VALÈNCIA (EP). La Catedral de València ha iniciado obras para determinar el origen de las afecciones detectadas en los frescos renacentistas de los ángeles músicos ubicados en la bóveda interior del templo sobre el altar mayor.
Así, la actuación ha comenzado con la colocación de andamios en la parte exterior del ábside sobre los que se instalará una sobrecubierta metálica provisional para poder realizar catas y estudios para conocer el diagnóstico de las afecciones, según ha explicado el arquitecto de la Seo y coordinador de los trabajos, Salvador Vila Ferrer.
Tras la aparición hace cerca de dos años de eflorescencias en varios puntos de los frescos, ahora los trabajos iniciados se centrarán durante seis meses en una "toma de datos", para el estudio de las patologías de los frescos.
Para ello, se cuenta con un equipo formado por restauradores de Bellas Artes y físicos de la Universitat Politècnica y el propio arquitecto responsable de la obra, que asegura, según informa el Arzobispado, que es necesario "no sólo reparar sino averiguar el
porqué de los daños, saber de dónde proceden, para responder con una adecuada intervención definitiva que resuelva el problema".
La sobrecubierta exterior, de chapa y vigas metálicas, que se está instalando ya ocupará un espacio aproximado de 200 metros cuadrados de superficie, se colocará sobre los mismos andamios que "rebasarán en dos metros la altura el ábside". Ello permitirá a los técnicos poder moverse y hacer las catas en ese espacio, con la sobrecubierta como techo, y así tampoco entrará agua en la bóveda en el caso de lluvias.
"Muy posiblemente a finales de este mes podamos llegar a todos los puntos que queremos estudiar, y a partir de ahí, con las conclusiones, se iniciaría la intervención con posterioridad", afirma el especialista.
Para poder realizar las obras, a la altura de la bóveda interior sobre el presbiterio, será instalada una plataforma horizontal flotante, que quedará sujeta desde los andamios exteriores, con vigas que atravesarán el ábside penetrando por los ventanales, "por lo que el espacio inferior, donde está el Altar Mayor, quedará libre y no interferirá el culto y las celebraciones", ha añadido.
Los estudios de los frescos renacentistas, cuya propuesta fue iniciada en 2019, cuentan con la autorización de la Conselleria de Cultura y la licencia de obras del Ayuntamiento, y la aprobación del Arzobispado y el Cabildo de la Catedral. Tras las autorizaciones y permisos, fue seleccionada una empresa constructora especializada para acometer la intervención.
Los frescos de los ángeles músicos son pinturas de la segunda mitad del siglo XV realizadas por los artistas italianos Francesco Pagano y Paolo de San Leocadio en la primera bóveda gótica de la Catedral y fueron hallados el 22 de junio de 2004 durante las obras de restauración del altar mayor de la Seo, después de permanecer más de 300 años ocultos tras la bóveda barroca que fue retirada, recuerdan desde la diócesis.