MADRID. Desde el punto de vista fundamental, el único foco que puede perjudicar la evolución del precio de la aerolínea es la actual tensión geopolítica.
Sin embargo, estamos viendo una elevada correlación entre el precio de IAG y la renta variable no sólo europea, sino también estadounidense donde el efecto ha sido menor. Ante la apertura de las dos nuevas rutas de Castellón Bucarest y Valencia-Londres, la compañía podría aprovecharlas para mejorar su cifra de negocio.
Desde el punto de vista técnico, vemos una figura triangular claramente inclinada al alza con una serie de mínimos crecientes. Por la parte superior de la figura, los impulsos alcistas han sido frenados mediante una directriz que ha generado una serie de máximos crecientes, aunque a un ritmo menor que la directriz que marca los mínimos.
En las últimas semanas, la zona de 8,176 euros y 8,282 euros ha sido muy importante en la tendencia del mercado, ya que sólo ha podido ser rota mediante gaps (huecos), tanto alcistas como bajistas. Podríamos aprovechar entradas del precio en la región citada para buscar una continuación de la tendencia alcista con objetivo a la mitad del último máximo en 8,520 euros. Nuestra estrategia quedaría anulada en caso de perder los 8,176 euros.
En conclusión, esperamos una continuación de la tendencia alcista lo que, unido a la apertura de nuevas rutas aéreas y niveles de soporte relevantes puede llevarnos a pensar en largos para IAG.
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