MADRID (EP). El Ibex 35 se ha revalorizado un 15% durante los cuatro años del Gobierno de Mariano Rajoy, desde niveles inferiores a los 8.500 puntos que marcaba el selectivo un día antes de su toma de posesión, mientras que la prima de riesgo española se ha reducido en más de 200 puntos básicos.
En una Legislatura marcada por el rescate bancario en julio de 2012, cuando la prima de riesgo se disparó por encima de los 600 puntos básicos, la política económica de España no sólo se ha erigido como el principal fundamento de los mercados, puesto que las medidas excepcionales impulsadas desde el BCE han pesado en el ánimo inversor durante la crisis.
Un día antes de que Rajoy jurara su cargo como presidente del Gobierno, el Ibex se establecía en los 8.454 puntos, con la prima de riesgo española en los 316 puntos. Cuatro años después, el selectivo español ha alcanzado los 9.717 enteros en la última sesión antes de las elecciones generales y la prima se ha quedado en los 114 puntos básicos.
Las inyecciones de liquidez, la compra de deuda soberana y los tipos de interés cercanos al 0% en aras de favorecer la recuperación y frenar el riesgo de deflación se han convertido en un bálsamo para el mercado. Eso sí, la mejora de las perspectivas económicas de España y el freno a la sangría del paro han posibilitado el proceso de recuperación, favorecido en los últimos meses por la caída del petróleo.
Pese a la mejora en los mercados, el Ibex aún no termina de despegar, afectado especialmente por la coyuntura exterior (Grecia, China y los países emergentes de Latinoamérica) y los cambios en los precios del petróleo, y ha roto a la baja las previsiones de los analistas que apuntaban a que cerraría este año cerca de los 12.000 puntos, una barrera psicológica que aún queda muy lejos.
El selectivo se encamina más bien a anotarse pérdidas anuales, con la vista puesta en el resultado de las elecciones y la influencia de los posibles vaivenes en los acuerdos entre las distintas fuerzas políticas.
Sin embargo, el analista de XTB Javier Urones ha destacado que el selectivo español ha demostrado en los últimos meses "estar vacunado de toda la vorágine política", puesto que se ha comportado igual que el resto de selectivo europeos.
Eso sí, ha certificado que el Ibex ha ido mostrando un peor comportamiento conforme se ha ido acercando la fecha de las elecciones. "Este hecho ha coincidido, además, con el repunte del PP, por lo que establecer una regla de victoria PP-subidas en Bolsa parece muy arriesgado", ha indicado.
El experto ha precisado que el volumen negociado ha descendido en los últimos dos meses un 10% con respecto a la media anual, algo más relacionado con la decisión de los inversores institucionales de esperar a después de los comicios para invertir una vez que se despeje el panorama político para los próximos cuatro años.
Urones no ha entrado en analizar cuál sería el recorrido del Ibex en el caso de que PSOE y Podemos formaran un Gobierno de izquierdas, pero ha recordado que en los meses en los que la formación de Pablo Iglesias lideraba las encuestas -coincidiendo con el auge de Alexis Tsipras en Grecia- el selectivo se comportó "de forma muy negativa".
"Podemos deducir que ese tipo de ideologías suelen tener mala interpretación por parte de las bolsas, pero faltarían más ejemplos para poder afirmarlo con rotundidad", ha apuntado el analista, que, basándose en los sondeos, no contempla un resultado electoral que posibilite una coalición en el Gobierno entre el PSOE y Podemos.
No obstante, ha advertido de que la inexperiencia en materia de gestión de ambas formaciones "puede pasar factura a la renta fija, concretamente a través de la prima de riesgo". Pese a todo, Urones no contempla "un movimiento significativo". "Tan sólo los primeros datos de empleo y crecimiento con el nuevo Ejecutivo nos pueden ayudar a establecer unas previsiones en esta materia", ha advertido.