VALÈNCIA. (EFE). La Asociación Gremial del Taxi de València ha asegurado este jueves que si finalmente se aprueba la próxima semana en Les Corts la nueva ley del taxi el sector se verá "gravemente afectado".
Según han indicado en un comunicado, la ley provocará "cientos de despidos" de trabajadores y "una gravísima limitación de derechos" a los taxistas que sean autónomos.
El gremio cree que el PSPV, que "controla" la Conselleria de Vertebración del Territorio, "ha ninguneado hasta extremos jamás vistos" las más de doscientas enmiendas presentadas por los grupos parlamentarios y las asociaciones, sin estudios previos de necesidad y en contra del informe del Comité Económico y Social, han asegurado.
Los taxistas critican que la nueva ley propiciará el despido de los conductores asalariados, que los taxistas no puedan mantener su licencia después de la jubilación o teniendo una incapacidad permanente, la desprotección de los hijos de los taxistas fallecidos o la limitación de competir con los Vehículos Turismo con Conductor (VTC) en igualdad de condiciones.
También señalan que quien tenga más de una licencia adquirida y otorgada legalmente por herencia o compra, no pueda explotarla con conductores "creando empleo", y que desaparezca la garantía jurídica de que la licencia tenga carácter indefinido.
La asociación señala que la ley anterior estuvo consensuada por taxistas, usuarios y administración, reconocía los derechos de los trabajadores de este sector y fomentaba el trabajo autónomo.
"Nadie puede comprender la cruzada emprendida por Ximo Puig (dado que es un empeño personal) en generar conflicto donde no lo había e imponer un modelo de taxi sobre el que los tribunales ya se han pronunciado en contra en otras comunidades, provocando la movilización del sector, conflictividad social y un enorme perjuicio para los taxistas autónomos", han afirmado.
Ha manifestado que cuando los problemas del taxi son "muy graves" y se centran en "la proliferación de vehículos que les quitan el trabajo en manos de multinacionales no españolas, como UBER", Puig pretende "atomizar el sector para debilitarlo aún más si cabe".
Si el Consell sigue adelante con la aprobación de la ley, los taxistas llevarán a cabo movilizaciones y emprenderán "un largo recorrido judicial"