VALÈNCIA. La seguridad sanitaria se ha situado como un factor clave a la hora de elegir un destino vacacional. Conscientes de esa nueva escala de prioridades, autoridades turísticas de todo el mundo se afanan en adaptar sus productos para situarse en los primeros puestos en la captación del turista poscovid y recuperar una industria arrasada por la pandemia.
Entre los países que más fuerte están apostando en esa carrera está Israel, el líder mundial en la vacunación contra la covid-19 con cerca del 60% de la población ya inmunizada o, lo que es lo mismo, 121 dosis administradas por cada 100 habitantes. Tan es así que sus dirigentes están decididos a aprovechar esta circunstancia para ascender a la primera división de destinos mediterráneos en detrimento de los clásicos.
Con el marchamo de ser uno de los estados más avanzados en la superación de la pandemia, su gobierno ha puesto en marcha un ambicioso programa para la recuperación del turismo extranjero a partir de este mismo mes de mayo basado en grandes pilares como una campaña de promoción global, grandes eventos internacionales seguros o incentivos económicos para las aerolíneas. Eso sí, para entrar en su territorio será imprescindible haber recibido la vacuna, presentar una PCR negativa y someterse a un test serológico.
Todo ello, además, estará complementado con un paquete de estímulos económicos para recuperar a la industria turística del país dotado con 85 millones de euros. En lo peor de la pandemia, Israel cerró sus fronteras e impuso cuarentena a sus ciudadanos que regresaban del extranjero. El paquete de ayudas va encaminado a paliar el daño que ese cierre a causado al sector, que representa alrededor del 3% del PIB y da empleo a 80.000 personas.
Esa estrategia ya le ha dado sus primeros frutos al ser elegido por Reino Unido, uno de los mercados en los que ha centrado su estrategia de captación de turistas en origen, como uno de los integrantes de su lista 'verde' de destinos más seguros, entre los que también están Portugal y Gibraltar. España, donde el nivel de inmunización es todavía mucho más bajo, se ha quedado al margen de esa relación de destinos seguros, lo que obliga a cualquier británico a guardar una cuarentena a su regreso a Reino Unido.
Israel se ha fijado julio como el mes para recuperar una considerable normalidad turística, ya que para entonces permitirá la entrada en el país de personas extranjeras que viajen de forma individual. Un poco antes, desde el próximo 23 de mayo, permitirá la entrada de turistas vacunados que ingresen como parte de un grupo turístico.
Pero en paralelo al refuerzo en las medidas de control para acceder, el Ministerio de Turismo de Israel ha anunciado acciones adicionales para reactivar el turismo desde este mismo verano como la creación y la promoción de grandes eventos internacionales al aire libre impensables todavía en muchos países.
Es el caso del Gay Pride, el desfile del Orgullo de Israel, que estará abierto a todos los visitantes vacunados que viajen en grupo y que podría ser el único que se realice de forma presencial este año. También se están preparando grandes competiciones deportivas como la Abraham Cycling Cup, con los Emiratos Árabes Unidos como coanfitrión, y un festival de música internacional en el Parque Nacional de Timna, entre otros.
En paralelo, el país mediterráneo va a lanzar una ambiciosa campaña para promocionarse como destino con un alto porcentaje de población inmunizada. Lo hará mediante inserciones de publicidad exterior en puntos estratégicos de las principales capitales del mundo, como en el emblemático Times Square de Nueva York o el famoso Piccadilly Circus de Londres. Su elección no es casual: las autoridades apuntan a Reino Unido y Estados Unidos como mercados emisores por ser también países con altas tasas de inmunización.
Una de estas campañas se desarrollará en Dubái, lo que supone un paso histórico al ser la primera vez que Israel promueve una campaña de este tipo en los Emiratos Árabes Unidos. La promoción será diferencial según las características de cada mercado destino, pero el mensaje común será la seguridad.
Para facilitar la operación de rutas aéreas con Israel, la ministra de Turismo, Orit Farkash-Hacohen, anunció recientemente el restablecimiento de una directiva para incitar a las aerolíneas extranjeras a operar vuelos al Aeropuerto Internacional Ramon, ubicado a las afueras de Eilat.
Dicho incentivo, que ya estaba en vigor antes de la pandemia, tiene un límite de 6,3 millones de euros y permitirá a los transportistas foráneos recibir incentivos financieros por cada turista que trasladen a Israel.