VALÈNCIA. El presidente de Vox en la provincia de Valencia, Ignacio Gil-Lázaro, ha asegurado que "en absoluto" se ha abierto un "conflicto" en el seno del Consell, que su partido comparte con el PPCV, después de las diferencias mostradas esta semana por una campaña LGTBI de la Generalitat o por el anuncio de que la Conselleria de Cultura --que dirige el vicepresidente primero, Vicente Barrera (Vox)-- iba a patrocinar el Festival Internacional de la Canción de España.
"Evidentemente, no somos, ni vamos a ser nunca, quienes pongamos en riesgo una situación de gobierno. Yo espero que otros tampoco, o sea que esa es la situación. No busquen ustedes situaciones de conflicto donde no las hay, y desde luego por nuestra parte, por parte de Vox, no deseamos que las haya", ha manifestado a preguntas de los periodistas antes de la constitución de la comisión política provincial de Vox.
A última hora de este jueves, la Generalitat aseguró que finalmente no apoyará "ni institucional ni económicamente" al Festival Internacional de la Canción de España, anunciado para el próximo junio en València para "dar visibilidad a la canción en castellano", al considerar que "puede haber alguna duplicidad con otro que se celebra con estas características" como el Benidorm Fest. Previamente había trascendido que el departamento de Barrera iba a patrocinar ese nuevo certamen, tras lo que fuentes de Cultura se remitieron al comunicado emitido por Presidencia.
Preguntado por si hay problemas internos en el Consell, Gil-Lázaro ha zanjado: "Ninguno. Vox puede y debe tener sus propias iniciativas, como el PP puede y debe tener sus propias iniciativas. Cada uno de los dos partidos tenemos puntos de vista distintos en cuestiones muy concretas, pero lo que es evidente, la experiencia lo dice, no estoy yo sacando conclusiones extrañas, es la capacidad de entendimiento, de respeto mutuo, de cohesión y el sentido de la responsabilidad con la sociedad valenciana".
Según ha defendido, esta posición "hace que las diferencias se queden simplemente en eso, en legítimas diferencias y no en casus belli", por lo que ha rechazado que Presidencia desacreditara a Cultura.
"En absoluto --ha insistido--. Las posiciones que haga públicas el vicepresidente primero o cualquiera de los otros dos consellers (de Vox) son y serán las que Vox Valencia respalde. Además, se hacen en los términos de afirmar criterios propios, pero no de poner en riesgo ninguna situación de cooperación en las tareas de gobierno".
En esta línea, cuestionado por si se sienten desautorizados, Gil-Lázaro ha reiterado que "en absoluto" y que no quieren "entrar en esos términos", además de volver a señalar que son partidos diferentes con sus "posiciones legítimas propias".
Dicho esto, ha asegurado que desconoce si desde su partido se pusieron este jueves en contacto con alguien de Presidencia o del PP: "¿Y yo qué quiere que le diga? No lo sé, pero lo que sí que sé es que no hay situaciones de conflicto. Eso es lo básico".
Por otro lado, respecto al posicionamiento que marcó esta semana Barrera en contra de la campaña turística LGTBI 'Orgull de Comunitat' anunciada por la Generalitat, el presidente de Vox Valencia ha defendido que "el vicepresidente ha sido muy explícito definiendo y estableciendo cuál es el mensaje político de Vox".
"El vicepresidente Barrera tiene el respaldo explícito del partido. Lo que el vicepresidente Barrera pueda decir a pasado, a presente o a futuro, lo dice sin lugar a duda Vox Valencia", ha abundado, para subrayar que "el perfil que debe jugar Vox en las instituciones es el que muy acertada e inteligentemente están marcando los miembros que forman parte del Consejo de la Generalitat Valenciana y en otras instituciones".
Gil-Lázaro ha reivindicado que su partido "garantiza la estabilidad de esos gobiernos" desde su "sentido de la responsabilidad de Vox", algo que ha ligado con "el proceso firme, serio e inmediato de alcanzar un acuerdo de gobierno en la Comunidad Valenciana que fue francamente ejemplar en relación con lo que pudo ocurrir en otras partes de nuestro territorio".