VALÈNCIA. La fusión CaixaBank-Bankia ha generado una gran expectación en Europa al situar a España entre el ‘top 10’ de las entidades bancarias europeas con un mayor peso económico y financiero. Con 664.027 millones de euros en activos, el banco será el décimo de Europa y el primero de España, por delante del Santander y BBVA.
La mayor operación de fusión en el sector financiero en 20 años coloca a España en la competición de los mejores bancos europeos. Caixabank tendrá una cuota de mercado similar a la de las grandes entidades europeos en sus respectivos países. De hecho, según los analistas financieros, el tamaño de la nueva entidad le permite competir en mejores condiciones a nivel europeo.
La integración de Caixabank y Bankia convierte a la entidad en el primer grupo financiero en nuestro país. Nace como un grupo financiero con cerca de 20 millones de clientes y el nuevo Caixabank supone un refuerzo para todo el sector financiero nacional, la economía y el sector empresarial del país, con lo que esto supone para España en un momento tan decisivo.
Otro de los asuntos que los expertos financieros resaltan es que la fusión no ocasiona un problema de competencia en España, tal y como dictaminó la CNMC. La concentración que ya tenía el sistema financiero español, y que ahora se eleva con esta integración, no ha perjudicado a la competencia en los últimos años, sino que los especialistas consideran que la ha fomentado.
También resaltan que en un contexto de gran competitividad en condiciones extremadamente difíciles para el negocio bancario tradicional en el que los tipos de interés negativos parece que van a permanecer en el medio o largo plazo en Europa, ganar volumen es clave para ofrecer un servicio de calidad.
Por último, los especialistas consideran que tras la fusión, Caixabank tiene capacidad para incrementar la rentabilidad, lo que posibilitará un mayor reparto de dividendos a los accionistas: un hecho especialmente importante para los dos accionistas de referencia, Fundación Bancaria “la Caixa” y el FROB. E incluso con la nueva entidad se podrían devolver más ayudas de las que se hubiera devuelto solo con Bankia. La liquidez de esta nueva participación accionarial es mayor. El Estado está en una mejor posición para recuperar parte de su inversión, concluyen los expertos.