VALÈNCIA. Las patologías que afectan a músculos y huesos no siempre son competencia exclusiva de un solo profesional. Y así, hay visitas al traumatólogo que se saldan con un diagnóstico no quirúrgico que precisa del seguimiento de un fisioterapeuta o un médico rehabilitador. O procesos dolorosos que esconden una enfermedad degenerativa de origen reumatológico.
El hospital IMSKE está especializado en la prevención, diagnóstico, tratamiento y recuperación de patologías que afectan a huesos y músculos.
El hecho de ser un centro monográfico permite a IMSKE ofrecer una atención integral desde el diagnóstico hasta la recuperación total del paciente; acortar tiempos entre todas las pruebas diagnósticas y el tratamiento que el paciente precise, lo que sin duda reduce notablemente su tiempo de convalecencia; y estar siempre cerca del paciente, escuchando y atendiendo a sus necesidades.
El hospital, que abrió en verano de 2020, cuenta con la última tecnología tanto diagnóstica como en equipamiento para fisioterapia y quirófano.
Otro de los valores añadidos del Hospital IMSKE es la idea del movimiento como potente herramienta terapéutica. En este sentido, tanto los tratamientos del dolor, como los programas de fisioterapia o los postoperatorios integran a la mayor brevedad el movimiento. Fisioterapeutas y readaptadores conforman una pieza decisiva en este punto, y centran su actividad en devolver al paciente de forma muy paulatina a su rutina diaria sin dolor y sin riesgo de recaídas.
El hecho de reunir en un mismo espacio físico distintas especialidades con un nexo común, el de atender patologías de músculos y huesos, supone una fórmula pionera en Valencia y permite acompañar al paciente en todo momento, desde la búsqueda del diagnóstico hasta la resolución de su problema.
Roberto Arenas fue intervenido en IMSKE por una lesión de rodilla. “El mismo día de la intervención el equipo al completo de fisioterapia subió a verme a la habitación”. Roberto destaca la tecnología y las instalaciones del hospital, pero pone el foco en la calidad humana de sus profesionales. “La recuperación precisa de un trabajo físico pero también mental. Es un trabajo diario en el que es importante no venirte abajo; la ayuda de todo el equipo de IMSKE en este sentido ha sido inmensa”, afirma Roberto.
La práctica totalidad de supervisores del Hospital IMSKE gozan de una importante trayectoria en el entorno deportivo. Su director médico, el Dr. Ignacio Muñoz, ha tratado a deportistas de élite como María Sharapova, David Ferrer o Juan Carlos Ferrero. Es, además, jefe de los servicios médicos del Valencia Basket Club.
“Cuando te enfrentas a una lesión en un deportista de élite, el perfil del paciente es muy particular: se trata de gente sana que en algún momento sufre una lesión y que precisa un nivel de eficacia y profesionalidad que garanticen su vuelta a la competición en el menor tiempo posible y minimizando el riesgo de recaídas” explica el Dr. Muñoz
En este sentido, no hay que perder de vista que con el deportista de élite no se reparan esfuerzos ni recursos por devolverlo cuanto antes y en las mejores condiciones y garantías de seguridad a su rutina diaria. Y así, por ejemplo, se trabaja a fondo en investigación en medicina regenerativa que alumbre procesos biológicos que aceleren la recuperación y supongan un avance en tratamientos más conservadores, mínimamente invasivos. “Todos estos avances, toda esta experiencia…tiene un valor incalculable a la hora de extrapolar los éxitos a cualquier paciente. Y es un auténtico valor añadido que el hospital IMSKE ofrece”.
La medicina regenerativa utiliza la biología molecular y la ingeniería de los tejidos para intentar reemplazar o regenerar células y tejidos con el fin de restaurar o restablecer su funcionamiento.
“Se trabaja a fondo en investigación en medicina regenerativa que alumbre procesos biológicos que aceleren la recuperación y supongan un avance en tratamientos más conservadores, mínimamente invasivos”
“Se basa en el conocimiento de los mecanismos de reparación propios del organismo, intentando estimular los mismos, para tratar tejidos y órganos dañados sin cuyo estímulo tendrían un retardo en su curación o llegarían a una situación irreparable”, explica el Dr. Pedro López, responsable de la Unidad de Medicina Regenerativa del Hospital IMSKE. “Gracias a la medicina regenerativa hemos conseguido ir sustituyendo tratamientos farmacológicos o quirúrgicos por alternativas bio y regenerativas, mucho más naturales y con un grado de eficacia muy satisfactorio”, matiza el Dr. Ignacio Muñoz. IMSKE es un hospital a la vanguardia de la medicina y de la terapia biológica en el que desarrollan su labor profesionales con una larga experiencia en la utilización de diferentes terapias moleculares, quirúrgicas y de inmunomudulación.
Según la Organización Mundial de la Salud, una de cada dos personas que acuden a recibir atención primaria es por causa de algún dolor.
Pero, además, una de cada cinco de ellas sufre de dolor crónico y una de cada tres tiene dolencias tan graves que no pueden lograr tener una vida normal. En ocasiones el dolor es calificado como inespecífico, ya que no tiene una causa evidente, como puede ser una enfermedad inflamatoria, un traumatismo, un efecto secundario a un medicamento u otras causas.
“Establecer un buen diagnóstico para saber lo que le está ocurriendo al paciente. Para ello, es necesario realizar una detallada anamnesis y exploración, además de una valoración multidisciplinar. Es importarte realizar no sólo un estudio a nivel articular, muscular, de movilidad y función, sino saber si el paciente realiza ejercicio físico y cómo lo realiza, cómo es su descanso, su estado anímico y otros condicionantes como el estrés que pueden afectar a su sistema osteomuscular”, explica el Dr. Pedro Castells, médico rehabilitador del Hospital IMSKE.
“Es fundamental”, añade, “establecer un adecuado programa de rehabilitación y metodología personalizados para cada paciente, donde el ejercicio físico es parte fundamental para su recuperación y para aliviar el dolor”.
El hecho de compartir un mismo espacio físico favorece que el tratamiento del dolor en el Hospital IMSKE sea multidisciplinar e implique tanto a traumatólogos y reumatólogos que, con frecuencia, funcionan como primera toma de contacto del paciente, como a médicos rehabilitadores y a especialistas en el tratamiento del dolor. Así, distintos especialistas en IMSKE manejan las técnicas de tratamiento del dolor más innovadoras como punción seca o infiltración anestésica y antiinflamatoria de puntos gatillo, medicina manual, bloqueos anestésicos de nervios sensitivos o radiofrecuencia.
Por su vinculación con el entorno deportivo y por las consecuencias que las lesiones de rodilla tienen entre la población tanto joven como mayor, el equipo de traumatología del Hospital IMSKE ofrece una experiencia consolidada en la cirugía de rodilla. En el caso de lesiones meniscales, una de las directrices del equipo médico de IMSKE es estudiar a fondo el caso. En este sentido, más allá del diagnóstico y las consecuencias de la lesión, es determinante conocer la rutina del paciente y qué va a necesitar de su rodilla, y en función de ello, operar u optar por opciones más conservadoras.
“Sabemos que la tirada del menisco va a acelerar procesos degenerativos como la artrosis, por eso en IMSKE somos muy selectivos a la hora de operar”, explica el Dr. Muñoz. “Hoy sabemos que hay pacientes con meniscos rotos en los que se ha desestimado la cirugía y que, sin embargo, tienen un pronóstico a largo plazo incluso mejor que si lo hubieran hecho”.
Una vez más, el trabajo en equipo y las sinergias que se generan al interactuar distintos profesionales da como resultado en el Hospital IMSKE la ganancia del paciente, que tiene garantizada la mejor opción terapéutica para su problema.
Hoy en día el miedo a pasar por una cirugía de prótesis en edades tempranas por el temor a que el paciente viva más años que su prótesis es infundado