VALÈNCIA (EFE). El Gobierno considera que el colapso del sistema de transporte a escala global afecta menos a España que a otros socios europeos, será "transitorio" y mejorará en 2022, salvo si se registran "actuaciones irracionales" para aumentar las provisiones de "stock" e inventarios.
Así lo ha defendido este jueves la secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, quien se ha mostrado confiada en que los factores que están detrás de estos "cuellos de botella" no serán "duraderos" salvo si cunde "el pánico", una reacción que contribuiría a una mayor saturación de los puertos y el sistema de transportes en general, generando "sensación de desabastecimiento".
Durante su intervención ante la Comisión de Industria, Comercio y Turismo del Congreso de los Diputados, Méndez ha augurado que la situación "tenderá a despejarse en los próximos meses" y se esperan "mejoras sustanciales" para 2022, con la excepción de algunos productos estratégicas, como los semiconductores.
"El origen del problema tiene que ver con la escasez de contenedores, la localización asimétrica de los mismos y la afectación de la pandemia a los puertos, sobre todo en Asia. Pero afectan en mucha menor medida a España que a otros países socios de la Unión Europea (UE), como Alemania o Países Bajos", ha precisado.
De hecho, la secretaria de Estado ha destacado la positiva evolución de las exportaciones, aunque ha reconocido que ese colapso sí "lastra el potencial" para poder vender al exterior incluso más de lo que comercializa España actualmente.
Ha resaltado que en las últimas semanas el precio de los fletes del transporte marítimo tienden a la baja y las navieras ya han anunciado la construcción de más contenedores y buques de gran envergadura, por lo que la saturación de los puertos irá desapareciendo.
"Que el problema se cronifique dependerá de la gestión de las expectativas. Por eso es fundamental conocer los factores de origen para entender que no deberían ser duraderos en la medida en que no se entre en la espiral inflacionista y que no dé lugar a actuaciones irracionales o de pánico.
En este sentido, ha citado un reciente informe de la patronal Anged -que agrupa a las grandes empresas de la distribución- y en el que descartaban el riesgo de desabastecimiento "ni en las próximas semanas ni de cara a Navidad".
Méndez ha señalado que el Ejecutivo ya realiza un estudio sobre "los riesgos de concentración de las importaciones" de algunos productos, lo que le permitirá evaluar si hay otras alternativas y evitar así los peligros "geopolíticos" que puede implicar esta situación.
Preguntada sobre el impacto del Brexit en el comercio exterior de España con Reino Unido, ha incidido en que todavía es demasiado pronto para hacer un análisis al respeto, y ha recordado que además de la entrada en vigor del acuerdo de libre comercio también influyen otras cuestiones, como el impacto de la pandemia.
En cuanto a las relaciones con Estados Unidos, Méndez ha precisado que el Gobierno español no hace "proselitismo" de ninguna otra administración, pero sí ha destacado el carácter negociador del presidente Joe Biden frente a su antecesor, Donald Trump.
"En esta comisión he oído en anteriores ocasiones a diputados haciendo una defensa incondicional y casi sin matices de la Administración Trump, y eso sí me choca, porque defender los intereses de España no era eso", ha esgrimido en alusión a la imposición de aranceles y otras prácticas proteccionistas por parte del expresidente norteamericano.
Los datos de flujos transfronterizos globales se han recuperado con fuerza desde la primera parte de la pandemia, tal y como explica el consultor