VALÈNCIA. (VP/EP). La Cabina-Festival Internacional de Mediometrajes de València, que celebrará su XI edición del 14 al 24 de noviembre, proyectará dentro de su sección 'Amalgama' (dedicada a películas de no-ficción y otros lenguajes) diez cintas que abren el debate sobre temas como el derecho a no ser madre o la conversión religiosa.
Amalgama, cuyas proyecciones se llevarán a cabo en el Aula Magna del Centre Cultural La Nau de la Universitat de València, acoge trabajos audiovisuales que resultan "difíciles de clasificar, a veces extraños, poco convencionales; piezas que sorprenden, que engañan, que desconciertan y que buscan un espectador abierto, curioso y desprejuiciado", explican los responsables del certamen a través de un comunicado.
En Amalgama se han seleccionado una decena de films que abordan "temas candentes", como el derecho a no ser madre, la conversión religiosa y el desmantelamiento de las explotaciones mineras en España. Las proyecciones trasladan a preocupaciones y singularidades en otras esquinas del mundo, como el caso de la situación de los sin techo en Canadá, la precaria desactivación de minas antipersonas y bombas dejadas por ISIS en el Kurdistán iraquí o el romanticismo de la ruta ferroviaria del Transiberiano en los vagones de tercera clase de un tren que enlaza San Petersburgo con Shanghai.
Esta sección destaca por la cantidad de producciones españolas. De los diez mediometrajes, cuatro son de España: Puta Mina (Colectivo Puta Mina), Converso (David Arrativel), [M]Otherhood (Inés Peris y Laura García) y Midnight Ramblers (Julián Ballester). Dos son de Francia, Retour à Genova city (Benoît Grimalt) y Vostok nº20 (Elisabeth Silveiro); uno de Portugal, Antonio e Catarina (Cristina Hanes); O conto do burro amarelo (Daiana Mendes) de Brasil; Facing death with wirecutte, del director iraquí Sarwar Abdullah y, por último, Das Gestell (Philip Widmann) de Alemania.
Un jurado compuesto por profesionales de la cultura y el audiovisual otorgará un premio al mejor mediometraje de Amalgama. El nombre, por otra parte, ha sido escogido como homenaje a la película de vanguardia A Mal Gam A de Iván Zulueta, rodada en 1976. Como novedad este año, se ha añadido el premio a mejor montaje además de las menciones especiales.