VALÈNCIA (EP). El Ibex 35 ha firmado este miércoles su cuarta jornada consecutiva al alza -la mejor racha desde mediados de mayo- al anotarse una subida de un 0,27%, hasta situarse en los 10.753,0 puntos, en una jornada marcada por la caída de la inflación de Estados Unidos en julio y que podría derivar en una política monetaria menos restrictiva por parte de la Reserva Federal (Fed).
El selectivo español ha arrancado con importantes alzas que le han llevado al filo de los 10.800 enteros, sin embargo, a la hora de negociación los avances se han moderado y se han mantenido estables en el resto de la jornada, condicionada a su vez por los bajos volúmenes de negociación propios de los periodos vacacionales (se han negociado menos de 100 millones de acciones al día en lo que va de semana).
Dentro de la agenda macroeconómica, se ha publicado que el índice de precios de consumo (IPC) de Estados Unidos se situó en el 2,9% interanual en el mes de julio, lo que implica una desaceleración de una décima respecto al dato previo y su menor cifra desde marzo de 2021.
De su lado, el índice subyacente, que excluye de su cálculo los precios de los alimentos y la energía por su mayor volatilidad, cerró el séptimo mes de 2024 con un incremento del 3,2%, una décima menos y menor marca desde abril de 2021.
Cabe destacar que el mercado esperaba que la inflación se situase, en su tasa general e interanual, en el 2,9%, reduciéndose frente al 3% de junio, mientras que la subyacente mensual subiría al 0,2% frente al 0,1% de junio.
De este modo, los expertos de la firma Federated Hermes han reaccionado al dato argumentando que "la presión recaerá sobre la Fed para que suavice su política, que se considerará extremadamente restrictiva". "Parece que la senda para un recorte en [la reunión de] septiembre está despejada", han acompasado los analistas de eToro.
También en el terreno macroeconómico, se ha conocido que la tasa de inflación interanual del Reino Unido se situó el pasado mes de julio en el 2,2%, lo que supone una aceleración de dos décimas respecto de la subida de los precios registrada en junio y el primer repunte del dato desde diciembre de 2023.
Además, se ha conocido que el PIB de la zona euro y del conjunto de la Unión Europea creció un 0,3% en el segundo trimestre de 2024 respecto de los tres meses anteriores, manteniendo así en ambas regiones el ritmo de expansión observado en el primer trimestre, según la segunda lectura del dato publicada por Eurostat.
Ligado a esto, la producción industrial de la eurozona registró el pasado mes de junio un nuevo retroceso mensual, el tercero consecutivo, tras bajar un 0,1% respecto de mayo, cuando había caído nueve décimas, según los datos de Eurostat.
En este contexto, los mayores ascensos dentro del Ibex 35 han sido los de CaixaBank (+1,35%), Mapfre (+1,12%), Inditex (+1,1%), Puig (+1,07%), Logista (+0,97%) y Bankinter (+0,95%). Por el lado contrario, los descensos más destacados han sido para Rovi (-1,7%), Acciona Energía (-1,27%), Solaria (-0,98%), Rovi (-0,59%), Aena (-0,8%) y Repsol (-0,59%).
Las principales Bolsas europeas también se han decantado por las subidas: Fráncfort se ha revalorizado un 0,41%; Londres, un 0,56%; París, un 0,79%; y Milán, un 1%.
Por su parte, los índices de Wall Street han abierto por la tarde en un estado de euforia compradora por el IPC en ese país, si bien al cierre europeo los avances se moderaban al entorno del 0,5% (el Dow Jones se elevaba un 0,5%; el S&P 500 un 0,36% y el Nasdaq un 0,35%).
En el mercado de materias primas, el precio del barril de petróleo de calidad Brent, referencia para el Viejo Continente, se situaba en 80,4 dólares a la hora de cierre en Europa, un 0,37% menos, mientras que el Texas se abarataba un 0,9%, hasta los 77,65 dólares.
En el mercado de las divisas, la cotización del euro frente al dólar ha llegado a rozar los 1,105 dólares -entonces subía un 0,4%- poco antes del cierre bursátil, marcando máximos desde que empezó el año, ante la perspectiva del comienzo de recortes de tipos por parte de la Fed.
En el mercado secundario de deuda, el interés del bono español a diez años ha cerrado en el 3,015% tras restar un punto básico, con la prima de riesgo (el diferencial con el bono alemán) en los 83,5 puntos.
De su lado, la onza de oro troy retrocedía un 0,85%, hasta los 2.445 dólares, mientras que el bitcóin se depreciaba un 1,8%, negociándose por debajo de los 60.000 dólares.