La experta recuerda que las cinco compañías aéreas más grandes de Europa están terminando el año tal y como lo iniciaron: consolidando su posición
MADRID. La adquisición de Air Europa por parte de IAG muestra cómo las cinco compañías aéreas más grandes de Europa están terminando el año tal y como lo iniciaron: consolidando su posición en un sector todavía fragmentado. En conjunto, estos gigantes acaparan más del 50% de la cuota de mercado.
Desde Scope Ratings consideramos que Air Europa, compañía con sede en Madrid y especializada en el servicio de destinos a América Latina, es sólo la última de una larga lista de pequeñas y medianas aerolíneas que han quebrado, se han fusionado o han sido adquiridas en 2019, dejando más franjas horarias y rutas aeroportuarias en manos de IAG, Lufthansa Group, Air France-KLM, easyJet y Ryanair.
Pese al crecimiento del tráfico de pasajeros, el exceso de capacidad y la feroz competencia que presionan a la baja los precios de los billetes y los márgenes de beneficios, están dificultando mucho la supervivencia de todas las aerolíneas, salvo las más grandes. Las pequeñas aerolíneas que dan servicio sólo al mercado europeo han luchado por sobrevivir y ahora vemos que algunas están intentando hacerse con nichos en los viajes transatlánticos y otras rutas de larga distancia.
La adquisición de Air Europa por parte de IAG por 1.000 millones de euros reforzará la posición de la matriz de British Airways e Iberia en España. Air France-KLM también se beneficiará de la quiebra a principios de este año de las compañías Aigle Azur y XL Airways con sede en Francia, al igual que el Grupo Lufthansa del colapso de la compañía eslovena Adria Airways. Además, valiosas franjas horarias del Reino Unido propiedad del recientemente desaparecido Thomas Cook están ahora disponibles ahora para British Airways, easyJet y Ryanair. La presión sobre Norwegian para que reestructure sus finanzas ha conducido a esta compañía low cost de vuelos de larga distancia a vender aviones y reducir el número de rutas.
Creemos que la reestructuración del sector europeo continuará mientras los tipos de interés sigan bajos y las compañías aéreas más grandes y solventes puedan beneficiarse de ello para financiar la adquisición de empresas en quiebra. Para las pequeñas compañías aéreas es más difícil repercutir el aumento de los costes -por la volatilidad de los precios de los combustibles, la apreciación del dólar estadounidense, el aumento de los costes salariales, las tasas aeroportuarias y los reembolsos a los pasajeros- que para las grandes aerolíneas, que también han tenido que hacer frente a condiciones de negocio difíciles este año.
La inmovilización del avión 737 Max de Boeing, la incertidumbre sobre el Brexit y las huelgas de tripulación de cabina, pilotos y controladores aéreos son algunas de las cuestiones que han influido en el rendimiento de las compañías más grandes.
El Grupo Lufthansa (rating 'BBB'/'Estable'), líder en Europa, aumentó su cuota de mercado hasta el 12,3% en 2018 (142 millones de pasajeros en 2018), por delante del 12% de Ryanair, el 9,8% de IAG, el 8,8% de Air France-KLM y el 7,7% de easyJet. El sector europeo de las aerolíneas siguió fragmentado: las demás líneas aéreas conservaron el 49,4 % del mercado. Esta tendencia se ha mantenido en el sector en 2019.
Azza Chammem es analista de Scope