueva herramienta otorgará "coherencia a las intervenciones urbanísticas, reflejo de la identidad de la ciudad".
Ahora bien, no se aplicará a espacios emblemáticos de la ciudad que ya han sido recuperados para la ciudadanía como la plaza del Ayuntamiento o la de San Agustín por tratarse de intervenciones "muy concretas" y de entornos BIC (Bien de Interés Cultural). Ha señalado que en estos casos se ha hecho un diseño específico, atendiendo al paisaje de cada uno de ellos y a los criterios establecidos por Patrimonio.
El primer emplazamiento donde se quiere hacer servir esta guía es en la supermanzana que se construirá próximamente en el barrio de La Petxina, delimitada por las calles Palleter y Calixto III, una actuación que Gómez previó empezar a principios de 2021. Además, el Ayuntamiento aplicará estos criterios en la intervención prevista para pacificar la avenida Pérez Galdós, como paso previo a la reforma integral que se llevará a cabo en esta vía.
La titular de Desarrollo Urbano precisó respecto a la obra prevista para Pérez Galdós, sobre un tramo de 5 kilómetros, que "la maquinaría también está en marcha". A este respecto, explicó que el Ayuntamiento trabaja en la redacción de los pliegos de condiciones para su licitación, con un coste de unos 700.000 euros.