"La educación ha estado dominada por la ideología y la retórica política"

VALÈNCIA. –Se ha convertido en una referencia a la hora de hablar de Educación en el nuevo siglo, en parte porque su discurso parte por un revisionismo a ultranza de todos los tópicos, y eso suscita interés. Tom Bennett, fundador de ResearchED y asesor en materia educativa del Ministerio de Educación del Reino Unido visitó esta semana el Caxton College para participar en el II Foro de Innovación Educativa.

Con presencia habitual en los medios de comunicación, Bennet ha sido profesor del Corpus Christi College en la Universidad de Cambridge, es columnista semanal del Suplemento de Educación del influyente diario británico The Times y también escribe en The Guardian. Autor de cuatro libros sobre educación, asesor de profesores y colegios internacionales en temas educativos relacionados con la gestión del comportamiento y la integración, está considerado como uno de los nombres de referencia en toda la órbita anglosajona.

En su estancia en València el británico expuso a los asistentes al foro su convicción de que “durante mucho tiempo, la educación ha estado dominada por falsas creencias y dogmas infundados”, tanto en lo que se enseña como en la forma en la que se hace. “Nos enorgullecemos de ser profesionales de la educación del siglo XXI, cuando en realidad gran parte de lo que hacemos está dominado por ideas de antaño que ya pasaron de moda a principios del siglo XX”.

—Enuméreme algunos de los dogmas que según usted han afectado la educación en el último siglo. 

—Hay muchos: por ejemplo, el mito de que los niños aprenden mejor en grupos, o haciendo un trabajo conjunto, o mediante una investigación independiente. Este ethos ‘centrado en el niño’ en la educación ha dominado internacionalmente durante décadas y ha causado un gran daño a la educación de los niños. Quienes lo defienden dicen que hay evidencias documentadas, pero en realidad tiene más que ver con la filosofía del siglo XIX que con la investigación. En realidad, la mayoría de los niños aprenden mejor cuando los instruye un sujeto que cuestiona, explica y revisa cuidadosamente el material con los niños, no dando lecciones, sino instrucción estructurada, directa, con mucho diálogo y retroalimentación.

—¿Cómo puede ser que hayan perdurado tanto tiempo?

—Mitos como estos se producen porque a principios del siglo XX se intentó aplicar el método científico a la educación, pero al final la educación estuvo dominada por la ideología y la retórica política, nunca se recuperó realmente, y a medida que avanzaba el siglo XX estas ideas cobraron impulso hasta se convirtieron en una tradición. La enseñanza nunca ha desarrollado realmente su propia cultura crítica de autoanálisis.

—¿Y quién la controla? 

—Está dominada por guardianes y figuras de autoridad autoproclamadas que prefieren mantener el status quo y atesorar sus referencias. Además, muchos de los mitos más perdurables, como la teoría de los estilos de aprendizaje [que sostiene que los estudiantes aprendan mejor si los profesores se adaptan a su personalidad], nos atraen. Nos gusta creer que cada niño tiene una forma secreta especial de aprender que solo tenemos que desbloquear. Nos gusta la idea de que todos somos especiales.

—Antes ha hablado de la educación centrada sólo en el niño. ¿Quizá un error ha sido olvidar la importancia de la autoridad del maestro?

—A partir de mis investigaciones con las escuelas del Reino Unido y en el extranjero he certificado que es vital que el maestro sea la autoridad en el aula. Los niños buscan esto y encuentran bastante extraño cuando intentamos involucrarlos como iguales democráticos. Necesitan orientación y la seguridad de que alguien se está asegurando de que el aula sea un lugar seguro donde estén libres de intimidación, victimización y donde sean libres de aprender. Tristemente, esta idea tan sencilla parece polémica para muchos.

—Otro mito podría ser la tecnología, estar tan obsesionados por las innovaciones que hayamos olvidado la esencia de la Educación.

—Sí, las afirmaciones que muchos defensores de la tecnología hacen con frecuencia no tienen evidencias que las respalden. A menudo, se basan en estudios de casos pequeños, encuestas o testimonios para justificar su uso. Pero éstas no son bases de pruebas sólidas.

—¿Y por qué son tan referenciadas las innovaciones tecnológicas? ¿Por qué se habla tanto del aula virtual, las nuevas tecnologías...?  

—Existe un conocido sesgo cognitivo, el encanto de la novedad, que sugiere que nos sentimos atraídos por lo nuevo, lo diferente. La tecnología se ha vendido como la gran revolución en educación desde la invención de la televisión. En realidad, es una herramienta de muchas, y costosa. Los docentes deben preguntarse: ¿realmente necesito todo este equipo costoso o puedo enseñar de la misma manera o mejor sin él?

—¿Qué es la Educación?

—¡Casi no tengo idea de lo que significa! Todos los animales aprenden en el momento en que nacen, en un proceso que es bastante natural para ellos: el aprendizaje popular sobre las leyes de la ciencia, la interacción social, etc. Esto es genial, pero la educación formal se ocupa mucho más del aprendizaje complejo sobre un mundo que no es tan fácil. ¡Por eso la educación es tan dura! Es por eso que comencé a investigar para que pudiéramos divulgar las evidencias sobre educación y ayudar a que el mundo sea un poco mejor para los estudiantes y los maestros.