Josep Alandete. Foto: Borja AbarguesGANDIA. El gandiense Josep Alandete ha pasado a la primera fila de la política tras ser el más votado en las primarias que Compromís celebró a mediados de junio para escoger a su cabeza de lista en Gandia, después de que Lorena Milvaques anunciara que deja la política. Su candidatura fue una sorpresa pero también su victoria: Logró el 53,2% de los votos frente al 46,8% que obtuvo la concejala de Políticas Económicas, Alícia Izquierdo. Lo hizo, asegura, porque “creía que el proyecto de Compromís podía crecer con mi perfil”.
Da un paso al frente pero lo cierto es que Alandete ha estado siempre vinculado a los movimientos sociales, culturales y políticos de la ciudad. De hecho, es uno de los históricos del valencianismo en Gandia y en las elecciones de 2015 formó parte del equipo que fraguó el pacto entre el Partido Socialista y Més Gandia (coalición integrada por Compromís, Esquerra Unida y Esquerra Republicana) para formar gobierno —con el apoyo de Ciudadanos—. “Pensaba y pienso que era muy importante empezar a cambiar los aires del Ayuntamiento, al igual que ahora pienso que, de lograr la alcaldía, lo conseguiremos aún más”, resalta sobre aquellas negociaciones que quitaron la alcaldía al Partido Popular liderado por Arturo Torró.
-Su candidatura fue toda una sorpresa, ¿por qué decide presentarse a las primarias?
-Efectivamente. No lo tenía previsto pero faltaban unos pocos días para que terminara el plazo de presentación de candidaturas y pensé que podía aportar todo mi bagaje al proyecto de Compromís. Lo consulté con la familia, me apoyaron, y di el paso. Lo hice porque era importante para el bien del partido y de la ciudad, no porque quisiera tener algún tipo de protagonismo. No he dedicado mi vida social y política a conseguir cargos y los que haya podido ejercer han sido por dedicación al bien común.
-Es Catedrático de valenciano en el instituto Ausiàs March y profesor asociado de la Universitat Politécnica de Valencia, ¿podrá lidiar su vida personal y profesional con la política?
-En principio no pienso abandonar nada porque creo que la política no ha de ser un oficio, se ha de compaginar con la vida de cada uno. Ello no quiere decir que no me dedique en cuerpo y alma a la ciudad; ahora desde la campaña y después donde los votantes elijan, que espero que sea la alcaldía.
“No he dedicado mi vida social y política a conseguir cargos”
-¿Cuáles son las líneas que quiere para Compromís?
-La primera de las ideas es que ese proyecto de Compromís, que ya ha demostrado a todas las valencianas y valencianos que es un proyecto de progreso y positivo para el bien común de todos, gestione la ciudad de Gandia. Eso sí, no me presento para cumplir el ideario de mi partido sino para servir a los vecinos de Gandia. Es el momento de que Compromís se presente en solitario delante de la ciudadanía. Me apetece ese reto.
-¿Y su segunda idea?
-No perder ningún voto del valencianismo y de la izquierda. En 2015 se perdieron 3.200 votos de la izquierda, que configuraron el tipo de gobierno que tenemos, en minoría, e intentaremos que no vuelva a ocurrir. En cualquier caso, será la Asamblea de Compromís quien decidirá el tipo de pacto, si hay, y la manera en que Compromís se presentará. No hay duda de ello pero veo muy probable que no se pierda ningún voto.
-¿Quién le gustaría que le acompañase en su equipo?
-Habrá unas primarias —después del verano— donde las preferencias de los votantes ordenarán a los candidatos de los primeros puestos de la lista. Mis preferencias personales no las manifestaré en público pero considero que cualquiera de los que se presenten formarán un gran equipo. De hecho, a los tres candidatos (Alicia Izquierdo, Ernest Rodrigo y Carmen Ferrer) les dije el mismo día de las primarias que contaba con ellos.
-¿Cómo ve Gandia actualmente?
-Ha sido una etapa de transición y Gandia ha mejorado en la adecuación de los gastos a los ingresos pero todavía le hace falta dar el salto cualitativo en muchos aspectos económicos y sociales. Pondremos esas prioridades de Compromís, que son ese servicio al bien común y favorecer al ciudadano.
“En 2015 se perdieron 3.200 votos de la izquierda e intentaremos que no vuelva a ocurrir”
-¿Puede dar algún ejemplo?
-Desde mi punto de vista los sectores deben estar equilibrados y a la vanguardia de cualquier innovación que pueda llegar. Los sectores terciarios se deben adaptar a la nueva realidad pero también hay que cuidar el comercio urbano, que para nosotros siempre ha sido una prioridad. Evidentemente, en turismo hay que mejorar su calidad y combinar la oferta existente con aspectos medioambientales y culturales para hacerla más atractiva y desestacionalizarla. En el plano de la industria es necesario una conjunción de todos los agentes para dar ese salto cualitativo.
-Y usted, de ser alcalde, va a aportar a la ciudad….
-Capacidad y trabajo, que irán enfocados al bien común de la ciudadanía. Conseguiré lo que conseguiré, pero sí prometo ese trabajo. No voy a hacer promesas vacías, voy a seguir siendo como soy y, si algún día cambiara, me iría porque para mí es mucho más importante mantener mi forma de ser que cualquier cargo.
-Gandia es una plaza complicada…
-Sí, pero también lo es València y se están haciendo muchas cosas. Sabemos las dificultades pero hay que tener claro cuales son las prioridades y a partir de ahí trabajar. Ha de haber imaginación, complicidad entre todos los agentes y mucho trabajo. Intentaré que el máximo de proyectos sean de acuerdo, no solo del gobierno sino con los grupos municipales. Pueden haber diferencias ideológicas pero si se intenta conseguir el bien común, se llegará a acuerdos con quien sea. De eso no tengo ninguna duda.
