El programa de Les Arts Volant se amplía a poblaciones de Castellón y Alicante
VALÈNCIA. El Palau de Les Arts reabrió ayer, tras el parón obligado que se ha llevado por delante el final de la temporada. Si bien la vuelta con el público será mañana en la sala Principal, antes de la presentación de la nueva temporada se ha podido salvar un proyecto que, aunque pequeño, es especial porque es “de la casa”: Les Arts Volant. Desde hace tres años, con el verano, el Palau de Les Arts diseña un camión transformable en una ópera móvil que viaja por diferentes poblaciones para llevar una producción protagonizada por el alumnado del Centre de Perfeccionament. Y este año, por primera vez y tras un acercamiento a fuego lento a lo largo de estas últimas temporadas, la marca Les Arts viajará a las tres provincias, programando dos de sus veinticuatro bolos en Vilafranca del Cid (1 de julio) y Altea (22 de julio).
La producción escogida es la adaptación al valenciano de Il tutore burlato, que, en su formato completo y original, se debería haber podido ver en el coliseo a finales y mayo y principios de junio. Para Les Arts Volant, se ha hecho una versión reducida y adaptada a las limitaciones de escenografía y capacidad musical que tiene este programa, que -por ejemplo- solo acompañará las voces con el piano de Carlos Sanchis.
La que se verá es una nueva producción de Les Arts que recupera, tras casi una década de ausencia en las programaciones, una creación de Vicente Martí i Soler, figura que ha aprovechado para loar Iglesias Noriega en la rueda de prensa de presentación: “fue un virtuoso que compitió al nivel de Mozart”. Y se ha atrevido posteriormente incluso con una analogía: “Mozart era considerado el compositor de la corte y Martí i Soler el del pueblo”. Pues bien, si el año pasado Les Arts Volant giró con una de las primeras obras del austriaco, este verano hará lo propio con el debut del valenciano.
El tutor burlat es una ópera bufa amable, jovial y fresca como el paisaje de la campiña romana donde ocurre su trama. Esta comedia evoluciona desde la crítica velada a las férreas normas sociales establecidas a mediados del siglo XVIII hacia la defensa de la libertad y el amor por encima de la convención y la conveniencia, a la vez que expone con cordial clarividencia el nuevo posicionamiento social de la mujer en los años previos a la Revolución Francesa. El director de escena y encargado de la escenografía es Jaume Policarpo, con la iluminación de Antonio Castro y el vestuario de José María Adame. La responsable de trasladar la letra original al valenciano ha sido Enedina Lloris, que en palabras de Policarpo, “ha conseguido hacer natural que los cantantes utilicen nuestra lengua”.
El trabajo de Policarpo, relatado por el mismo en la presentación de la obra, ha sido la de adaptar a las circunstancias y mantener la sencillez de la obra original: “A mí me gusta hacer escenografías que sean muy dinámicas y buscar reflexiones muy profundas en las obras en las que trabajo, pero me he dado cuenta al abordar El tutor burlat, que en esta ocasión no lo necesita tanto, que tenía que partir de lo que ya tenía y a partir de ahí proponer, no deconstruir”.
Más de una veintena de actuaciones integran el programa de esta edición, cuya gira se abrirá el próximo 27 de junio en la pedanía de Barracas de Aigües Vives. Posteriormente, tendrá parada en Sagunto (28 de junio), Vilafranca del Cid (1 de julio), Potries (2 de julio), Godella (4 de julio), Alcublas (5 de julio), Casinos (8 julio), Palau de les Arts (10 y 11 de julio), La Pobla del Duc (15 de julio), Benirredrà (16 de julio), Ayora (18 de julio), Corbera (19 de julio), Gandia (21 de julio), Altea (22 de julio), Atzeneta d'Albaida (24 de julio) y Buñol (25 de julio).
Tras un paréntesis en el mes de agosto, el equipo seguirá la gira concentrando sus últimas actuaciones en los barrios de la ciudad de València: Benicalap (25 de septiembre), Sant Marcel·lí (26 de septiembre), Malilla-Parc Central (27 de septiembre), Malva-rosa (2 de octubre), Patraix (3 de octubre) y Aiora (4 de octubre).
Aprovechando que era la primera presentación de la institución desde la crisis del coronavirus, el turno de preguntas sirvió para pulsar de qué manera ha afectado y afectará la emergencia sanitaria a la agenda de Les Arts, que concluyó su temporada en marzo, cancelando así decenas de propuestas. Iglesias Noriega ha comentado que su intención es la de "mantener el compromiso con los artistas" y posponer y reprogramar todo lo que sea posible, aunque ha indicado que los plazos y cuadrar agendas es mucho más sencillo para -por ejemplo- un concierto de lied que para un gran montaje de ópera, por lo que algunas de las previsiones para esta temporada no se podrán ver y otras tardarán años en volver.
Por otra parte, el director artístico de Les Arts ha querido adelantar que la siguiente temporada (en la que sí estará la versión completa de Il tutore burlato prevista para verse en la sala Martí i Soler este 2020) no será especialmente larga y sobrecargada, porque si bien va a buscar "ser flexible y hacer lo máximo posible", "el presupuesto y el número de trabajadores de Les Arts es el mismo" y no va a programar "como si fueran tiempos de vacas gordas", temiendo así un posible recorte presupuestario del que -según ha dicho- no tiene noticia.
Xavier Rius, diputado de Cultura de la Diputación de Valencia, ha aprovechado para hacer un llamamiento a las adminitraciones para que "no maltraten a la cultura, el sector más afectado por esta crisis según el INE". En este sentido, sus palabras, rozando el cuestionamiento a las medidas de prevención, instan a los gobiernos a "revisar las condiciones que se le exigen a un teatro cuando se puede ver en los bares mesas de 10 personas juntas", en una clara referencia a la limitación del aforo, que a partir de la fase de nueva normalidad tiene que decidir el gobierno autonómico.