Vista aérea del edificio sede de Fundesem, propiedad del Ivace. Foto: APALICANTE. Punto y final, al menos por ahora, a la crisis de la escuela de negocios alicantina Fundesem Business School (FBS), con el desenlace menos deseado y esperado por todas las partes. Tras la renovación y renegociación del contrato de alquiler entre la fundación de la escuela y el Ivace, propietario del edificio, para amortizar la deuda acumulada de más de 1,1 millones de euros por impago de la renta desde 2014, Fundesem ha seguido sin poder hacer frente al alquiler rebajado en los últimos tres años, y a falta de dos para finalizar el convenio, el Ivace ha decidido rescindirlo.
Esto supone que, con un plazo prudencial para facilitar la operación, la escuela de negocios alicantina deberá abandonar el edificio que se construyó para ser su sede, del cual pasará a disponer su propietario, el Instituto de Competitividad Empresarial. Pero no solo eso: el 'desahucio' de Fundesem no extingue la deuda, que en estos momentos y tras nuevos años de impagos (con la excepción de 60.000 euros entregados en 2019, tras la renegociación del importe) se eleva ya a 1,65 millones de euros. El consejo del Ivace, que este miércoles aprobó por unanimidad rescindir el alquiler de Fundesem por incumplimiento reiterado de sus compromisos, también aprobó reclamar esa deuda por las vías que sean necesarias.
El patronato de Fundesem, tras conocer la noticia, se reunió de urgencia la tarde de este miércoles para analizar las implicaciones de la decisión del Ivace y estudiar posibles líneas de actuación. La escuela de negocios esperaba que el Consell autorizase la llegada de la Universidad Europea como inquilina del 50% de un edificio infrautilizado, en una jugada a tres bandas que ayudaba a paliar sus problemas económicos, y se ha encontrado con un doble golpe: la negativa a esta operación (al no tener encaje en el convenio del edificio), y la rescisión del alquiler a dos años de que venciese el último contrato.
La intención de Fundesem es seguir adelante como escuela de negocios, aunque según la vía por la que el Ivace reclame la deuda, esta podría terminar con su liquidación. Eso sí, hace dos años, la fundación creó una SL a la que le ha traspasado el negocio educativo, pero no la deuda con el Ivace, de forma que la hipotética liquidación de la fundación histórica no implicaría, en principio, la desaparición de dicho negocio formativo. En todo caso, y aunque la intención es pelear hasta el final por seguir en su sede actual, este desenlace obligaría, asumiendo que Fundesem pueda sobrevivir, a buscar otro emplazamiento.
Y al mismo tiempo, deja al Ivace como dueño de un enorme edificio en el Cabo de las Huertas al que habría que buscarle uso. Entre los futuros usuarios del inmueble no se descarta a la Cámara de Comercio de Alicante, en busca de nueva sede y que, con Carlos Baño como presidente, ha rechazado en principio construir una nueva. Cabe recordar que Baño, entonces vicepresidente de Juan Riera, fue el artífice del acuerdo con Fundesem para alquilar una parte del edificio para impartir su propia formación, y que ya entonces se especuló con un acuerdo más amplio. ¿Podría el inmueble de Fundesem ser su sede? Podría. Pero habría que cambiar el convenio, y en todo caso el interés de la Cámara en el edificio buscaba también salvar la escuela de negocios, cosa que ahora parece descartada.
Cabe recordar que Carlos Baño pedía este mismo martes a Climent, en su toma de posesión como presidente de la Cámara, que frenase la llegada de la Universidad Europea el edificio para recuperar su uso formativo público, en clara alusión a las opciones de la Cámara, entidad de derecho público, pero también a la pervivencia de la institución. En todo caso, el punto del orden del día del consejo del Ivace relativo a Fundesem estaba previsto desde hace un mes, cuando se convocó la reunión, por lo que Climent lo desvinculó de la petición de Baño en conversación con Alicante Plaza.
El conseller lamentó el desenlace de Fundesem porque "nadie tenía más interés que yo en salvar la situación, por alicantino, y por lo que Fundesem significa para las empresas de la provincia". No obstante, el conseller señaló que "les hemos dado muchas oportunidades y no hemos visto respuesta por su parte", en alusión a los constantes impagos del alquiler. "Nosotros creemos que es importante que haya una escuela de negocios para formar ejecutivos para las empresas alicantinas, pero lo que no puede ser es que la financie el Ivace".
Por su parte, el alcalde de Alicante, Luis Barcala, lamentó en un comunicado la decisión del Ivace después de que el Ayuntamiento aprobara la semana pasada un acuerdo para habilitar a FBS a compartir el uso formativo de la parcela municipal que ocupa el edificio con otras entidades de derecho público o privadas, como una vía para facilitar la supervivencia de Fundesem. "Hay que lamentar que pueda desaparecer una escuela de negocios tan prestigiosa y alicantina por donde han pasado miles de personas durante todos estos años. Hemos intentado por todas las vías para sostenerla, y sentimos que la Generalitat haya optado por esta solución que la aboca a una situación extremadamente complicada".
