VALÈNCIA (EP). La Ley de Infancia y Adolescencia valenciana ha comenzado este jueves su andadura en Les Corts, una norma que la vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, ha calificado de "valiente e innovadora", en "la vanguardia de España en materia de protección y ampliación de derechos".
Así lo ha afirmado Oltra en el debate sobre la totalidad del proyecto de la ley, que segun ha resaltado da a los niños la consideración de ciudadanos de pleno derecho al tiempo que impulsa su participación en la vida pública y avanza en la promoción de sus derechos.
Ha resaltado que implica cambiar el punto de vista tradicional de las personas adultas sobre la infancia y la adolescencia, "deja de ver a los niños y las niñas como mini-adultos o como una propiedad de las familias", porque son "sujetos de derecho, y de un derecho especialmente protegido".
Oltra ha destacado que "se les reconoce por primera vez como ciudadanía activa y de pleno derecho en todos los ámbitos de las esferas públicas y privadas y se garantiza su carácter universal y efectivo".
Entre los derechos que esta ley incorpora, la vicepresidenta ha apuntado a la eliminación del límite de edad para que se escuche su opinión antes de dar el consentimiento informado en los tratamientos médicos, además de fijar la obligación del padre, madre o tutores a escuchar sus opiniones y respetar sus convicciones en referencia a la libertad de ideología, de conciencia y religión.
Además, reconoce también el derecho a la identidad y la expresión de género de los niños, niñas y adolescentes, y en la esfera pública se garantiza, "el derecho a escuchar su opinión", por lo que las administraciones consultarán en aspectos que los afectan, y ha citado como ejemplo las políticas de ocio educativo o el diseño urbano de los municipios.
Esta ley también reconoce su derecho a participar en el ocio educativo que se desarrolla fuera de la enseñanza reglada y del ámbito familiar, como ya se avanzó en la ley de juventud que aprobaron Les Corts.
Así, establece que durante la educación primaria se procurará que las actividades de aprendizaje programadas puedan hacerse dentro de la jornada lectiva y que el exceso de deberes no signifique una reducción del tiempo de juego, porque según Oltra, el juego "socializa y hace soñar".
Asimismo, la norma fomenta el buen trato en la familia promoviendo los afectos con medidas transversales como programas de orientación familiar para la corresponsabilidad, coparentalidad positiva, promoción de horarios y condiciones laborales compatibles con la crianza, fomento de las competencias parentales o educación emocional", entre otros.
En el ámbito de la protección se abre la posibilidad de que la Generalitat se persone como acusación popular en los casos de violencia contra las personas menores de edad. Además, en los casos de agresión machista o violencia intrafamiliar, el Consell impulsará que sea el agresor y no la víctima la que abandone el domicilio familiar.
Dentro del fomento de la desinstitucionalización, la ley incluye novedades sobre la acción protectora que se ejerce sobre los chicos y chicas tutelados por la Generalitat una vez cumplen la mayoría de edad, como la creación de programas para la preparación de la vida independiente, que incluyen acceso preferente a la educación postobligatoria o a programas de inserción sociolaboral, entre otros.
En lo concerniente a los niños y niñas que están bajo la tutela de la administración, esta ley fomenta la acogida familiar porque es "el mejor entorno para la crianza de una persona", ha subrayado la vicepresidenta del Consell.
Del mismo modo, esta ley promociona y protege los derechos de la infancia frente las tecnologías de la información y comunicación con programas de educación digital y se promoverá el acceso a estas tecnologías en condiciones de equidad.
Otro del los apartados de la ley se refiere a la mejora de los mecanismos de control en videojuegos y películas y prohíbe la venta y publicidad a las personas menores de 18 años cuando el contenido sea pornográfico, fomente las apuestas o los juegos de azar, el consumo de sustancias nocivas, de exaltación o incitación a la violencia, el racismo, la xenofobia, la LGTBIfóbia, el machismo o cualquier tipo de discriminación.
La portavoz adjunta del PP, María José Catalá, ha explicado que no han presentado una enmienda a la totalidad al ser conscientes de la importancia de hacer una ley de estas características, pero ha criticado algunos aspectos, como el relativo al aborto al indicar que se garantizará el acceso al mismo en los términos que prevé la legislación: "No hay padres, familias, tutores, nada".
También ha indicado sobre el consentimiento informado ante una operación que "obvian los derechos y deberes de las familias" y ha recordado que la ley estatal dice que debe darlo el representante legal, con lo que aquí se están "laminando los derechos de las familias". "No pueden sustituir el rol de una madre o un padre", ha dicho, para indicar que los populares intentarán mejorar la ley en su tramitación parlamentaria.
En cuanto a Ciudadanos, ha destacado la necesidad de modernizar esta ley, ya que la vigente data de 2008, pero ha mostrado su sorpresa ante las 232 enmiendas presentadas por el Botànic: "No entiendo cómo no se ha hecho una autoenmienda a la totalidad".
El Botànic, por su parte, ha destacado la relevancia de esta propuesta, que pone por encima siempre "el interés general del menor", ha dicho la socialista Concha Andrés, que supone "un cambio de paradigma" para Fabiola Meco (Podemos) y que busca conseguir personas "críticas, libres y comprometidas" para la diputada de Compromís Marian Campello.