A los diecinueve años ya tenía claro que su pasión eran los mercados financieros. Ahora, desde su escuela, acerca a futuros traders la realidad bursátil desde un punto de vista profesional
VALÈNCIA.- Javier Lorenzo Matamoros (València, 1989) reconoce a Plaza que es un «apasionado de los mercados financieros» a los que está ligado desde que tenía diecinueve años, pese a que en su familia nadie había tenido relación alguna con los mismos. «Llevaba un año jugando al póker online y dedicando mucho tiempo a estudiar estrategias y formas de juego para mejorar, cuando me matriculé en una asignatura optativa en la facultad sobre la introducción a los mercados. Me llamó mucho la atención las similitudes entre el póker y la bolsa en cuanto a la gestión del riesgo y de las emociones a la hora de tomar decisiones».
Diplomado en Ciencias Empresariales por la Universidad de València, técnico en la gestión de carteras por el Instituto de Estudios Bursátiles (IEB) y posgrado de experto en bolsa y divisas por Bolsas y Mercados Españoles (BME), Lorenzo fue bróker en una entidad alemana especializada en derivados financieros durante seis años. Fue entonces cuando decidió montar su escuela Jlorenzotrading.com, con el fin de «acercar a los traders/inversores a una visión lo más profesional posible del mercado de una forma realista, cercana y directa, siempre tratando de aportar valor. Creo que es lo que falta en esta industria, que alguien te diga ‘esto es muy difícil y es muy complicado ganar dinero operando en bolsa’, pero si haces las cosas bien, estableces un buen plan y con paciencia puedes conseguirlo. Normalmente te venden que es muy fácil o que con una estrategia mágica te forras, pero hay mucho vendehúmos alrededor de los mercados».
Aficionado al fútbol —«llegué a jugar en División de Honor de juveniles pero lo dejé porque no tenía tiempo»—, al pádel y a viajar, reconoce que, hoy por hoy, su mayor hobby es estar con su hija Laura, que apenas cuenta con un mes. Asimismo ha participado en más de seiscientas conferencias y seminarios, tanto en España como en varios países latinoamericanos, además de impartir mensualmente en torno a medio centenar de webinarios.
* Lea el artículo completo en el número de septiembre de la revista Plaza