La CNMV certifica que los mercados españoles mostraron un nivel de estrés bajo en enero

MADRID (EP). La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha constatado que el indicador de estrés de los mercados financieros en España mostró en enero un nivel de estrés bajo, situándose al final de mes en 0,19 puntos, un valor sobre el que oscila prácticamente desde hace un año, según la nota de estabilidad financiera correspondiente el primer mes del año. Los mayores niveles de estrés se observan en el segmento de intermediarios financieros (compuesto mayoritariamente por bancos) y en el segmento de renta fija. En el sector bancario, el mayor nivel de estrés responde a la caída prolongada de las cotizaciones originada por las incertidumbres que pesan sobre el desarrollo del negocio de las entidades y a los aumentos puntuales de volatilidad. Por su parte, los indicadores de liquidez y volatilidad son los responsables del incremento en el segmento de renta fija.

La CNMV ha destacado el contexto de desaceleración mundial actual, relacionado con los desacuerdos en materia de intercambios comerciales, las dudas en torno al resultado final del Brexit o la falta de consolidación fiscal en algunos países europeos. En España, esta desaceleración también se produce, pero a un ritmo inferior al de la zona del euro, y los retos más relevantes de la economía española siguen ligados al elevado endeudamiento de algunos sectores, en particular de las administraciones públicas, al envejecimiento de la población, a las dificultades del sector bancario para elevar su rentabilidad, a la todavía elevada tasa de desempleo y al grado de fragmentación parlamentaria.

Los mercados de renta variable españoles han reflejado estas incertidumbres, que han pesado más que el "relativo buen tono" de la actividad económica. La evolución de las cotizaciones fue especialmente desfavorable en el último trimestre de 2018, cuando el Ibex cedió un 9%, elevando las pérdidas anuales del índice hasta el 15%.

Recuperación del precio de las acciones

Aunque en enero se produjo una recuperación significativa de los precios de las acciones (+6,1%), que "en algunos casos se situaban en niveles atractivos" tras las fuertes pérdidas de 2018, la CNMV ha apuntado que el mercado sigue mostrando una elevada sensibilidad a la aparición de informaciones no alineadas con las expectativas de los analistas. Así, en términos sectoriales, las entidades bancarias son las que atraviesan "un momento más complejo" dada la variedad de factores que afectan o pueden afectar al desarrollo de su negocio.

Por otra parte, la nota de estabilidad resalta los diversos efectos que pueden derivarse del previsible retraso del proceso de subidas de tipos de interés en la zona del euro, a la vista de las declaraciones efectuadas por el BCE. El mantenimiento de los tipos de interés en niveles bajos durante más tiempo reduce el riesgo de incremento de los costes financieros, pero preserva los incentivos a endeudarse en una economía que presenta unas tasas de deuda elevadas.

Asimismo, también mitiga la probabilidad de pérdida de valor de los activos de renta fija a corto plazo pero mantiene los incentivos a invertir en activos más arriesgados. En este sentido, un deterioro adicional del entorno económico podría traducirse en un repunte de las primas de riesgo de crédito de los activos de mayor riesgo y perjudicar a los inversores en estos activos, ha advertido el supervisor de los mercados.