VALÈNCIA. El pasado 25 de junio, Podemos ofreció una rueda de prensa en su sede de la calle Túria para informar de los temas tratados en la reunión del Consell de Coordinació -ejecutiva- que se acababa de celebrar. En ella decidieron remitir una misiva a Compromís y EUPV para tratar de confluir de cara a las próximas elecciones autonómicas y locales. Quizá fue la última atención a medios que la formación morada liderada por Antonio Estañ haga en este emplazamiento.
La dirección del partido de los círculos decidió hace unas semanas que abandonará estas oficinas para centralizar toda su actividad en su otra sede de la calle Cádiz, donde se encuentran las instalaciones que utiliza la estructura local del partido. ¿Los motivos? Quieren reducir gastos, ya que actualmente el alquiler de su sede autonómica supone una inversión de aproximadamente 1.000 euros mensuales para las arcas del partido.
Un dispendio innecesario si se tiene en cuenta que arrendan otro bajo en pleno barrio de Ruzafa -su sede local, La Morada- que tiene el suficiente espacio para albergar desde ruedas de prensa, hasta reuniones de equipos de dirección o eventos culturales que, en ocasiones, suelen celebrar.
Así, durante esta semana, la formación morada está en plena mudanza de todo su mobiliario. Miembros del partido están realizando el traslado de los enseres que tenían en la sede autonómica en la que habitualmente el Consell de Coordinació se reunía para abordar las principales cuestiones sobre las que tomar decisiones.
El partido, además, también tiene previsto realizar obras en La Morada para dividir los espacios que vayan a utilizar la estructura local y autonómica de la formación. No obstante, al no tratarse de un arrendamiento y no tenerlo en propiedad, todavía no está confirmado que puedan proceder a dividir las dependencias.
El caso de Podemos, hasta ahora, era una anomalía. Tanto los partidos tradicionales -PSPV y PPCV-, como los emergentes -Ciudadanos-, cuentan con una única sede en la que se centraliza toda la actividad y vida orgánica de las formaciones. El Partido Popular, de hecho, realizó esta fusión hace casi dos años. En la nueva ubicación no sólo se asientan tanto la dirección regional como la provincial, sino también el PP de València y Nuevas Generaciones.