VALÈNCIA. El Pleno de Cámara Valencia aprobó este lunes las cuentas anuales de de 2018 con un déficit de 147.452 euros frente a los 7.000 de superávit del presupuesto aprobado para ese mismo ejercicio. Según destaca un comunicado de la entidad, que aún no ha hecho públicas los resultados en su portal de transparencia, el resultado negativo está por debajo del registrado en el ejercicio anterior.
La entidad que preside José Vicente Morata, quien desde 2010 compagina el puesto con el de presidente del Consejo de Cámaras de la Comunitat, dio luz verde también al balance de situación, la cuenta de pérdidas y ganancias y la memoria económica y de actividades de la institución tras el visto bueno el Comité Ejecutivo.
La Cámara destaca que las amortizaciones por inmovilizado han ascendido a 981.359 euros, ligeramente por encima del presupuesto, mientras que el Ebitda –resultado bruto de explotación– arroja un resultado positivo de 606.487 euros.
Durante el pasado ejercicio, la Cámara preveía unos ingresos totales de 9,69 millones de euros. De ellos, algo más de 3 millones corresponden a la actividad propia de la institución (ventas y servicios), mientras que el grueso de los recursos procede de programas y convenios, con 5 millones, y de las subvenciones de capital que recibe: 228.000 euros.
La recién estrenada fórmula de pago por asientos en el comité, las aportaciones voluntarias que realizan grandes empresas para tener representantes en los órganos de gobierno al margen de los elegidos por los sectores económicos, debía reportar 170.000 euros.
Los datos que sí se han hecho ya públicos son los de las retribuciones del personal directivo, tanto de la Cámara de Comercio como del Consejo de Cámaras de la Generalitat. José Vicente Morata, como máximo responsable de la Cámara de Valencia, recibió 51.169 euros en concepto de salario. A ellos se suman los 20.033 euros que recibió como gastos de representación como presidente del Consejo de Cámaras. En conjunto, más de 71.200 euros.
Por lo que se refiere al resto de altos cargos de la Cámara de Valencia, la secretaria general, Ana Encabo, percibió un salario bruto de 103.061 euros, mientras que el director gerente, Jorge Linares, ingresó 83.057 euros brutos.
En el caso del consejo autonómico, las retribuciones salariales brutas devengadas por la la dirección general fueron de 70.098 euros el año pasado.
Por lo que se refiere a su actividad durante 2018, la Cámara de Comercio destaca que 1.875 empresas valencianas participaron en las jornadas sobre mercados exteriores; 67 viajaron con la Cámara en misiones comerciales y 147 mantuvieron entrevistas de negocio en los 11 encuentros empresariales organizados.
En el capítulo de la formación empresarial, 3.619 alumnos pasaron por las aulas de Escuela de Negocios Lluís Vives en cursos de dirección, actualización, máster, posgrado y formación a medida, entre otros.
Otra de las "líneas importantes de actividad" fue la formación para el empleo de jóvenes inscritos en el Programa de Garantía Juvenil, que ayuda a mejorar su empleabilidad. Durante 2018, la Cámara formó a 2.193 jóvenes e insertado a 237 en las 174 empresas valencianas adheridas al programa PICE. La Cámara también participó en cinco proyectos europeos junto con pymes de otros países.