VALENCIA. Este pasado jueves 30 de junio el restaurante Macel·lum, ubicado en pleno corazón del centro histórico de Valencia, cerró sus puertas tras dos años de trayectoria. Alejandro Platero, chef y propietario, puso así fin a una etapa profesional donde ha crecido, más si cabe, como cocinero.

Como él mismo aseguraba hace unos meses, el principal motivo del cierre es “porque las instalaciones de cocina ya no se ajustan a nuestras necesidades actuales de trabajo y vamos a buscar un nuevo emplazamiento donde poder trabajar a gusto”. Y así es, el nuevo Macel·lum abrirá sus puertas en los próximos meses en una zona céntrica de la ciudad tal y como tenía pensado Alejandro. Una nueva ubicación donde se seguirá manteniendo la esencia de Platero y su cocina, llena de contrastes y puro sabor. Mientras, seguirá atendiendo en su restaurante Come&Calla en el barrio de Campanar y prepara la apertura de Platero Food Studio&Experience, un taller gastronómico donde se impartirán cursos y se desarrollará toda la parte creativa del grupo Mulandhara.

Cocinero incansable, muy joven empezó su imparable carrera en el mundo de la restauración. Primero como camarero y posteriormente como jefe de sala y de cocina, bases en las que se inició para emprender su andadura en el mundo empresarial. Su abuela y su madre fueron las que le inculcaron el amor por la cocina y las primeras que le dejaron trastear al frente de los fogones. Cinco locales propios han precedido a Macel·lum (Come&Calla, La Parada, Saborea, Mulandhara y Ley de Murphyy) en los que se ha ido forjando como el cocinero que ahora es. Sin duda, el reconocimiento del público, que no del sector, le vino con el programa de televisión “Top Chef”, donde llegó a ser finalista.