VALÈNCIA. Siete años. Siete largos años. Es el tiempo que lleva el sector de la hostelería sin un convenio colectivo que vele por los derechos laborales de más de 100.000 profesionales. Las tablas salariales se firmaron en el año 2013. Desde 2014 sólo se habían producido dos reuniones, completamente insatisfactorias, por las posturas encontradas de las partes.

La mesa negociadora está constituida desde octubre de 2017, pero nada, no hay manera. De un lado están los intereses de la parte empresarial, compuesta por representantes de asociaciones federadas (como Hosbec-CV o la Federación Empresarial de Hostelería de Valencia FEHV). Por otro, las reclamaciones de los portavoces sindicales, entre los que destacan UGT y CCOO. Y la Administración, ahí, que ni pincha ni corta.

La flexibilidad horaria, los meses de vacaciones o las categorías de trabajo, así como las diferencias entre empresas, son teclas delicadas. Que si unos quieren cobrar más, que si otros quieren pagar menos; la disputa por si los contratos eventuales son válidos; el eterno debate sobre tomar vacaciones en los mese de verano. Analizamos algunos de estos asuntos con Manuel Espinar, presidente de la Fehv, que aglutina a 1.500 empresas de la provincia.