VALÈNCIA (EP). El Gobierno aplaza la reforma de la Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU), por lo que no habrá cambios en la prueba de 2024, según han confirmado a Europa Press fuentes gubernamentales.
Además de las consideraciones jurídicas y técnicas para sacar adelante la nueva normativa, el secretario de Estado ha destacado que "lo más importante era transmitir tranquilidad, certidumbre, confianza, a los chicos que se tienen que examinar en junio de este año" y que no les caiga "una normativa nueva a mitad de curso que cambie las reglas del juego".
Aprobar la nueva EBAU "excedería las competencias" del Gobierno
El Ministerio de Educación ha precisado que esta decisión se debe a que la aprobación de la norma "excedería las competencias de un Gobierno en funciones, generando confrontación con las administraciones autonómicas". Además, añade, atiende a la petición de un año de moratoria por parte de las instancias universitarias y "rebaja la incertidumbre de docentes, alumnos y familias".
Debido a la convocatoria anticipada de elecciones generales, el Ministerio decidió paralizar la aprobación del real decreto de la nueva prueba de acceso a la Universidad por "responsabilidad", al entender que era "más lógico" que lo sacara adelante el nuevo Gobierno. Ahora, debido a que el Gobierno no puede aprobar el decreto al estar en funciones, ha decidido aplazar la nueva EBAU.
Por lo tanto, la próxima prueba de acceso a la Universidad seguirá el mismo modelo que la del curso anterior, cuyo real decreto establecía que cada una de las pruebas contiene preguntas abiertas y semiabiertas que requerirán del alumnado capacidad de pensamiento crítico, reflexión y madurez. Además de estos tipos de preguntas, en el modelo de EBAU actual se pueden utilizar también preguntas de opción múltiple, siempre que en cada una de las pruebas la puntuación asignada al total de preguntas abiertas y semiabiertas alcance como mínimo el 50 por ciento.
En el modelo de prueba actual, las preguntas de opción múltiple tienen "una sola respuesta correcta inequívoca y que no exigen construcción por parte del alumnado, ya que este se limitará a elegir una de entre las opciones propuestas". Por su parte, las semiabiertas son preguntas "con respuesta correcta inequívoca y que exigen construcción por parte del alumnado", una construcción que "será breve, por ejemplo, un número que da respuesta a un problema matemático, o una palabra que complete una frase o dé respuesta a una cuestión, siempre que no se facilite un listado de posibles respuestas".
El proyecto de reforma de la EBAU
Por su parte, el proyecto de real decreto por el que se regulan las características básicas de la nueva prueba de acceso a la Universidad y se establece el procedimiento de cálculo de la calificación de acceso, publicado el pasado mes de febrero y finalmente aplazado un año, el Ministerio de Educación y Formación Profesional eliminó la prueba de madurez y las preguntas tipo test que inicialmente tenía previstas para esta nueva prueba.
Asimismo, Educación aumentaba el tiempo de realización de los ejercicios en la nueva prueba, pasando de 90 minutos a 105 minutos, ya que, según justificaba el Departamento dirigido por Pilar Alegría, "se tiene en cuenta la lectura del ejercicio, su análisis y producción".
Otro de los cambios que incluye el proyecto de real decreto es que los alumnos, en el momento de matricularse a la prueba de acceso, elegirán entre examinarse de Historia de España o Historia de la Filosofía. Además, en las comunidades con lengua cooficial se añade un examen de lengua propia.
Prueba piloto de la nueva EBAU en 50 colegios
Con el objetivo de poner a prueba la nueva EBAU, el Ministerio realizó el pasado mes de marzo un prueba piloto en 50 centros de todas las comunidades autónomas españolas, Ceuta y Melilla, a excepción de las gobernadas por el Partido Popular y Aragón y el País Vasco. Esta prueba piloto incluía ejercicios menos memorísticos que reflejan situaciones de la vida cotidiana.
Según las guías de corrección de los exámenes piloto de la nueva prueba de acceso a la Universidad, publicadas por Educación, la nueva EBAU descontaría 0,25 puntos por cada error ortográfico y las tildes contarían como media falta.
Así, en la guía correspondiente a la prueba de Lengua Castellana y Literatura, se indica que "la calificación de cada ejercicio será siempre 0, 0,25, 0,5, 0,75, 1, 1,25, 1,5, 1,75, 2, 2,25 o 2,5 puntos, hasta un total de 10 puntos" y se especifica que se descontarán 0,25 puntos por cada error ortográfico; las tildes serán consideradas como media falta, y todos los demás casos (mayúsculas, extranjerismos, signos de exclamación e interrogación) se computarán como una falta. Además, los errores repetidos solo descontarán una vez.
En la guía se propone que, cuando la respuesta del alumno sea mejorable o contenga errores, se califique con una puntuación de 0,25, por ejemplo, ante la pregunta de elaborar un texto expositivo-argumentativo, aunque la presentación no se ajuste "en absoluto al formato propuesto", tenga "una extensión inferior a la requerida", no se ajuste al tema o contenga "vocabulario inadecuado, insuficiente" y con "abundantes errores gramaticales".
En suma, la guía señala que "se tenderá a una valoración conjunta positiva siempre que el texto tenga unos mínimos de coherencia y cohesión, así como una cierta corrección expresiva".
La Crue aplaude la prórroga
La presidenta de Crue Universidades Españolas y rectora de la UJI, Eva Alcón, ha aplaudido este jueves la decisión del Gobierno de mantener el formato actual de la selectividad para el año 2024, que pospone los cambios previstos a 2025 por estar en funciones, y ha apostado por aprovechar esta prórroga para diseñar "una prueba de garantías".
Alcón se ha expresado así a preguntas de los periodistas tras inaugurar un curso sobre financiación universitaria en la Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander, junto al ministro de Universidades en funciones, Joan Subirats.
"Aplaudimos la decisión, es importante pensar que el estudiantado de bachillerato está a punto de empezar el curso y tiene que saber las reglas del juego", ha subrayado Alcón, quien también es rectora de la Universitat Jaume I de Castellón, y que ha recordado que la Crue pidió al Ministerio de Educación que los cambios en la selectividad no se aplicaran este curso.
La presidenta ha abogado por aprovechar este tiempo para que la sectorial de estudiantes, la Crue y los ministerios de Educación y Universidades trabajen "de la mano" en ofrecer una prueba que "dé garantías" al alumnado.
"Tenemos la experiencia de muchísimos especialistas que llevan años trabajando sobre el tipo de modelo, la duración del examen... Esa experiencia no la podemos perder y eso es lo que nosotros podemos aportar", ha apostillado.
Estudiantes lamentan la paralización
Por su parte, la Confederación Estatal de Asociaciones de Estudiantes (CANAE) ha lamentado que el Gobierno haya aplazado la reforma de la Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU), por lo que no habrá cambios en la prueba de 2024.
"Hemos echado en falta más compromiso por parte del Ministerio de Educación en cuanto a llevar a cabo esta reforma, era necesario implantarla cuanto antes", ha señalado en declaraciones a Europa Press el presidente de CANAE, Antonio Amante, después de que el Ministerio anunciara este jueves el aplazamiento de la nueva EBAU debido a que el Gobierno, al estar en funciones, no puede aprobar la reforma en Consejo de Ministros.
Por ello, la organización de estudiantes está "a la espera" de tener una reunión con los responsables del Ministerio de Educación y Formación Profesional para que expliquen la situación y "establecer los próximos pasos y poder aprovechar este retrase en la aplicación de la reforma como una oportunidad para poder seguir enriqueciéndola y hacerla más participativa".
Sindicatos lo ven "prudente" y "razonable"
Por otro lado, la Unión General de Trabajadores (UGT), la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) y la Federación de Sindicatos Independientes de Enseñanza (FSIE) han aplaudido que el Gobierno aplace la reforma de la Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU), por lo que no habrá cambios en la prueba de 2024.
"Es razonable la decisión de aplazar la reforma de la EBAU estando el Gobierno en funciones", ha señalado en declaraciones a Europa Press la responsable de Enseñanza de UGT, Maribel Loranca, después de que el Ministerio de Educación y Formación Profesional anunciara este jueves el aplazamiento de la nueva EBAU debido a que el Ejecutivo, al estar en funciones, no puede aprobar la reforma en Consejo de Ministros.
No obstante, Loranca ha recordado que la reforma de la prueba de acceso a la Universidad "sirvió de confrontación política, como ocurre con otras cuestiones educativas, cuando se comenzó a abordar".
Por ello, el sindicato urge a un acuerdo que "adecue la prueba a los objetivos de la ley educativa" e insiste en la "imposibilidad de realizar una única e igual prueba para toda España porque supone ignorar el peso de los currículos autonómicos", algo que, en sus palabras, "no impide la realización de pruebas homologables con acuerdo en los criterios de exigencia y evaluación".
"Nos preocupa la situación del profesorado que imparte Segundo de Bachillerato que, al tiempo que tienen que trabajar con el nuevo enfoque por competencias, debe orientar al alumnado con los criterios de leyes anteriores", ha apostillado la responsable de Enseñanza de UGT.
Por su parte, CSIF ha valorado "de manera positiva" que el Gobierno en funciones haya decidido aplazar la reforma de la nueva prueba de acceso a la Universidad, tal y como le recomendó el sindicato a principios del pasado verano.
En concreto, CSIF reclamó retrasar un año la nueva EBAU, teniendo en cuenta que el alumnado de Segundo de Bachillerato "iba a comenzar su curso sin conocer los criterios de la prueba a la que deberán enfrentarse en junio de 2024".
En todo caso, el sindicato advierte de que la decisión adoptada este jueves por el Gobierno "refleja la inestabilidad del sistema educativo" y espera que la futura reforma "se realice de manera pausada y consensuada en el nuevo ciclo político, con el fin de que haya una EBAU única en toda España sin diferencias en exigencia y nota".
CSIF también reclama un Pacto de Estado para impulsar esta y el resto de las reformas que necesita el sistema educativo "para favorecer la calidad, reducir el fracaso escolar y mejorar las condiciones laborales y el reconocimiento de la profesión docente".
Desde FSIE también han valorado positivamente la decisión del Ejecutivo de aplazar la nueva prueba de acceso a la Universidad y mantener el mismo examen para 2024. "Nos parece bien y prudente esta decisión en el contexto político en el que estamos", ha subrayado a Europa Press el secretario general del sindicato, Jesús Pueyo.
La Generalitat ve positivo que se aplace la nueva EBAU
Por último, la Conselleria de Educación, Universidades y Empleo valora positivamente el aplazamiento de la nueva EBAU, pero reclama al Ministerio de Educación "seguridad jurídica y celeridad" sobre las pruebas de este curso.
Así lo ha trasladado el director general de Ordenación Educativa, Ignacio Martínez, quien ha participado en la videoconferencia convocada con el Ministerio donde les ha informado del aplazamiento al estar el Gobierno en funciones.
A su juicio, es positivo que el Ministerio haya "cedido" finalmente a posponer la aplicación de la nueva prueba de acceso a la universidad, pero "hay todavía muchos aspectos que no están claros", recoge la Generalitat en un comunicado. Tras asegurar que la reunión se ha convocado "sin un orden del día y sin ningún tipo de documentación", el responsable autonómico ha advertido que "hay aspectos que se han quedado pendientes, especialmente las características que deben tener los diferentes ejercicios de la prueba". Por ejemplo, según ha explicado, no se han concretado ni se ha establecido un calendario concreto, "aspectos que pueden afectar negativamente a nuestro alumnado".
"Desde diferentes comunidades autónomas se ha trasladado inquietud por una falta de seguridad jurídica en la fórmula utilizada, dado que el Ministerio únicamente ha explicado que no va a publicar ningún tipo de Real Decreto, pero tampoco ha hablado en ningún momento de que vaya a modificar el calendario de aplicación de la LOMLOE, que obligaba a aplicar estas pruebas este curso escolar", ha expuesto el director general.